>> Final•

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Cometen mucho, hoy acabamos. 😷

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Erick sonríe feliz de haber tomado una decisión, se levanta de la cama destapandose y sale de esta casi tropezando.

Su decisión lo hace feliz. En todos los sentidos.

Se siente feliz consigo mismo y eso es lo que importa.

─¡Erick! ¿A dónde vas? ─cuestiona Johann, viendolo correr para la sala.

─¡Voy a hacer lo correcto!

─Erick, no caigas de nue.. ─dice hasta que siente una mordida en la parte baja de su pantalón que lo jala hasta una habitación.

─¿No tienes nada mejor que pasar pena e ir detrás de Erick?

─Erick....

─Erick esta yendo a buscar su felicidad, que tiene un nombre y se llama: Joel.

─En ese caso pobre Erick, que triste que tenga de vivir su vida con un Alfa como Joel.

─Más triste es querer a alguien que no te quiere a ti ─suelta sintiendose el ganador de esa discución.

Y lo es, lo sabe.

Por otro lado el ojiverde ya está en la puerta y la abre al mismo tiempo en el que Joel esta parada frente a ella.

─¡Iva por tí! ─dicen al unisonido viendose los rostros con algo de risa y luego continuan─ Te extrañe tanto─ dicen al mismo tiempo suspirando enamorados al verse.

Si se gustan bastante.

El Omega es el que no resiste más y se lanza sobre él para besarlo, el más grande sujeta su cintura para sostenerlo bien y camina con él hasta el sillón sin parar de besarlo en el camino.

Sus labios saben a chocolate y los suyos también, porque ambos estuvieron comiendo mucho chocolate en esa semana de separación.

─Erick ─habla para detenerlo cuando lo quiere seguir besando─ Erick, tranquilo, te quiero hablar.

─Me haces sonar como un desesperado ─dice con un pucherito en su boquita rosa y Joel muere de amor, como cada vez que lo ve.

─Ya se lo que paso ese día, pero primero quiero hablarte yo ─sentencia mirando sus ojos─ ¿Quíeres sentarte encima? ─ofrece señalando sus piernas y el ojiverde abre las suyas para ponerlas a cada lado de su cuerpo.

Se apoya en su pecho y ahí en la sala de su amigo, sentado sobre el hombre que ama, mientras le empieza a contar la verdad sobre todos sus actos, ahí, ahí es donde es el Omega más feliz de mundo.

Joel significa felicidad, Joel significa cambio, Joel significa amor, Joel significa cariño, Joel significa perfecto.

Joel significa su todo.

─Te habias hido, y yo tenía mucha sed ─comienza a contar acariciando su cintura con ambas manos y levanta un poco su ropa pasando sus dedos por su suave piel─ Yo te dije que si podía tomar de tu juguito de naranja y me habías dicho que si, así que apenas te fuiste fue lo primero que hice, lo bebí y de repente me sentí mareado, todo era confuso y distorsionado, todo daba vueltas y así hasta que caí.

─¿Y como así? ¿Qué paso?

─Mi bolsillo derecho del pantalón ─le indica porque no quiere alejar las manos de debajo de su ropa.

Esta calientito.

─Erick, no mi pene, por Dios, te di una indicación ─le alza la voz y el menor hace un puchero dirijiendo la mano a donde el rizado indicó.

Una bolsita.

─Esto es droga ─suelta mirándolo con su boquita entreabierta.

─Hoy me puse a barrer, y cerca del piso de la barra estaba eso, y así es como me di cuenta de.. ¿De que te ries?

─Perdón ─se disculpa tratando de parar de reír─ Es que tu barriendo, y te apuesto que también intestaste hacer algo y te cortaste el dedo.

─¿Cómo lo sabes?

─Soy tu Omega tonto, yo lo se todo.

─¿Entonces si tienes el poder?

─No, era mentira de nuevo ─dice soltando una risita y su narizita se arruga al hacer la expresiones─ Vi tu dedo con un bandita, y lo supuse ─confieza encojiendose de hombros.

Sí, se siente muy ingenuo y credulo. Siempre cae.

─Bebé, te quisiera contar pero es preferible que lo haga ella ─habla acariciando su mejilla y voltea mirando hacia la puerta─ ¡Emilia, ya puedes pasar!

Las castaña entra intimidada por la mirada del rizado sobre ella.

Esta amenazada, luego de varias horas de gritarle y hacerla reflexionar sobre sus actos.

Erick gira para mirarla de pies a cabeza y se siente superior porque tiene a Joel.

Solo él.

─Fui yo Erick, yo fui la que planeo todo desde que te fuiste; puse esa droga en su bebida y se desmayo, lo lleve a su habitación y el jamás estuvo conciente de todo lo que yo le hice, si me correspondio besos y abrazos es porque pensaba que eras tú, no lo hacia pensando en mi, el no me marco era maquillaje, y jamás amo a otra persona de verdad que no fueras tú, el jamás te engaño conmigo. Todo lo que yo te dije esa vez fue mentira.

─Algo más que tengas que decir ─agrega Joel mirándola mal mientras acaricia el rostro emocionado de su Omega.

─Perdón por todo Erick, tu eres el Omega más hermoso que ha pisado el planeta ─añade sintiéndose una fracazada.

─Eso es todo, ahora vete, la puerta te espera ─señala el mayor y esta asiente saliendo de imediato.

─No tenias que ser tan cruel, Joel ─regaña el ojiverde chocando sus narizes.

─Se lo merecía, hablaba muy feo de ti y además me alejo de mi bebé
─dice con un puchero.

─¿Con qué el Omega más hermoso que piso el planeta? ─cuestiona levantando una ceja burlon─ No creo que ella halla dicho eso por voluntad propia.

─Yo le dije, que te lo dijiera.

─¿Por qué?

─Porque quería que te quede claro, si estas muy hermoso.

─¿En dónde nos quedamos? ─pregunta mordiendo su labio inferior mientras sube sus manos a los hombros del mayor.

─En que nos dábamos muchos besitos ─masculla Joel atrayendo su rostro con ambas manos y al besarlo acaricia sus labios con sus pulgares para entre abrir su boquita de vez en cuando.

Se besan muy suave y lento.

Cuando los labios del Alfa chocan con los suyos suavemente provocan ese pequeño sonido de cuando dos personas se besan con amor.

Aman la sensación.























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