Wueno cometen mucho mucho para otro capítulo, y bueno esto volvió a ser kiut :"3
>>>
Erick corre con todas sus fuerzas hacia la cabaña de su Alfa, esquivando y saltando cualquier obstáculo que se interponga en su camino.
Su corazón se acelera más de lo que el debería permitirse.
Sí le gusta bastante.
Descansa unos segundos apoyado sobre un tronco y al terminar continúa con el mismo entusiasmo de antes hasta que choca fuertemente con algo.
Con alguien.
─¿Joel? ─le cuestiona enarcando un ceja al mismo tiempo que trata no explotar de la emoción.
Puto corazón que no aprende.
─¿Erick? ─pregunta igual de confundido─ ¿Qué haces acá? ¿Es decir que hacias viniendo hacia acá?
─No ─niega el ojiverde acomodandose en el piso─¿Tú qué hacias viniendo para acá?
─Yo iba por ti ─sueltan al mismo tiempo y Erick se sonroja notoriamente bajando la mirada.
Todo es muy lindo.
─Erick ─menciona para captar su atención─ ¿No te das cuenta?
─¿D-De que? ─cuestiona nervioso cuando el rizado lo atrae hacia su cuerpo y roza sus labios con delicadeza─ J-Joel.
Su cuerpo está sobre el suyo.
─Nos necesitamos como el aire que respiramos.
─¿Por q-qué dices eso? ─habla tratando de mantener la distancia de sus rostros.
─Porque cada vez que me dices que te vas, sacas los mejor de mi
─responde con una sonrisa mordisqueando su barbilla.─¿Te acostaste con alguien en este tiempo?
─No ─niega con sinceridad.
─¿Me estás mintiendo?
─Sí ─afirma riendo, pero a Erick no le parece divertido.
─¡Joel!
─¿Qué?
─Me gustas mucho.
─Tu también me gustas mucho ─confieza pasando su mano por su cintura─ No tienes idea de cuanto, y por eso estoy acá, en alguna parte del bosque solo contigo.
─J-Joel tu...¿Tú me consideras tu Omega? ─cuestiona con la voz bajita.
─Erick, sabes que yo...
─Oh lo entiendo, era demaciado bueno para ser real ─indica intentando bajar de su encima, fingiendo estar molesto, pero solo logra asimilarse con un pequeño gatito enojado.
Joel lo mira con ternura atrayendolo hacia el nuevamente y acaria su cintura.
─Volvía por ti, porque te necesito y no quiero estar con nadie más que no seas tú a mi lado.
─¿De verdad? ─pregunta mirándolo con los ojitos brillantes y se acomoda mejor sobre su cuerpo.
─Sí, ya te dije que me encantas, todo de ti me fascina, tu cabello, tus ojos, tu nariz, tus labios, tu cuerpo, todo tu es todo lo que esta bien en este mundo.
─¿Lo dices encerio?
─Más que encerío, nene, ¿no te lo había dicho antes en el lago donde te lleve? ¿No lo recuerdas? ─cuestiona tratando de hacerle memoria.
─Sí lo recuerdo, me dijiste que era el Omega más hermoso que habías visto, y luego me llamaste zorra y me dijiste que no te importaba lo que yo hiciese con mi vida.
─¿Sabes? ─dice rascando su nuca─ Mejor no recordemos nada, solo enfoquemonos en nosotros.
─¿Nosotros?
─Sí, nosotros ─afirma con una sonrisa que provoca la de Erick─ No vuelvas con ese idiota, por favor.
─Pero si tu mismo dijiste...
─Yo se lo que dije, y también soy idiota, Er. Un idiota que no te merece, pero desde ahora haré lo que este a mi alcanze para ser digno de tí.
─Sí eres muy idiota ─confiesa riendo contra su hombro.
─Perdón si te trato así, bebé, no es mi intención jugar contigo, yo te quiero mucho ─suspira mirando sus ojos─ ves que no puedo estar ni un solo día sin ya estar volviendo hacia ti, tampoco puedo culparte porque eres tan jodidamante hermoso.
─E-Eh yo...
─No te sientas obligado a decir algo así en este momento, no es necesario, dime lo que sientas cuando te paresca el momento indicado ─dice rozando sus narizes y besa la mejilla del más bajo antes de levantarse─ahora upa porque volveremos a la cabaña.
─¿Upa?
─A mi espalda, bebé ─le indica agachandose y el ojiverde tiene la carita cabizbaja mientras camina hacia él, para subirse.
Joel sujeta sus piernas por atras y el menor apoya su cabeza en su hombro, aspirando el delicioso olor que emana de su Alfa.
Sí, su Alfa.
El jamás tuvo duda sobre sí Joel fuera su Alfa, el lo es porque es lo que su corazón le dice.
─Todo esto es demaciado...
─¿Extraño? ¿Indiferente? ¿Lindo?
─Romantico ─suelta suspirando contra su hombro y se embriaga más con el olor de Joel.
Huele delicioso.
El mayor ríe al sentir al Omega restregando su contra esa parte de su cuerpo, y lo sujeta mejor antes de continuar caminando.
Al llegar abre la puerta aun con el ojiverde en su espalda y rie agachandose un poco para que el menor no se golpee su cabezita con la parte de arriba.
Entra y se arrastra hacia su habitación dejando a Erick acostado en la cama.
─Ven ─lo llama el menor abriendole las piernas al igual que sus brazos.
El mayor ríe acomodando todo su cuerpo sobre el suyo.
Su cabeza esta apoyada en el pecho de Erick y reparte varios besos ahí hasta llegar a su boca.
─Ahora sí, no se siente el vacío que suele haber cuando no estas ─dice mirándolo con adoración y lo besa de nuevo acomodandose mejor entre sus piernas.
Tiene unas muy bonitas.
─Te voy a hacer el amor, bebé.
─¿Por qué? ─cuestiona con una pequeña sonrisa enredando sus piernas en su cintura.
─Porqué ya me canse de fingir, tu eres mi Omega y yo soy tu Alfa, nos mandaron aquí para procrear nuestra especie y es lo que haremos, te haré muchas demaciados cachorritos.
─Es lo quiero ─confieza riendo y comienza subiendo la camiseta del rizado.
─Todo tú, es tan lindo, mi amor.
Erick sabe que ya cayó rendido hacia su Alfa, y ahora que está dispuesto hacer lo que sea por él, sabe que ya no hay vuelta atrás.