Mi profesor de piano [YoonTae +18]

Capítulo VI

...

-Ah~... Ah~ Y-YoonGi~- mi mente está totalmente en blanco, lo único que sale de entre mis labios son gemidos y su nombre, me es difícil articular alguna otra palabra.

No sé cuánto tiempo llevamos haciéndolo pero debo admitir que, cuando el dolor se fue completamente, pude sentir el placer que es tener sexo con alguien, honestamente es lo mejor que he sentido en la perra vida.

-Así, Tae, gime mi nombre- pide para después morder mi cuello, eso duele pero a la vez me excita más

Me acerco más a él provocando que su gran miembro entre más en mí, oh mierda, está dando en aquél punto tan dulce.

-¡Ah~! ¡Más~! ¡YoonGi~! ¡Más~!- grito al sentir que golpea mi punto G. Estoy delirando, carajo.

Me aferro a las sábanas y cierro los ojos con fuerza, mi pecho sube y baja con rapidez, no quiero parar, no ahora, me gustaría seguir toda la jodida tarde y noche.

¿Quién me diría que iba a terminar acostándome con mi profesor de piano? Nadie lo habría esperado, ni yo mismo.

-Ngh~ T-TaeHyung~ Tus gritos me excitan tanto- susurra con voz ronca para después salir de mí sin decir nada, ¡¿Qué?!

Rápidamente me sa media vuelta haceidno que quede en 4, a este momento la vergüenza se ha ido, ahora en lo único que me quiero concentrar es en sentir placer.

Introduce su miembro de una sola haciéndome gritar ante esto, no tardó mucho para volver a tocar mi punto.

Toma mi miembro con su mano y comienza a masturbarlo, no puedo con tanto placer, me siento en el paraíso.

-V-voy a... ¡Ah~!- antes de poder decir algo más termino en su mano y él dentro de mí. Ambos nos tiramos en la cama esperando a que nuestra respiración se controle, me abraza y me atrae lo más que puede hacia él. Sonrío para después cerrar los ojos, estoy cansado y con el cuerpo sudoroso.

-Vamos a darnos una ducha- propone para después ponerse de píe, se dirije al baño, me pongo de píe pero mis piernas no resisten tanto y termino en el suelo, duele, duele- ¡Tae!- exclama mi amado para después dirigirse hasta donde me encuentro, me toma en brazos y me lleva hasta el baño

Me siento inútil justo ahora, no puedo creerlo, ni siquiera pasó por mi cabeza que esto fuera a sucederme.

De la nada su celular comienza a sonar

-Mierda- susurra- Dame unos minutos, cariño, no tardo- dice para después dejarme en la bañera y salir de aquí, ¿Quién lo estará molestando ahora?

Guardo silencio para intentar escuchar su conversación

-¿Qué quieres?... Ya déjame en paz, tú quisiste el divorcio, ahora vive las consecuencias... ¡Sí! Estoy con él, ¿algún problema?... Tsk, eres una maldita desquiciada... Sí, ajá, como digas... Bye- cuando escucho que cuelga el celular comienzo a enjabonarme en cabello rápidamente, mierda, espero que no se dé cuenta que estuve escuchando su conversación

Ahora estoy algo triste, estoy seguro que era su ex esposa, ¿ni siquiera después de divorciados lo va a dejar en paz? Supongo que va a ser algo difícil. Espero que con el tiempo cambie y se consiga a otra persona.

-Ya vine, Tae- finge una sonrisa al entrar, se le puede ver a kilómetros lo mal que lo puso esa llamada

-¿Todo bien?- que idiota soy, no debí preguntar eso

-Sí, no te preocupes, era solo una persona indeseable pero no pasa nada- acaricia mi enjabonado cabello.

...

Miro hacia el techo, no puedo dormir, ¿destruí un matrimonio? ¿Fui la causa del que se divorciaran? ¿Él enserio ya no la amaba? Esas y otras preguntas me atormentan, he arruinado su vida.

Su celular comienza a sonar de nuevo pero él ya está dormido, lo muevo un poco para que se despierte pero nada. Me pongo de píe y tomo aquél aparato, miro la pantalla, es ella. ¿Qué hago?

No lo pienso más y respondo, soy un idiota

-¿Diga?
-¿Quién habla? ¡¿Quién eres tú?!
-Soy Kim TaeHyung, ¿qué se le ofrece a altas horas de la noche?
-¡¿Dónde está mi esposo Min YoonGi?! ¡Exijo hablar con él!
-Tsk, ¿su esposo? Lo siento mucho, él ya está divorciado, además, ahora no se encuentra, para usted ya no estará disponible de ahora en adelante
-Escúchame bien, mocoso, si no te alejas de mi marido te haré la vida imposible, él es solamente mío y de nadie más
-Lo siento, señora, pero para él usted ya es tiempo pasado, si me disculpa colgaré
-¡Te vas a arrepentir, mocoso! ¡Te juro que...!

No dejé que terminara de hablar, para ser sincero, me dio algo de temor las amenazas que hizo, ¿y si enserio me hace la vida imposible? Nah, no creo, pronto encontrará a alguien más para joder.

Me acuesto al lado de mi amado y cierro los ojos.

...

-Debo irme ya, tengo varias llamadas perdidas de mis padres, seguro están molestos- explico a YoonGi mientras me visto rápidamente

-No quiero que te vayas- dice sentado en la orilla de la cama con los brazos cruzados y haciendo un puchero, me da tanta ternura.

-No quiero que me castiguen, o peor, que me saquen de las clases de piano- respondo a mi amado. Cuando estoy listo le doy un beso en los labios.

-Te veo en la tarde en la clase- dice para yo después salir de ahí.

Estoy seguro que mis padres me van a matar
...

Llego a casa y abro la puerta principal para entrar, quito mis zapatos y me dirijo a la sala. Al llegar ahí mis padres están con la mirada fija en mí, se ven enfadados

-Ya estoy aquí- digo siendo obvio, pero no le tomo mucha importancia

-¿Dónde estabas?- cuestiona mi padre con suma seriedad

-En casa de un amigo- miento

-No te hagas idiota, ¡¿Dónde estabas?!- se acerca a mí un tanto amenazante

-Ya te dije, estaba con un amigo- doy media vuelta para marcharme pero me toma de la muñeca con fuerza

-¡¿Por qué no avisaste nada?!- grita más alterado

-No debo avisarles nada...- al momento de decir esto siento un puñetazo en el rostro, caigo al frío suelo, mi nariz sangra.

-¡Inútil! ¡Tu única responsabilidad es llegar a casa! ¡Ni siquiera eres bueno para eso!- patea mi estómago con fuerza haciéndo que casi llore de dolor. Me golpea como si fuera su enemigo.

No le basta con eso y comienza a darme repetidos puñetazos en el rostro, mi madre simplemente se limita a mirar, cómo lo odio.

-¡Ya déjame! ¡Por favor!- suplico

...

Salgo de la casa sin siquiera avisar nada, me dirijo hasta el hotel donde YoonGi está. Llamo a la puerta y espero a que abra. Mi rostro está tan golpeado al igual que mi cuerpo.

YoonGi abre la puerta y, al mirarme, su rostro palideció

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