Día 11

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Usando kigurumis (pijamas de animalitos )

Aioros desde que había vuelto a la vida, pasaba mucho tiempo con Aphrodite, Death Mask y Shura, por ese motivo Dite le estaba haciendo una de sus pijamas de animalito de cuerpo completo, mayormente conocidas como Kigurumis; con ayuda de su fiel novio Death Mask, Aphro le estaba haciendo dos de esos Kigurumis; el de Aioros ya estaba listo, ahora faltaba el de Shura que ya estaba casi terminado.

Y aprovechando que Shura había ido a recoger a Aioros de la escuela, le daba tiempo al pecesito dorado de terminarlo.

Y exactamente así fue, máscara de muerte, le comento a su pareja que sentía el cosmos del centauro y la cabra cerca.

Con ayuda de habilidades especiales como la teletransportación, Dite en compañía de Death Mask, le dejaron ambos Kigurumis a Shura y Aioros, con una carta, cortesía de la excelente caligrafía del italiano.

Cuando el adulto y el adolescente llegaron se encontraron con esa gran sorpresa.

El más emocionado fue Aioros, quien no dudó en quitarse su uniforme de escuela y ponerse el regalo de Dite.

En el proceso, sonrojó a Shura, el español tenía que admitir que el griego tenía el cuerpo de un dios, Shura deleitó su vista un poco, pero por orgullo volteó la mirada y se encontró con la nota que sus amigos les habían dejado.

—Aioros, mira es un regalo de Aphro y Death Mask para nosotros. —A el centauro dorado le brillaron los ojitos y su boquita formó una perfecta O, causándole una diabetes a Shura; la cabra de verdad se había enamorado del griego.

—Shura que esperas, ponte el tuyo.

—Aioros, no seas imprudente, a muchas personas no les gustan que los apures.

—Entiendo, Shura, entiendo...

—Joder tío y esa cara larga.

—Es que quería dibujar este momento para recordarle siempre, pero no puedo ver cómo me queda y ya perdí la práctica.

—Te propongo algo posa para mí, yo te voy a dibujar; desde que te fuiste los fui guardando y para honrar tú recuerdo yo también comencé a dibujar.

—Eso es fabuloso, la persona que me gusta, honró mi recuerdo. Vamos, dibujame y yo te dibujo con el coso que nos regalo Aphrodite.

—El los llama Kigurumis, por los kanjis en japonés...

—Ahora que lo pienso el Japonés no se me da muy bien y aquí en Grecia no lo enseñan.

—Luego te enseño, por ahora, vamos a modelar y lucir esos Kigurumis.

El español y griego pasaron el resto del día, dibujando, riendo, modelando y disfrutando del regalo del pez y el cangrejo dorado.

Shura sintió una calidez imaginable, estando en compañía de Aioros, se había quitado una culpa de encima, creía que Aioros lo odiaría por dibujar y no fue así.

Shura se sentía tan pleno y tranquilo con Aioros que empezó a aceptar sus sentimientos por el griego. Realmente se estaba enamorado, esa admiración estaba evolucionando en un amor puro y verdadero.

Por otro lado, Aioros seguía confundido no sabía si sentía admiración, deseo sexual o amor por el español, pero lo que si sabía es que le encantaba pasar tiempo con Shura y cada día lo quería más.

Quien iba a pasar que una pijama de animalito de cuerpo completo, ayudaría al griego y al español a reflexionar y reafirmar los sentimientos que tenían por el otro.

Dite y Angelo los observaron y ambos que conocían el amor de sobra, se sintieron felices por ellos; realmente estaban hechos el uno para el otro y eso todos los notaban menos ellos. Pero ya llegaría el momento en el que ambos estuvieran juntos como pareja.

30 días con Shura y Aioros. (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora