Supremacía

veinte y uno

La última contienda. Todos estaban allí reunidos para ser testigos del último combate de Supremacía. Todo lo planeado debía rendir frutos en ese momento o sería no sólo un fracaso,sino un total inepto y eso sería devastador para él. Nunca más podría ver a alguien a la cara. Shin lo sabía muy bien. Los supremos kaiosamas no tienen segundas oportunidades de ningún tipo. Cada uno de sus actos debe ser meditado,pues la menor de sus acciones puede cambiar el destino de un mundo,una galaxia o el universo entero.

Un paso a la vez caminaba Shin hacia la plataforma. Con garbo y solemnidad. No lo decía,pero le gustaba la forma en que Bills, imponía su presencia y poder. No lo decía,pero envidiaba un poco el poder de los saiyajin,no lo decía, pero a veces Gokú le resultaba más que sólo impertinente. No lo decía,pero nunca se sintió listo para el cargo de supremo kaiosama;se sentía más como un eterno aprendiz. Tenía todo el corazón volcado en su labor,pero la triste realidad es que eso no era suficiente.

No importaba lo que otros opinaran realmente,si no lo que él pensara de si mismo y no había tenido una opinión muy buena de su persona,desde que conoció a Goku y compañía. Se dejo escandilar por su poder y se sintió inferior,pero...

Día anterior al último combate de Supremacía.
Planeta supremo.
Universo siete.

-...Se que usted,ustedes han salvado la tierra y el universo muchas veces-le dijo el supremo kaiosama a Goku-no puedo estar más agradecido,pero yo soy...¡el supremo kaiosama,el dios guardian de la vida en el universo y mis decisiones son absolutas!

El Saiyajin,su hijo y Vegeta habían ido a hablar con él, respecto al futuro del universo. Los tres estaban muy serios,pero Shin...Shin lo estaba aún más.

-¡lo que estás haciendo no es por el bien del universo! ¡es sólo para tu propio beneficio!-lo acusó Vegeta.

-¿por mi propio beneficio? Se equivoca Vegeta,yo estoy velando por el beneficio del universo enteró,aun cuando eso no sea en beneficio de la tierra-le respondío mirándolo a los ojos-lamento eso. La tierra es un bello planeta y los humanos son buenos seres,pero si no han podido progresar en todo este tiempo,no es mi responsabilidad. Mi deber es brindar los dones a los mortales y las condiciones óptimas a los planetas, para sustentar la vida en ellos y lo hago. Lo de más depende de ellos...

-tu postura es muy cómoda-le dijo Vegeta ignorando el intento de Goku,por apaciguar las cosas.

No es que Gokú entendiera realmente lo que Shin decía, sucedía que él confiaba que el supremo kaiosama no haría algo malo.

-¿postura cómoda? ¿Crees que es fácil para mí tener que dejar que algunos planetas sean destruidos para salvación de otros? Ser un dios no es sencillo.

-fuera de lo que mencionas,no veo que hagas más por el universo...hemos sido nosotros los que hemos mantenido la paz en el universo estos últimos años.

Shin se sonrió...

-y antes de eso...¿quien cree que hacía ese trabajo?-le pregunto el supremo kaiosama-no soy tan fuerte como usted,pero tampoco soy un ser indefenso,señor Vegeta,creo que eso ya le quedó claro. Y antes de que diga otra cosa quiero que usted y todos comprendan algo. Yo soy un díos...

-¡ay supremo kaiosama eso ya lo sabemos!-exclamó Gokú.

-lo saben,pero eso es todo. No me respetan y ¿por qué? ¿por qué soy más débil que ustedes? Al señor Bills los respetan ¿por qué? ¿por qué puede derrotarlos? Entiendan una cosa. Si su raza es tan poderosa y próspero,fue gracias a mí. Los Saiyajin no eran más que una especie de seres belicosos,muy fuertes si,pero desprovistos de otras cosas.Cosas que consiguieron con la intervención de otras razas y el pillaje. Si yo hubiera considerado que eran un peligro hubiera pedido su aniquilación. Pocas veces el señor Bills y yo colaboramos,pero  creanme cuando les digo que si yo le doy una lista para que él borre los planetas que allí señale,lo hará rápido y sin demasiadas protestas,sólo para cumplir con su labor. Si jamás he insistido lo suficiente es porque tengo una visión demasiado optimista y considero un desperdicio que los planetas y sus habitantes sean  borrados.El planeta tierra que tanto aman,fue abastecido por mi. Pueden creer que mi labor es insignificante,pero es mi trabajo el que les permite existir...¡soy un díos! Uno que para nada es inútil-dijo esto mirando a Goku-no olvide que leo la mente....o es que tengo que recordarle que en su pelea con Majin Buu fui yo quien salvo a Gohan o que fui yo quien lo salvo a usted,Vegeta,kamisama y el hombre aquel ¿olvido que fue gracias a mi que se pudo pedir los deseos a Porunga,en Namek? Puedo no ser tan fuerte como ustedes,pero soy quien sostiene su existencia. Ahora con su permiso debo prepararme para el combate de mañana.

Se dio la vuelta para irse cuando escuchó a Vegeta decir.

-buena suerte supremo kaiosama...

En respuesta,Shin sólo levantó la mano y la agito diciendo adiós.

Todos aguardaban su llegada y él manejaba muy bien los efectos dramáticos,pero aparecer con una capucha que le cubria hasta los pies fue más que sólo dramático.La alta y oscura figura subió a la plataforma levitando con suavidad.

-¿habrá realizado algún entrenamiento que le dió nuevas facultades?-se pregunto Rou algo inquieto.

-¿qué tramas ahora,Shin? ¿Con que treta nos vas a sorprender está vez?-penso Kuro.

Los Zen oh sama estaban muy curiosos con lo que veían y sobretodo con la figura encapuchada que estaba de pie frente a sus oponentes.

-supremo kaiosama del universo siete,le recuerdo que no está permitido usar implementos para esconder su cuerpo ya que podría estar ocultando algún arma -le dijo el Gran Sacerdote- descubrace por favor...

Shin lo hizo de inmediato y dejo al descubierto que había deshecho la fusión.