7. Eliz, I'm not fine.

465 37 1
                                    

— ¿Que sucedió?

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

— ¿Que sucedió?

— ¿En cerio caíste por un barranco? — Fulminamos a mal con la mirada haciendo que cerrara su boca de golpe.

Al momento en que entré a la habitación las preguntas empezaron a surgir ahogándome, aún sigo molesta con las dos por lo que no pienso dirigirles la palabra. A menos que sean sinceras conmigo y se disculpen enserio.

Cuando llegamos al castillo zus no dudo en ir a ver su hermano para entregarle el pergamino mientras que yo vine a mí habitación.

— Sigue molesta — Susurra Carlos, no me había fijado en que los dos chicos estaban en la habitación, los han puesto al corriente.

— Vaya, ¿Enserio? Ahora me doy cuenta — Dice sarcástico — No estoy de humor por ahora.

— Lamento mucho que pelearamos eliz, todo fue mi culpa. — Evie saca el tema y yo retrocedo.

— No haré esto.

— Eliz.

— ¡Basta!— grita sin paciencia Carlos haciendo que todos los ojos se posen en él — ¿Pueden resolver sus problemas como personas civilizadas?; son mejores amigas y un chico las esta separando.

Me quitó la camiseta de zus, y dejo mi cabello suelto.

— Bueno, eso fue encantador. — Digo dejándome caer en mi cama soltando una bocanada de aire.

— Enserio que no esta de humor.

— Carlos.

— Solo quiero dormir, hablaremos mañana.

Quitó mis zapatos y mi pantalón de lana dejando un largo camisón como mi pijama.

El hada madrina nos ha permitido hablar con nuestros padres ya que según ella se acerca el día de la familia, y ya que nuestros madres están lejos nos ha facilitado una pantalla.

— ¡No veo ni escucho nada! — Dice la reina malvada buscando algo para encender la pantalla.

— Chicos, acerquense.

— ¡Odio los equipos electrónicos! — Grita cruella.

La pantalla finalmente se enciende permitiendo que veamos a nuestros progenitores, diaval está en una esquina sonriéndonos feliz.

— Eliz, mal — Pronuncia con su voz ronca, se que la utiliza para intimidar a los demás. Pero a nosotras no.

Sonrió al igual que mal que entrelaza nuestras manos.

— Hola mamá.

— Hola diaval.

Pronunciamos en unísono haciendo que la sonrisa de diaval se ensanche.

— Hola chicas — Sacude su mano bruscamente, mamá rueda sus ojos.

— Evie — La reina malvada saluda a su hija alegremente y se fija de la presencia del hada.

The Moons Curse→ Descendants.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora