— ¡Vaya!Uma y caroline se habían quedado boca abiertas ante la vista del gran castillo de evie, ella había trabajado arduo para encontrar un buen precio.
— ¿Esa es...?
— Dizzy — Mi semblante decayó al ver a dizzy y los gemelos profundamente dormidos, miré tanto Celia como a ginger mientras cubrían sus cuerpos con una sabana.
Las lágrimas aparecieron.
Me alejé de la escena sorbiendo mi nariz, era mucho para una chica de 17 años.
Sentí más presencias en la habitación y no me tomé la libertad de levantar mi mirada, sabía quién era.
— ¿No deberías estar molestándome? — Dije con mi voz ahogada, no escuché su característica risa. Pero tomo asiento a mi lado.
— Lo siento — Escuché en susurro, eso me hizo levantar mi mirada de golpe.
No me miraba.
— ¿Que?
Ella suspiró y finalmente dirigió su mirada a la mía, sentí que sus palabras fueron sinceras.
— Lo siento mucho, por todo. Eliz. — Ella me sonrió tristemente al igual qué yo con las lágrimas recorriendo mis mejillas.
— Teníamos que ser mejores amigas — Me Burlé ella negó divertida.
— No te adelantes, aún te odio.
Reímos en unísono y ella me acuno entre sus brazos, yo cerré mis ojos con fuerza.
— ¿Como le dirías un secreto a todos tus amigos? — Ella no dijo nada por un largo rato, me aparté y la miré.
— Bueno, se sincera. Es lo único que puedo decir, todo se sabe en este mundo — Dijo de soslayo, yo pase mis manos por mi rostro y asenti.
— Gracias, caroline.
Fue el turno de ella de asentir, escuche el grito de uma haciendo que nos levantaramos en guardia hacia el salón.
Audrey.
Mal se veía alterada en lo que decía un encantamiento para que el hechizo de audrey parará. Yo retrocedí cuando la vi frente a mí.
Todo se detuvo a mi alrededor, incluso mi corazón.
— Hola, querida princesa. — Su voz me parecía aún mas chillona que la de Caroline.
— ¿Que has hecho con todos? — Alcancé a pronunciar, audrey río mirando a todas.
— Si se mueven, las convertiré en piedra. — Amenazó cuando Dianne dio un paso al frente dispuesta a ayudarme.
— Dejalas en paz — Dije encarándola ella rodó sus ojos, mal habló.
— Por favor, basta de todo esto audrey. Sabemos que no eres mala.
— Mal tiene razón, ¿recuerdas cuándo jugábamos con los animales en el peñasco?
— No llegarán a ningún lado, eliz. — Giró a verme y yo frunci mi ceño. — O debería decir alexandra.
Yo trague cuando todas las miradas se posaron en mi.
— ¿Que? — Segura crucé mis brazos.
— Vendrás conmigo.
— ¿O que? — Ella arqueó una de sus cejas y giró alrededor de mi varias veces, me sentía amenazada.
— Tus amigos y familia. Se convertirán en roca — Recalcó familia, terroríficamente. Me quedaba sin ideas.
— Que gran plan — Susurró Artemis, la Callé con una mirada.
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The Moons Curse→ Descendants.
Fantasía- Se tu misma, y no le hagas caso a los demás. - Demuestren que una villana puede ser cálida sin ser pecaminosa, hijas mías. Es lo único que me suplico antes de partir fuera de su alcance.