27. Leventis.

103 4 0
                                    


Había escuchado el llamado de mí nombre por los alrededores, frunci mi ceño y me aparté de las chicas bajo su mirada confusa.

— Adelantense, veré por ahí. — ellas asintieron y esperé verlas hasta perderse mas allá del castillo.

Cuándo sucedió, me encamine hacía el cuarto de donde provenía el llamado de mi nombre, eran ellas.

— ¿Que hacen aquí? — Grité/Murmuré hacia ellas las cuales sonrieron, cerré la puerta detrás de mí para que no las vieran y sentí sus brazos alrededor de mi cuerpo.

— También te extrañamos, hermana.

Yo rodé mis ojos y reí abrazándolas, cuando se separaron me miraron de arriba a abajo.

— Eres toda una reina, Alex.

— Callate, Dianne.

Mis hermanas rieron y yo bufé cruzando mis brazos.

— ¿Que hacen aquí? Papá las sermoneara si se entera que sé escaparon.

yo arquee una ceja.

— Estamos aquí por ti, Alex. — Habló la menor de nosotras, Artemis.

— Dios mio eso sonó extraño, ¿No creen? — Se burló esta vez camrryn.

— Tontas.

Mis hermanas eran las dignas diosas, con sus figuras atléticas y su físico detonador de hormonas. Eran hermosas, más que yo.

Yo era la mayor de todas, luego de mí seguía Dianne la cual poseía un cabello color dorado claro, con mechones oscuros. Era cautivante y encantadora, tiene unos ojos verde esmeralda y era pálida como yo. Acostumbraba a llevar su capa ondeante ocultando su cabello en una trenza, con su arco y flecha característico como robín hood, era la malhumorada del grupo.

Era irritante.

Y por ultimo, Artemis. Ella era castaña rojiza, con sus ojos color chocolate. Acostumbraba a llevar una sonrisa y chistes a todos lados. Ella era la divertida y la esperanzadora del grupo, era la menor de todas. Con su capa, arco y pequeños cuchillos era letal para su altura.

Todas se completaban, una era ágil, otra era rápida, una era inteligente, la otra era manipuladora, todas habían heredado el temperamento tanto de su madre como de su padre.

Las tres eran las típicas chicas de las cuales te asombrarías con tan sólo verlas caminar, refinadas y con perspicacia.

Alex suspiró notablemente por décima vez en el día, y sus hermanas extendieron sus brazos.

— ¿No te alegras de vernos? — Pregunto Artemis hacia su hermana está rodó sus ojos y se acercó a envolverla en un cálido abrazo cerrando sus ojos.

— ¿Buscas al rey no? — Esta vez pregunto Dianne cuando se apartó respirando hondo, se veía alterada a simple vista.

— De hecho, si. Ben nos tiene preocupados.

Artemis se acercó a su hermana mayor posando su mano en su hombro.

— Te ayudaremos a buscarlo.

— Al igual que la villana de película — Habló Dianne rodando sus ojos.

— Habla por ti — Artemis señaló a su hermana y luego a si misma con dejé de diversión haciendo reír a todas — No buscare a esa porrista.

— Aja si como digas, vamos — A, golpeó su hombro juguetonamente y juntas abandonaron el lugar.

— No les has dicho, ¿no? — Preguntó A hacia su hermana la cual iba callada mirando al frente escéptica, está ladeó su cabeza.

— Aun no, pero tendré que hacerlo algún día.

Su hermana le sonrió para calmarla lo cual lo hizo un poco, las tres caminaron a raya buscando por todo el lugar a audrey.

No lo lograron.

Vio como las chicas caminaban por el pasillo entrando a la habitación de la pelirosa y las siguió con sus hermanas pisando sus talones.

— ¿Han encontrado algo? — Preguntó Alex mirando a sus amigas, éstas no hablaron en las que veían a las tres chicas a su espalda.

— ¿Quienes son? — Preguntó ginger confundida, era el momento de confesarlo eliz.

— Son mis hermanas.

Silencio.

Todas centraron su mirada en la de cabellos oscuros, esta pudo encoger sus hombros y dirigir sus ojos a cada una de las chicas en la habitación.

—  Que sutil — Escuchó detrás de ella, eliz bufo.

Su hermana menor siempre tendía a arruinar los momentos incómodos, la adoraba.

— ¡Artemis! — Escucho el regaño en susurró por parte de Dianne.

— Hablaremos de esto luego.

— Sí que tienes que hablar chica — Dijo uma recostada en la cama de audrey.

Alex se acercó cruzando sus brazos.

— ¿Que encontraron? — Sabía que uma había leído el diario de audrey por eso preguntaba.

— Además de que tu amiga le arruinó la vida a esa chica — Río, Alex empezaba a irritarse.

— Puedes dejar la ironía por favor, no tenemos tiempo.

— Está en la cabaña en el bosque de sus tías, flora, fauna y primavera.

— Eso es bueno — Dijo Artemis aburridamente.

Alex se giró y caminó hacia la salida.

— Iremos a mí casa, esperemos a los demás a ver que noticias nos tienen.

— evie tiene razón aunque pudiéramos no podemos ir solas, y menos sin saber dónde está ese lugar.

Mal no habló en lo que caminaba molesta con su presunta hermana.

Como no le había contado sobre sus hermanas, no. ¿Como su madre o su padre no le habían dicho que tenia más familia?.

Sin duda, se esperaba una enorme sorpresa para ella y los demás.

Eliz estaba nerviosa en cómo reaccionarían, más asustada que nerviosa.

¿Como reaccionaria Zus al ocultarle sobre sus hermanas? O ¿Sus padres? O ¿Porque él me había contado todo de su pasado y yo deje de lado algunas cosas?.









Hermanos, cuentenme ¿tienen hermanos? Alex esta en un profundo poso sin fondo.

The Moons Curse→ Descendants.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora