Dangerous ➳ m.e

Capitulo 23

Lean la nota del final:)
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____ POV
Algo tocó mi hombro, mejor dicho alguien, abrí mis ojos lentamente y pestañeé varias veces para acostumbrarme a la luz de la habitación, una enfermera se encontraba parada frente a mí.

-Señorita, ya se puede ir a su casa. -la interrumpí.

-Pero yo necesito quedarme aquí, para cuidarla. -puse mi mano sobre la de mi madre.

-Señorita, usted debe descansar. Su madre estará bien.

- Pe-Pero... Mi madre, yo... -bajé la cabeza tratando de reprimir un sollozo. Mi vista se emborronó por momentos.

-Señorita. -la voz de la enfermera era dulce y compasiva, pero firme-. Le prometo que su madre estará bien. Ahora, vaya a casa y descanse.

- De... De acuerdo... -tomé mi
bolso, besé la mejilla de mi madre con suavidad apretando los ojos y me despedí de la enfermera.

Antes de salir, me puse los lentes para ocultar mis ojos rojos e hinchados. Había convencido a Matt de que se fuera a su casa a descansar así que tuve que tomar un taxi. Aproveché de comprar algunas cosas para la casa suponiendo que mi madre se iba a quedar unos cuantos días más en el hospital. Mi estómago rugió dándome la señal de que necesitaba comer. Luego de comer, comprar y pasar por unas cuantas tiendas ya eran casi las doce de la noche. Salí realmente rápido del Mall y por suerte conseguí un taxi.

-Gracias.- le entregué el dinero-. Adiós.

-Adiós, señorita.

Entré y sentí ruidos en la cocina, mi corazón comenzó a ir mas rápido al recordar quién estaba en la casa. Giré lentamente sobre mis talones y camine rápido hacia la puerta de entrada.

- ¿A dónde crees que vas?-cerré los ojos y maldije mentalmente.

-Cre-creí que había... dejado la puerta abierta.

-¿Y tu madre?

-Está en el hospital, tuvo un accidente... -Jai rió-. ¡¿Por qué te ríes?!

-Mmm, no lo sé... -sonrió con malicia.

-Fuiste tú, ¿no es así? ¡Tú hiciste que mi madre tuviera ese maldito accidente! -me acerque a él.- ¡Te odio! -Iba a golpearlo pero él sostuvo mis muñecas haciéndome daño.

-Quizá si, quizá no. La cosa es, cariño... -volvió a sonreír con malicia- que ahora estamos solos.

Me atrajo a su cuerpo y puso su
mano en mi cintura, traté de mantener la calma y no llorar. Acercó su cara a mi cuello y deposito un beso en él, traté de no devolver la poca comida que tenía en mi estomago.

-Tienes un lindo cuerpo... -dijo mientras sus ojos me recorrían lentamente. Sufrí un escalofrío.

-¡Suéltame! -hice fuerza, pero mis movimientos fueron en vano. Él rió y apretó mis muñecas aún más fuerte.

Con un ágil movimiento levanté mi pierna y con mi rodilla le di en su amiguito. Aproveché que se retorció del dolor y corrí escaleras arriba hasta llegar a mi habitación. Cerré la puerta con seguro y me dispuse a pensar que hacer. Me sobresalté al sentir fuertes golpes en la puerta.

-¡Abre la puerta niña!

Miré a mi al rededor buscando una salida. Bingo, la ventana. Sin pensarlo dos veces me asomé por el balcón y cuidadosamente pasé una pierna sobre la baranda, traté de acomodarme y cerré los ojos, cuando los abrí salté y la adrenalina corrió por todo mi cuerpo desde ese momento. Caí fuertemente en el pasto provocando que mi pie se torciera, traté de olvidar el dolor y me levanté sacudiendo mis manos en mis pantalones. Corrí lo mas rápido que pude sabiendo que tarde o temprano él se daría cuenta que yo ya no estaba en la habitación. Recordé que la casa de Matt no quedaba muy lejos así que me dispuse a seguir corriendo. El dolor en mi pie era cada vez mas fuerte y no podía evitar cojear. Un gran alivio recorrió mi cuerpo al ver la casa de Matthew. Toqué la puerta reiteradas veces sin importarme de que alguien estuviese durmiendo. Un Matt adormilado abrió la puerta. Su cara cambió al verme, a estas alturas debía de estar roja y sudada.

-¿___? ¿Qué pasa?-se refregó los ojos adormilados por el cansancio.

-¿Podrías dejarme entrar? -giré la cabeza para mirar la calle-. No... No me siento muy segura aquí.

-Claro. -se movió dejando un espacio para que pasara.

-Ahora, ¿podrías explicarme porque vienes a las.... -hizo una pausa para mirar su reloj-... doce de la noche?

-Él otra vez. -caminé cojeando hacia su sofá y me desplomé en él enterrando mi cara entre las manos.

-¡¿Qué te hizo ahora?!

-Llegué a mi casa y... -bajé la mirada-...besó mi cuello, hice lo que pude para escapar. -Su mandíbula se tensó y se levantó del sillón.

-¿Adónde vas?

-No podemos quedarnos aquí, él nos encontrará.

-¿Y adónde se supone que iremos? -lo imité.

-Acompáñame. -lo seguí hasta su habitación. Sacó una chaqueta y se la puso, me miró y sacó otra-. Toma, estás muy desabrigada, no quiero que te de un resfrío.

-Matt, rápido. -moví mi pierna nerviosa.

-Vamos. -extendió su mano y la tomé, un escalofrío recorrió mi cuerpo al sentir el contacto de su piel con la mía. Dios, ¿cómo lograba hacerme sentir así después de todo lo que había pasado?

Abrió la puerta del acompañante para que subiera y luego rodeó el auto para subirse el. La canción "Waves" sonó y yo subí el volumen de la radio para que el silencio acabara.

-¿Adónde vamos?

-Al pueblo de al lado, queda a unas dos horas. -dijo poniéndose el cinturón.

Me acomodé en el asiento y después de un rato sentí mis piernas tiritar y luego la mano de Matt posándose en mi pierna.

-Tranquila. -asentí y puse mi mano sobre la suya.

Estuve un rato hablando con Matt hasta que el sueño me venció, mis ojos se cerraron solos y la carretera desapareció. El frío me despertó, todo estaba oscuro, mis ojos de a poco se acostumbraron a la falta de luz y pude ver que estaba en una cama, prendí la luz de la mesita junto a la cama y pude ver a Matt durmiendo incomodo en un sofá. Me levanté y toque su hombro, lo moví y como vi que no reaccionaba tapé su nariz, bruscamente abrió los ojos y me miró asustado.

- ¿Qué pasa?- su voz ronca me mataba.

- Te ves incomodo ¿No quieres dormir en la cama?

- ¿Pero, y tu?

- Mmm.- dudé en hablar.- mantendremos distancias.- rió y se levantó, me di la vuelta dandole la espalda y apagué la luz. No podía dormir porque los jeans que llevaba no eran nada cómodos para dormir y la polera era corta y apretada lo único que me favorecía era el poleron que Matt me había prestado, lo sentí levantarse y después de un rato toco mi hombro.

- Ten, ponte esto.- tenia su polera en la mano y su torso estaba desnudo.

- Gracias.- sonreí tímidamente y entré al baño. La polera por suerte era larga y me llegaba un poco mas arriba de la rodilla. Me recosté en el mismo lugar que antes, senti una mano en mi cintura y luego el torso desnudo de Matt en mi espalda cubierta por la fina tela de la polera.

- Buenas noches.- susurró cerca de mi oído.

- Buenas noches.- sonreí.

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Holiiixxx, saben me decepcionaron:( en el capitulo anterior pedi solo 10 comentarios y no los "cumplieron" pero aun así subí cap porque se que hay algunas a las que les gusta mucho la novela y no les puedo estar diciendo que hacer así que no importa. Si quieren que suba el próximo capitulo hoy comenteen:)

Baibai polluelaz🐥