Siempre has sido tú {Bakudeku} (Terminada)

La ayuda de Uraraka

(Pov. omnisciente)

Después de comer, Aizawa dejó tiempo libre para los alumnos.

Algunos se quedaron en la sala común charlando y viendo la televisión, otros fueron a sus habitaciones a hacer deberes, a dormir un rato o simplemente a estar con el movil.

Uraraka y Midoriya fueron a la habitación de la chica para contarle el porqué de la confesión que le hizo anoche a través del movil y todo lo que habia pasado esa mañana.

-Bueno, cuentame Deku-dijo la castaña con una sonrisa mientras se sentaba en su cama con las piernas en forma de indio.

Izuku la imitó y se sentó frente a ella. La miró y suspiró profundamente antes de comenzar.

-Bueno, después de la cena de anoche, Kacchan me dijo que queria hablar conmigo fuera-dijo el pecoso, omitiendo que comenzaron a hablar por su Quirk, ya que su amiga no lo sabia-abrió sus sentimientos hacia mi mediante una pelea, me dijo todo lo que le hacia sentir mal y todo lo que le perturbaba desde su secuestro y pudimos hablar y abrir nuestros sentimientos mutuamente. Nunca lo ví llorar asi, Uraraka. Ni tampoco lo vi contarme todas las cosas que le dolian desde que eramos mejores amigos. Me sentí feliz de que al final se abriese, y eso me hizo darme cuenta y admitir de una vez por todas que me gusta, que me gusta mucho, y que haria cualquier cosa porque nuestra relación siga avanzando y poder llevarme bien con él.

Ochako miró a su mejor amigo con una gran sonrisa, sintiendo en lo más profundo lo que le contaba. Estaba realmente contenta por él.

-Pero...-continuó el peliverde-estoy seguro de que nunca le voy a gustar de la manera en la que a mi me gusta. Nunca voy a poder estar con él de esa manera. Y si no voy a poder, prefiero retomar la amistad que teniamos, con eso seria feliz sabiendo que lo otro no lo puedo tener.

-Deku, no digas eso-dijo la castaña acercandose a él y posando su mano en la espalda del chico.

-Claro que lo digo Uraraka, no se ni siquiera si le gustan los chicos, ¿como lo voy a intentar?-dijo Izuku cabizbajo-además no se como ligar con alguién, nunca me ha gustado nadie, me siento desubicado...

-No te preocupes Deku, yo estoy aqui para intentar ayudarte-dijo Ochako señalandose a ella misma-no soy una experta tampoco, pero puedo darte consejos. Creo que sí podrias llegar a gustarle... Bakugou no demuestra sus sentimientos a nadie y que lo haya hecho contigo me ha sorprendido, y aunque sea asi de rudo y malhumorado pienso que sí puede llegar a tener sentimientos por alguien. Y aunque te hizo todo lo que te hizo en el pasado sé que tu no tienes rencores con él y se nota que él ha cambiado mucho. Asi que te intentaré ayudar en lo que pueda ya que yo fui la que insistia en que lo admitieras de una vez, ¿entendido?

El pecoso le sonrió mientras sus ojos esmeralda comenzaban a llenarse de lágrimas.

Estaba orgulloso de tener a Uraraka como su mejor amiga. Era el tipo de persona que todo el mundo querria tener en su vida.

-Entendido, Uraraka-dijo Izuku lanzandose a darle un abrazo a su amiga-gracias, eres la mejor.

La castaña se sonrojó y rapidamente correspondió al abrazo.

-Estamos aqui para ayudarnos, Deku-dijo ella separandose-y bueno, entonces os castigaron por la pelea y... ¿que ha pasado esta mañana limpiando? ¿Algún avance o algo?

Deku se rascó la nuca y enseguida se le subieron los colores.

-¡Wow, por esa sonrisilla tonta podria jurar que algo ha pasado!-exclamó la chica entusiasmada-¡cuenta, cuenta!

Deku le contó todo lo que habia pasado esa mañana.

Aquel momento en el baño en el que estuvieron tan cerca, cuando estaban limpiando y gastandose pequeñas bromas, cuando Izuku se durmió en el suelo junto a Katsuki y luego apareció en su habitación...

-¡Madre mia!-exclamó feliz la castaña-si pareceis una pareja...

El peliverde comenzó a toser y se sonrojó de sobremanera.

-Que amable llevandote a tu cama. Eso Bakugou no lo haria con cualquiera, a no ser que fuese uno de sus amigos, pero aun asi no creo. Ten eso en cuenta, Deku.

-Sí, la verdad es que me extrañó. Siendo él podria haberme dejado durmiendo en el suelo hasta que vosotros llegaseis de clase-dijo el pecoso riendo-pero noté algo raro mientras dormia en el suelo...

-Algo... ¿raro?-preguntó la chica un poco extrañada.

-Si, como si algo me tocase la mejilla-dijo intentando recordar-era como una caricia. A lo mejor son alucinaciones mias o simplemente fue un sueño.

Uraraka se quedó pensativa, pero su amigo la interrumpió dentro de sus pensamientos.

-Bueno, dejemoslo ahí-dijo el chico levantandose de la cama-me voy a terminar los deberes. Nos vemos en la cena, Uraraka.

-Si, vale-dijo Ochaco cortando sus pensamientos-hasta esta noche, Deku.

El peliverde salió de alli y se encaminó hacia su habitación. Queria descansar un rato antes de ponerse a hacer la tarea.

Pero no sabia si con Kacchan rondando en su cabeza iba a poder si quiera pegar ojo.