Breaking Rules: Una Vez Más ( Terminada)

Capitulo 43: un gato negro entre nosotros

Amm... alguno me puede contar ¿que es lo que pasa aquí?-pregunté confundido.
Ellos se miraban fijamente, no había nada que rompiera ese contacto visual el que
Marinette compartía con el héroe enmascarado. ¿Como la conocía a ella?, ¿por qué
tenían que hablar a solas?.¿Por qué nunca Marinette me lo habia mencionado?.
Ella volvió a mirarme.
-yo tampoco entiendo cuanto es la urgencia o la inoportuna visita de un super héroe, que, no conozco y de seguro tiene que estar combatiendo el crimen...-dijo en  un tono
severo. ¿Acaso le estaba dando una indirecta?.
-Preciosa, no me presentaría aquí si no fuera por algo urgente. Yo soy muy objetivo con mis responsabilidades, nunca dudo en responder al llamado de auxilio ni que influya mi vida personal en mi responsabilidad. ¿Que clase de héroe sería si mezclo mi trabajo con
mis amistades?, eso pondría en peligro todo- ella le desvío la mirada.
-Bien, ¿y puedo saber por lo menos porque secuestrarás a mi novia?-dije sereno, aunque con muchas preguntas en mi cabeza.
-Ladybug le urge verla. La necesitamos para salvar París.
-¿estará en peligro?
-No te preocupes. Estará en buenas manos, la cuidaré como mi propia vida.Nunca permitiría que fuera lastimada.Ladybug es muy cuidadosa y noble, nunca se lo pediría si no fuera importante- Bueno si lo necesitaban, no había ningún problema. Pero, ella no parecía muy convencida.
-si no quieres ir....- le susurré- no debes hacerlo. Ella se volvió hacia mi y me besó.
- si iré.
-¿estas segura?
-si. Tendré cuidado, después te contaré. -bese su frente
-Te veré a las cuatro- aseguré. Cuando miré a Chat-noir, estaba algo serio e incómodo con nuestra escena. Había algo en sus ojos que me murmuraban engaño y secreto.... creo que me estoy volviendo paranoico.
La lleve tomada de los hombros para entregarsela.
-protegela como si fuera tu mayor tesoro.
-claro que sí lo haré como siempre lo hago -luego nos dimos la mano, que a Marinette la
ponía cada vez más tensa.
Luego observé, como ella, abrazada a su pecho él se la llevaba lejos de mí. Quede
mirando un minuto al cielo aunque ya se hubieran ido. Quería inmortalizar ese momento un poco más.
-cuídala-pensé, con la esperanza que hiciera eco en su mente.
-¿como?, ¿ya se fue?-apareció Coral detrás de mi.
-tenía que ayudar a salvar a París.
-¿Le entregaste a tu amor a un pervertido desconocido que quien sabe si fue verdad lo que dijo?-dijo ella mirándome fastidiada.
-confío en ella Coral, no estoy para  adueñarme de lo que haga, estoy para caminar junto a ella
-Tas bien pendejo por ella.Eres demasiado noble, cualquiera puede aprovecharse.
-Marinette no esta jugando conmigo, volverá, y allí estaré para ella.- Coral viró los ojos.
-lo que tu digas amigo. Pero, tu novia es una chica muy misteriosa.
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Olas, sal, brisa. Diez minutos menos para la cuatro , y la ciudad reinaba en serenidad. Hacían coro las olas con la melodía de mi guitarra, que asesinaba mi tiempo practicando ejercicios básicos, mientras imaginaba nuevas melodías para Marinette. No solo el amor había cambiado mi pacividad, también dilató mi paciencia.
Han pasado dos horas, y ella no me contesta. El cielo no pudo estar más turquesa
que ese día y las palomas gorgojean feliz y con traquilidad...ni un rastro de catastrofe se asoma en esa tarde.La gran pregunta era ¿dónde estabas?... ¿le había dicho que me llamara?.
No me impacienta que me ocultarás nada. No esa vez. Pero, no saber como
estabas me impacientaba los nervios. Ella llegará.Lo sentía, ella no era capaz de
plantarme. No debo sofocarla.
Mientras no estabas, el recuerdo de la discusión con Adrien, me daba vueltas en la cabeza....No me afectaban, eso no, sin embargo, si te imaginarás las maneras que me he inventado todo este tiempo para ser mejor Novio, y verte feliz. No quería que lo que
te podía ofrecer fuera poco frente a él.No pensaba ser mezquino en nada.
-Iba a ser mi esposa.
-¿un cantante como tú puede tener un futuro?.
-nunca le darás lo que necesita una princesa.- en eso desafina una de mis notas.
Respiro hondo, me coloco a observar a las parejas felices pasear por el canal. Me
hacía tan feliz ver a los demás contentos, me daba una calma impresionante, pues, no había nada que envidiar en ellos. Encontraron igual que yo, la razón de este día de ser
feliz. Esa es una gran satisfacción que uno recibe, al ver a las personas tranquilas,es
algo que sucedía frente a mi.
.
.
.
Tal vez Mari este con sus padres y olvidó llamarme... me dio unas ansias de
caminar una hermosa tarde como esta. Puse mi guitarra en la cesta en la bici y me
dispuse a buscarla en su casa.
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-¿Marinette?, pensé que se encontraba contigo- me dijo su padre mientras me servía la señora Sabine, una taza de chocolate caliente.
-y yo pensé que estaba con ustedes-pensé.
-Ultimamente Marinette sale mucho contigo. ¿Son muy buenos amigos no es así?.
Siempre andan juntos.
-mucho tiempo digamos... tengo la breve sospecha que ella nos oculta algo- dijo
entrecerrado los ojos, yo suspiré preparándome para enfrentarlo.
-en verdad, sobre eso me gustaría hablarle si me lo permite.
-Es tan obvio.Ella volvió con Adrien y tu lo estas acompañando.
-.....-silencio incómodo.-no señor, eso no es.-hubo una severa sonrisa.