Steve Harrington•Billy Hargrove ONE SHOTS

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SEGUNDA PARTE (77)

"Buenos días, ex princesita" La voz de Billy Hargrove suena detrás de ti, pones los ojos en blanco mientras suspiras con fuerza.

Ves a Billy recargarse en la pared justo a lado de la puerta que da el acceso al salón de clases. Esperabas con tranquilidad al profesor para dar comienzo a otro día lleno de burlas, rumores, murmullos y ojos acusadores o llenos de lástima al verte pasar por los pasillos de la escuela.

Es así desde hac cuatro meses, no ha reducido nada desde que todos supieron que Steve Harrington ya no tenía una relación contigo. No todos sabían la verdad, la minoría pensaba que Steve y tú sólo tomaron un respiro pero la mayoría, esa parte de la escuela que creaba rumores y los esparcia como cualquier sustancia gaseosa, sabía que Steve Harrington se había acostado con una chica.

Y aunque estabas agotada sobre que la mayor parte del instituto lo sabía, otra parte de ti estaba agradecida porque no muchos habían divulgado la verdad, que esa chica era Nancy Wheeler y que se había acostado con ella el día de su aniversario, sin olvidar claro que Steve Harrington ni siquiera había recordado que era su aniversario.

Billy Hargrove fue una de las tan afortunadas o desafortunadas - depende de como lo veas - personas en saber la verdad, la pura y real verdad.

¿El cómo lo sabía?

Ni siquiera tú eras consciente de quien era su informante.

Tampoco eras consciente de cuanto podrías soportar quedarte callada y sin fuerza para alejar esas voces molestas que rondaban a tu alrededor todo el tiempo.
Y lo peor, no sabías donde más dejar todo ir, tu casa había pagado con algunos objetos siendo de resultado: el suelo.

Dustin estaba ahí, siempre escuchando pero también debía concentrarse en cosas más importantes como por ejemplo los exámenes y proyectos.

Tu grupo reducido de amigos o más bien llamados compañeros se esfumó cuando supieron que no eras más la chica de Harrington. Amistades falsas, palabras y frases para comprarte.

Pero él seguía estando ahí, a tu lado. Simplemente molestado y tú sin embargo estando también para él y dejar escapar todo.

"Largo de aquí, Billy. No estoy de humor" Le dijiste con voz dura mientras fingías buscar algo dentro de tu mochila.

"Nunca estas de humor. Vamos juro que si me dejas quedarme me voy a comportar" Alzaste tu mirada para verlo morder su labio inferior con una sonrisa y sus ojos brillando. "Vamos cariño"

Una imperceptible sonrisa cubrió tus labios y tan rápido como Billy llegó, desapareciste con él.

Te empujó contra la pared del baño de mujeres mientras cerraba la puerta y ponía seguro. Tiraste al suelo tu mochila y Billy siguió el ejemplo con la suya. Toma tu cintura entre sus manos y sus labios van directo a tu cuello para dejar un camino de besos hasta tu pecho.

Tus manos vagan sutilmente por su camisa empiezas a desabrochar los primeros botones de arriba para pasar tus dedos por su pecho, su mano ahora sube hasta tu nuca para así encontrar sus labios y empezar un beso intenso.

Esa era tu escapatoria desde hace más un par de semanas.

Billy hace que levantes tu pierna hacia su cintura y su otra mano que no sostiene tu nuca hace que lo envuelvas hasta quedar más alta que él. Nunca despegaron sus labios, simplemente siguieron mientras tus manos ahora iban debajo de su camisa y tus uñas recorren su espalda lo que provocaba que gruña entre pequeños jadeos.