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OCTAVA PARTE (107)

Tu rostro descansaba sobre algo realmente suave, te encontrabas boca abajo sobre una almohada así que sólo pudiste esconder más tu cara para que la luz que entraba por la ventana no te diera y pudieras seguir durmiendo plácidamente.
Un cuerpo a tu lado se movió pero decidiste ignorarlo.

"Levántate" Oyes su voz ronca lo que te causa un escalofrío en toda tu columna vertebral. Te remueves en disgusto por lo que acaba de decir y niegas con suavidad. "No podemos llegar tarde"

Ahora escuchabas su voz más cerca de tu oído y reíste en un tono bajo. Sentiste sus manos ir de arriba a abajo en tu espalda y suspiraste por lo bien que se sentía.

"En 1O minutos más se hará tarde y no voy a permitir que llegues retrasada a tu primera clase"

Frunciste el ceño divertida y diste una vuelta rápidamente para ver a Billy. Tenía una sonrisa sexy en su cara mientras sus ojos que podías jurar brillaban de forma extraordinaria te veían a ti.

"¿Te interesa que llegue tarde? Tú ni siquiera vas a las clases"

"En esta semana si. No podemos llegar tarde porque tenemos Economía, es horrible pero debemos ir, lo hago por ti y nuestro Timm"

"No quiero ir, la clase es un asco y los números no se llevan conmigo" Explicaste y mientras tanto te acercaste a él para recargarte en su pecho.

"Pues lo siento tendremos que ir. Espera..¿Dónde quedó el bebé?" Billy se sentó y bufaste por tener que levantarte.

"Lo dejé justo aquí"

Seguiste sus pasos y terminaste sentada en la cama, buscando entre las sábanas al bebé ya que cuando se terminaron de bañar y sólo bañar sin nada indecente lo cual te sorprendió de Billy, él salió para ir por el muñeco chillón, y no es como si fueran los mejores para cuidarlo, simplemente después del baño, no quisieron dormir y terminaron jugando con el bebé.

Lo aventaban o apostaban quien podía hacerlo dar más vueltas en el aire. Ponías una cara de espanto cada que oías la cabeza del muñeco azotar contra el piso pero después seguías.
Incluso jugaron a verdad o reto, lo pusieron en el suelo y si tocaba cabeza era que mandabas, ese último fue muy divertido porque ver al bebé dando vueltas y hacer retos estupidos como toma toda la leche en menos de un minuto, lame la parte de un pincel o confesiones de a que edad diste tu primer beso, te has hecho pipí encima o cuantos berrinches hiciste fueron algo que los dejaron exhaustos y listos para dormir.

Y no, nada fuera más allá de dormir pasó. Ambos se acurrucaron y se dieron un beso para luego dormir con un bebé a los pies de la cama.

Billy claro estaba dando una vista que te dejaba pensando en lanzarte encima. Sólo había dormido con un bóxer limpio que traía con su conjunto de ropa que sacó del casillero de la escuela.

"¿Me estás escuchando?"

Te sacó de tus muy malos pensamientos, sujetaba del pie al bebé mientras te daba una mirada confusa.

"Si... ¡Lo encontraste!" Le dijiste con una sonrisa.

"Te decía que te espero abajo. Haré el desayuno y llevaré al mocoso conmigo"

"Ah, claro si. Ya voy"

Billy lo arrojó a la cama y lo agarraste para empezar a jugar con sus manos. No te habías dado cuenta pero el bebé tenía ojos azules, como los de Billy y eso te asustó. Al levantar la mirada viste como tu chico se ponía los pantalones que había sacado de su mochila. Entreabriste tus labios dejando salir un suspiro para luego morderte el labio inferior.

"Disfrutando la vista ¿huh?"

Sus ojos burlones te hicieron saber el "¡Atrapada!" que a Billy le encantaba, eso sólo alimentaba su ego desde ayer por la noche cuando ambos se bañaron. Y esta vez no ibas a darle ese placer.

"Mmm" Hiciste una mueca y su sonrisa desapareció. "Nada nuevo" Te encogiste de hombros mientras te levantabas para cambiarte.

"Eres una mala mentirosa, bonita"

Lo escuchaste gritar a tus espaldas y reíste.

•••

Y no importo que hubieran desayunado como locos y el haber salido disparados hasta el auto. No ibas a correr el riesgo de que manejara como él sólo sabe hacerlo.

Eso se acababa contigo. Manejar a alta velocidad no era bueno y si algo salía mal como una discusión o distracción nada podría acabar bien.

Terminaron llegando tarde y jadeando a su primera clase, cargabas al bebé y Billy llevaba sus dos mochilas cuando tocaste la puerta y el profesor sólo les lanzó una mirada de cansancio pero les permitió pasar.

Hubieras deseado que los demás les lanzarán esa mirada de aburrimiento y cansancio pero no fue así, en lugar de eso hablaban sobre ustedes dos llegando tarde juntos y cómo Billy traía sus mochilas.

Las cosas sólo se pusieron tensas cuando Steve se enderezó en su asiento y miró con odio a Billy cuando pasó por su lado al mismo tiempo que tu pasabas del otro, para sentarse juntos en la parte detrás de él.

Steve exhaló y luego volvió a su posición inicial antes de que llegaran, puso sus manos en la mesa y su cabeza entre ellas.
Le diste una mirada rápida a Billy y él te sonrió.

La clase continuó sin nada interesante hasta que el profesor fue llamado por otro maestro y los dejó solos haciendo un trabajo.

Cuando terminaste el trabajo, volteaste a ver a tu chico y no novio porque aún no habían entrado en el tema formal.
Él ya estaba recargado y de brazos cruzados.

"¿Cómo es que terminaste tan pronto?" Cuestionaste en voz baja.

"Te dije que soy bueno en muchas cosas" respondió de la misma manera. Reíste y él también. El profesor seguía afuera y decidiste empezar a dibujar en la parte de atrás del cuaderno, flores, figuras o formas abstractas lo que fuera para distraerte. Sentiste como Billy se aproximó a ti por atrás para ver lo que hacías y luego él agarró un lápiz comenzado a dibujar en la misma hoja.

Te reíste cuando sus lápices chocaron y no pudiste avanzar.

"Por favor" Steve se giró y los miro con enojo. "No dejan que me concentre así que cierren la boca"

"Lo siento" Le dijiste pero Billy permaneció callado mientras lo miraba.

"Si, ya sabemos que están felices porque se acostaron no hace falta que lo reafirmen" Steve les dijo con burla y tú nariz se arrugó ante lo feo que eso sonó.

Billy se acercó más a Steve y de un segundo a otro lo jalo de su playera hasta tenerlo cara a cara.

"Te dije que cuidado y como hablas de ella, Harrington. No me importa desfigurar tu cara pero tampoco quiero ensuciarme las manos. He tenido una excelente semana y un buen comienzo de día así que no me hagas sacarte la mierda porque si me sigues provocando entonces lo tendrás"

Jalaste con lentitud a Billy de su hombro y él soltó a un Steve serio quien se volteó de nuevo sin decir nada.

Le diste un pequeño beso a Billy en su mandíbula y enredaste tu brazo en el suyo para recargar tu cabeza en su antebrazo.

Estabas consciente de que en cualquier momento todo se iba a joder. Steve no se quedaría callado porque sabías que tenía mucho para decir y Billy no se quedaría quieto al escucharlo. Él te iba a defender.

Ahora esperabas que la bomba explotase.













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Estamos en la recta final de esta mini historia/serie de Billy.

No me encontraba en el mood de poner algo de smut pero haré lo posible para que haya más acción de la mala y de la buena en el siguiente.

Gracias por seguir aquí y estar esperando. Los amo xx.

Steve Harrington•Billy Hargrove  ONE SHOTSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora