El reino perdido

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Mario comenzó a sentir una pequeña brisa de viento que le soplaba en en el rostro, asi como un objeto suave que le hacia cosquillas en la nariz. Lentamente fue abriendo los ojos hasta que vio donde estaba: recostado de lado sobre un enorme prado. Lo que le hacia cosquillas en la nariz era el pasto al mecerse con el viento. El cielo estaba despejado y el clima era fresco. Mario se sentó sobre la grama y vio a Rosy recostada en la misma posición a la par suya. Entre ambos estaba su espada ensartada.

Mario la tomo y la alzó al cielo.

Mario : Ignis ¿estas allí?

Ignis : Sí.

Luxia (en su mente) : 'Yo también estoy aqui. La pregunta es ¿donde es aquí?'

Mario : 'No lo sé.'

Mario se volteo y movio cuidadosamente a Rosy, quien comenzó a despertar.

Rosy (aun adormecida) : ¿Donde ... donde estamos?

Mario : Estamos en eso.

Rosy se sentó tambien sobre la grama y se restregó los ojos. Sorprendida, observó el hermoso paisaje a su alrededor.

Rosy : Mario ¿que hiciste?

Mario : Use los poderes de Luxia para convertir el agujero negro en un agujero de gusano. En estos momentos podríamos estar en cualquier lugar del universo en cualquier tiempo. Es incluso probable que estemos en otro universo, no tuve mucho tiempo para pensar en un destino.

Rosy : Impresionante.

Mario : Gracias. ¿Puedes abrir otro agujero de gusano?

Rosy : Sí, pero me tomará algo de tiempo, hace años que no hago uno.

Mario : Entiendo. Para mientras veamos si hay algún lugar donde conseguir comida.

Mario sujetó su estomago mientras Rosy río suavemente. Ambos se pararon y comenzaron a buscar algún lugar habitado. El paisaje era realmente hermoso, con la brisa acariciando suavemente sus rostros y meciendo el pasto bajo sus pies. Al cabo de unos minutos dieron con un sendero de tierra rodeado por pequeñas piedras. Tras unos minutos de seguirlo comenzaron a aparecer árboles a los lados del camino y con el tiempo llegaron a un cruce, pero Mario siguió de largo, ya que estaban en la cima de una montaña.

Mario se asomó y ... se quedó sin aliento ante lo que vio.

Mario (asombrado) : ¡Guau!

Ante él se erguía un enorme reino amurallado, cuyo castillo alcanzaba las nubes mismas. Este era de color azul y poseía al menos 3 enormes torres que se desprendían de la estructura principal. La ciudad se encontraba a los pies del castillo, pequeñas casas hechas de piedra. La plazuela principal, la cual poseía una fuente, estaba repleta de gente (que veían como pequeños puntitos) que iba y venía rápidamente.

Rosy : Nunca había visto este lugar.

Mario : ¿En serio? Creo que cada día aprendes algo nuevo. Como sea, solo veremos si nos dan algo de comida y cuando estes lista nos vamos.

Ambos siguieron por el camino de tierra hasta que llegaron a la entrada de la ciudad. Los guardias llevaban una armadura plateada muy a lo medieval, junto con dos enormes lanzas además de la espada que llevaban al costado. Por sus complexiones, se podría decir que eran humanos. Cuando vieron a Mario y a Rosy acercarse, simplemente se hicieron a un lado y los dejaron pasar, haciendo una pequeña reverencia.

Mario (sorprendido) : Y ¿a que vino eso?

Rosy : No lo sé. Tal vez nos confundieron con alguien.

Guardianes del cosmos (MarioxRosalina)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora