6. Un día especial (parte 2)

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Jaces Vellandria

Mi respiración perfectamente mezclada con la contraria gracias a la cercanía que teníamos, el camino de besos que había dejado por su mentón anhelaba terminar en esos labios carnosos y suaves, pero no me permitiría tener tal tentacion.

Acaricie sus caderas con mis manos sintiendo por sobre la ropa lo suave y cremosas que eran, mientras que mirada intentaba guardar como camara cada faccion de su rostro, desde sus labios, hasta esos ojos azulados que ahora estaban entrecerrados acompañado de ese sonrojo que le daba un color hermoso a su palida piel, pero nada superaba esa inocencia que en este momento me volvían loco.

Me gusta su cercanía...

Era de esperarse

No es el momento de presentarse, infiltrado

Para ti nunca es buen momento, pero es imposible mientras este aqui contigo

El tono de mi celular fue lo que nos saco de esa burbuja llena de hormonas a tope y un calor inexplicable. Ese sonido fue necesario para que ella saliera de su trance y  darse cuenta de lo que estabamos haciendo, me hizo regalarle una "sonrisa" de socarrona al saber que la princesa había caído en mi juego.

La baje con cuidado para sacar de mi bolsillo el teléfono, en la pantalla salio el nombre de "Saco de pulgas" y sabia que estaba preguntando "¿Donde estabamos?" Conteste mientras posaba la vista en la vampiresa que aun estaba recargando su peso en la pared, calmando un poco su respiración.

--Si si...Ya vamos-- Respondia a Shiba, restandole mayor importancia-- Esta bien, dile que no se mueva estoy ahí enseguida-- colgue mi teléfono para guardarlo en mi bolsillo, y seguir caminando, no sin antes hacerle una seña a la chica para que me siguiera.

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Muy bien... la cosa estaba asi, Alcohol, monstruos por todos lados, algunos con poca ropa, otros ya en esa etapa de embriagues que ya no podian ni con su alma, comida, drogas, un hermoso grupo de sirenas con un equipo que la electrónica se escuchara a distancia, Shiba y mi hermana dandose miradas de "si te descuidas te hare gemir esta noche" sin embargo cada uno estaba charlando con personas diferentes y yo hablando con Catrina de lo pasado con un baso rojo de plástico clásico de la fiestas con algo que Shiba me habia servido. La fiesta en la casa de la facultad de las animadoras se estaba saliendo de control.

Lea Leyendecker

Las sirenas tienen una voz hermosa, todo el mundo lo sabe, son catalogadas por ser "seres perfectos" sus hermosa voz era su arma para asesinar en caso de peligro ellas podían hipnotizar a quien quisieran solo con su voz. Los tritones que son extremadamente extraños son mas por su poder físico sus lanzas que pueden materializar sin contar de sus claras habilidades bajo el agua, y algunos de clase alta de esta raza pueden tener control sobre el agua.

No podía beber mucho, embriagarme aquí seria una completa catástrofe si mi padre se entera que era lo que haria en cuestion de minutos y escándalo era lo que menos quería causar, así que opte por algo pequeño creo que era vodka mezclado con algo que me dio Jynna que ahora estaba sentada frente a mi y a mi lado Shiba en algun lado de la casa de esta facultad.

Solo faltaba Jaces, que estaba hablando con esa demonio de la otra vez en su habitación, pensaba que habían terminado por la escena que habían echo, pero estaba equivocada, ella estaba hablándole como si nada demostrando una sonrisa perfecta al igual que esa sonrisa torcida de Jaces que por alguna razón me causaba una especie de ansiedad en mi cuerpo que no queria catalogar como "Celos" pero todo eso acabo cuando la demonio le dio un abrazo poco formal y tomo la mano del chico-momia para irse juntos hasta estar fuera de mi vista.

Un vampiro sin sed de sangreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora