Jaces VellandriaSu mirada de sorpresa, sus ojos extendidos de par en par no tienen precio alguno, pensaba que ya se lo imaginaba o tan solo tenia sospecha de algo.
Pero no. Su rostro al verme fue una completa descripción grafica de todos los sentimientos encontrados. Tanto como gusto, confución, enojo y euforia mas que todo. Su expresividad me hacia saber que quería gritarme en estos momentos, pero estar al lado de su padre la hacia contenerse.
--El asqueroso apellido "Vellandria" es bastante comun hoy en dia
Pero vamos, no puede ser... no creo que si quiera lo haya imaginado
--Por algo fuiste a que las brujas te hicieran el bividi bavidi bu ¿no?
Hicieron un gran trabajo con mi identidad, pero aun asi...
--Ella no es una paranoica como tu
Gracias a ti ¿no crees?
--Aaah si eres exagerado
--Rey Erick, es un placer presentarle a mi hermano Jaces Vellandria-- Anuncio mi hermana con una sonrisa pacifica a la que yo imite estrechando la mano del rey.
--Es un placer conocerlo por fin Principe Jaces-- dijo amable respondiendo a mi saludo-- Esta es mi hija Lea Leyendecker-- me la "presento" de manera cortes, quien diria que conocía hasta sus gemidos.
--Es un verdadero gusto conocerlos-- respondi cordial-- Me han hablado mucho de usted princesa, sobre todo su belleza y su divertido ser-- comente antes de besar el dorso de su mano.
--¿Que carajos?-- expreso.
Horas antes...
¿Había dicho que odio viajar en auto? Bueno... LO ODIO.
Partimos hacia el palacio Leyendecker hace ya bastante tiempo y aun no llegabamos, como me fastidiaba eso.
Mi hermana revisaba su teléfono mientras anotaba unas cosas en su libreta, supongo que el consejo la necesitaba. Pues aun que no lo crean ser una princesa no era solo lucir vestidos y ser siempre bonita. Era años de trabajo duro, visitas a reinos, consejos, bendiciones, reuniones, y sinceramente cansa lucir perfecta mas que todo a ella que era parte de el consejo y unica hija.
Ella se distraia con sus deberes mientras que yo solo leía. Era una de mis formas de relajarme y lo necesitaba sobre todo en este momento que había entrenado hace un rato, mi estabilidad estaba bastante mal ahora así que lo ultimo que necesitaba era estrés.
La mirada azulada de mi hermana se poso en mi, y una sonrisa bastante calida se formo en sus labiales, enseñándome que me calmara y que todo estaría bien.
Su vestido color azul rey acampanado hasta las rodillas y en forma de corazón en su busto la hacían lucir hermosa y su piel clara y cabellos platinos hacían que el color resaltara.
A Alice nunca le gusto que vistieramos colores oscuros, ella siempre decía que las personas ven nuestras personalidades a cambio de como somos y vestimos. Siempre le hemos tomado la palabra.
--¿Te sientes bien?-- me pregunto preocupada.
--Si...-- respondí en seco mientras cerraba el libro. Escuche un suspiro de su parte lo cual me hizo notar su angustia-- Solo tengo que relajarme ¿y tu?-- pregunte intentando subirle el animo.
--Bueno... no muy bien-- la mire un poco confundido a lo que ella me respondió un poco triste-- Ryder me escribió. Quiso saber de el progreso del plan-- frunci el ceño ante eso-- Que nos extraña y que volverá pronto para ver tu progreso, charlar... quiere volver a integrarse
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Un vampiro sin sed de sangre
Teen FictionEn un mundo donde las bestias reinan, la avaricia por el poder y el miedo a ser controlado, provoco que cada raza hiciera su propio reino, reinados por los mas poderosos de cada raza. Los destinados seres unidos por más que el amor entre ellos, hac...