Capítulo 3

699 97 121
                                    

Unos pies cuidadosamente de puntillas se arrastraron por el pasillo. Abriendo de manera ligera la puerta de una habitación que tenía una gran "R" al medio de esta. Con cuidado trataba de no hacer el mínimo ruido al abrirla de apoco y que no rechine. Sostener un pastel y ser silencioso a la vez era muy difícil pues no mantenía el equilibrio.

Trató de cruzar la habitación en dirección hacia la cama. Sin embargo, un campo "minado" lleno de juguetes como carritos, bloques, cubos y muñecos eran un caso que dificultaba su plan que estaba por darse pero no imposible. Como pudo trató de atravesarlo. Y avanzó.

Escuchó un suave quejido que provenía de la cama y un cuerpo pequeño revolverse en ella. Con toda la rapidez que pudo avanzó hacia la cama. Estaba a punto de levantarse. Tenía que apurarse.

-¡Feliz cumpleaños, campeón!-exclamó Michael sentándose en la cama de su hijo. Y extendiéndole el pastel.

Un diminuto cuerpo se incorporó de las sábanas que minutos antes lo abrigaban. Roger tenía puesto un pijama con mangas cortas. Se sentó con la mirada de sueño un poco confundido por lo que había dicho su padre. Se talló los ojitos. Y entró en razón.

-¡Papi!- abrió sus pequeños brazos, abrazando a su padre- ¡Hoy cumplo ocho años, ya estoy grande!- gritó con emoción mientras su padre sentía toda la energía de amor que su hijo transmitía.

-Si, chiquito si-rió ante el último comentario que el niño había dicho, pues aunque los años habían pasado el aún seguía viéndose como de seis años. Su crecimiento y desarrollo era muy lento.

-¿Ese pastel es para mí?- preguntó el rubio observándolo con ojos brillosos con ganas que ese rico dulce ya esté en su boca.

-Claro-respondió el padre agarrando con dos dedos un poco de crema pastelera manchando la nariz del menor, que empezó a reírse ante este acto cariñoso de su padre hacia él-Vamos cambiate que tu madre ya está preparando el desayuno. Además, tenemos que ir arreglando la casa para que recibas a tus amigos.

-Es cierto, hace tiempo que no veo a mis amiguitos-- respondió un poco apenado, pues no salía de casa hasta que sus clases que tenía en casa por las tardes terminarán dificultando que en esas mismas horas donde la mayoría de niños de allí salian a jugar no pueda ver a sus amigos que había conocido en el barrio de su casa. Esto se daba así pues los padres de Roger al visualizar el comportamiento distraído y extrovertido que tenía en la única escuela de inicial que pudieron matricularlo decidieron sacarlo de allí. Además, se le hacía difícil aprender temas que para niños de su edad eran esenciales por esta razón en el aspecto de estudios no le iba bien.

Por otro lado, las escuelas de la zona que solo aceptaban niños normales o con alto rendimiento rechazaban al pequeño que ante los ojos de los directores podían constatar a simple vista que ese niño delgado y con capacidad fatal cuando creciera sería simplemente un inútil omega. Según ellos querían evitarse problemas de tener más niños con esas condiciones. Esto causaba indignación a los padres de Roger resignandose a dichos comentarios. Por eso la única solución que llegaron fue que el rubio estudiara en casa, más fácil y práctico educarlo.

Roger lamió la crema de pastel que tenía en la nariz mientras que su padre bajó con la torta que tenía para el desayuno dejándolo que se cambie. Rápidamente de un salto salió de su cama dirigiéndose hacia su armario de ropa Tras una época de calor que ya se podía sentir, optó por ponerse unos pantalones cortos y una camisa de cuello amplio de colores claros muy fresca con pequeños detalles de fila de caramelos en la parte inferior también de mangas cortas que según él era la mejor ropa que tenía para su día especial.

Bajó saltando las escaleras pues su imperactividad se hacía presente desde la primeras horas de la mañana. Miraba las escaleras como si unas gradas fueran de lava teniendo que esquivarlas saltando hacia la grada de más abajo con la imaginación de niño que tenía incluyendo la felicidad que sentía desde que amaneció.

Promise me [Maylor]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora