Basado en la película/libro "The Goldfinch" (2019)
"You machiavellian, natural villain"
Hope es una muchacha criada en el núcleo de una familia religiosa, de buenos modales, buenas costumbres y adorada por todos.
Boris es un adolescente rebelde, c...
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—¡¿Estás hablando en serio?!
El grito ofendido de Kali me hizo levantar el rostro. Debí haber sabido que el hecho de contarle implicaba un desastre inminente en segundos.
Hizo el amago de levantarse, pero la detuve.
—No te molestes —sonreí frágilmente—, ya no va a venir.
—¿A qué te refieres?
Medité un segundo si debía decirle o no. Era algo personal que me había contado, pero ¿qué más daba? La gente se preguntaría dónde estaba eventualmente y terminarían sabiéndolo. Además, Kali no era de esparcir rumores.
Reprimí una risa. Era gracioso como yo aún me preocupaba por guardar sus secretos, por su integridad como persona, cuando me había hecho tanto mal. Me había usado como a una muñeca de trapo, sin considerar mis sentimientos, mis pensamientos, todo lo que alguna vez le dije y lo que no, lo que vivimos, ese momento tan íntimo que cometí el error de entregarle...
—Su padre lo dejó —me encogí de hombros—, así que ya no va a volver a estudiar. Lo más probable es que ahora sí se convierta en un narcotraficante.
Kali se quedó en silencio, supuse que trataba de analizar la información que le había soltado, pero su silencio me perturbó tanto que me vi obligada a sacudirla.
—Hope...
—¿Qué?
—¿Tú sabías de todos estos... problemas que tenía?
¿Sabía?
De seguro tenía un par de secretos más, clientes, jefes, ¿qué demonios podía saber yo?, pero había algunas cosas que si sabía. Me había contado su historia con Theo, lo que fue dicho y hecho, los errores y travesuras, esas noches de insomnio acostados en la moqueta, borrachos hasta los dedos de los pies y con vomito seco en la ropa. Me contó de sus aventuras alrededor del mundo, su madre, su padre, y él. Pero me mintió una vez, y pudo haberlo hecho mil más. ¿Quién sabía?
Pero no podía darle una respuesta desprolija a Kali, así que me limité a asentir con lentitud.
—Algunos.
—¿Y te sorprendes? —preguntó, incrédula, despegando su espalda del muro para inclinarse hacia mí.
—¿Cómo?
—Estaba completamente jodido —levantó sus manos, haciendo un gesto de obviedad—, ¿no es así?
—Pues...
—Lo estaba —afirmó—. Sabes todo lo que hizo, lo que seguía haciendo, su pasado y básicamente lo que pasaba por su cabeza. Probablemente tiene un trauma psicológico que no lo deja amar, tal vez solo necesitaba amor y comprensión para un rato. Eres muy inteligente, Hope —me miró con sus ojos empapados de pena, y esa mirada no me gustó nada—, no creo que te hayas creído todo lo que te dijo, ¿o sí?
