Cenizas Azules (Libro #2 De Fuego Azul)

Capítulo 20

Evelen

Estaba con las piernas alzadas y la mirada fija en mi celular esperando recibir una llamada de Christian, pero este no se dignaba a aparecer desde hace días.

Sentí como alguien se aproximaba hacia la casa y saqué mis colmillos en un instinto natural, me esperé para recibirlo a la puerta, cuando estuvo más cerca supe que era Estela por su inconfundible perfume.

- Sé lo que has hecho- me encaró.

- Si ya lo sabes, también me imagino que debes saber que no puedes hacer nada.

- Deja en paz a Rachel, tú no eres como Helena.

- Estoy harta que definas lo que soy, no sabes quien realmente soy.

- ¿Por qué te empeñas en ser un monstruo?, he visto tu alma y guarda algo de humanidad.

Me fastidió que husmeara en mi interior y en un impulso lance un nube de humo cargado de cenizas azules, ella comenzó a toser y vagamente intentó lanzar un hechizo pero sus fuerzas fueron debilitadas. A duras penas logró salir de la nube con los colmillos visibles, los ojos amarillos y algo de pelo en su cara. Fue directo a mi hombro y me mordió fuertemente. La empujé lejos y ella rabio de dolor al sentir el sabor amargo de mi sangre.

- ¿Quieres que te mate?- le grité.

- Sé que no lo harás, aunque finjas odiarme.

Me molestó más aún su testarudez e hice que se abriera una brecha que la llevara directo a casa. Sentí una jaqueca que me hizo tambalear, había intentado leer mi mente y obviamente falló.

Rachel se encontraba alimentando al perro de la casa, en ese instante vi a sus espaldas a Jack que se quedó atónito de ver a Rachel, ella parecía desconcertada.

- Sangre azul, pensé que no vendrías más.

- Yo sigo- dijo.

Rachel cargó a Daby en sus brazos y lo acarició, nos dejaba de mirar a Jack desconcertada.

- Eso es una buena noticia, con la salida de tu esposa ha sido una gran perdida para nosotros, ella tiene fuego especial.

- ¿Esposa?, ¿No hablaran de Jeim verdad?- preguntó poco convencida.

- Si hablamos de ella.

Jack me quedó mirando reprochandome el hecho de que le hubiera dicho la verdad a Rachel.

- Rachel, puedo explicartelo, lo entenderás cuando vea le campamento de los sangre azul y ellos te cuenten su historia, hay cosas muy ocultas de los fuego azul y una de ellas es la gran matanza de los sangre azul en las cárceles.

- No fue un asesinato, fue un accidente.

- Que conveniente que justo sucedió cuando los fuego azul estaban debilitados y estaban en peligro de perder el primer lugar en la pirámide.

Seguía sin convencerse lo leí en sus pensamientos pero vi una chispa de duda y eso era bueno. Yo podía ser de todo, menos una mentirosa y esta causa de los sangre azul era algo que realmente me interesaba.

En uno de mis escapes con Crhistian conocí el campamento sangre azul, con jóvenes de mi misma edad llenos de odio hacia los fuego azul. Nunca había amado a los fuego azul, eran racistas y demasiado estrictos con las reglas, pero nunca llegué a imaginar que hubieran sido capaces de eliminar a miles de sangres azules solo para salvaguardar su lugar en la pirámide, ellos pintaban ser perfectos.

- No creo nada de lo que dicen- dijo Rachel.

- Creo que creerás después de que veas esto.

Agarré su mano y dirigí la mirada a Jack para que nos siguiera, abrí un portal con rumbo al campamento sangre azul localizado en las ruinas de la cárcel donde murieron muchos sangre azul.