Somewhere Only We Know (Chalastor )

Parte 14: Love me Like You

Del otro lado del hotel, Lilith se unía a la comitiva caótica para el arreglo de las mesas y la decoración del salón. Llevaba un vestido purpura con mangas cortas, muy casual.

- ¡Te dije que debíamos haber hecho esto antes! Estamos a seis horas de que llegue la prensa a instalarse. – Vaggie era mandona y severa de nuevo.

Niffty era de gran ayuda en aquellos momentos, había dado una última sacudida a todas las superficies y ponía los manteles y las flores infernales en el centro de las mesas.

Angel Dust intentaba acomodar cubiertos alrededor de los platos, pero desconocía del tema.

- Soy una zorra, Charlie, estas cosas son de damas, si me pides que haga algo, que sea algo que pueda hacer con mi trasero. – Sonrió y se alejó riendo mientras ayudaba a Niffty a colocar los platos.

Charlie miraba a su madre, que a leguas se notaba que no aprobaba las amistades de su hija. Para su sorpresa, con un movimiento de su mano, la vajilla quedó puesta sobre las mesas. Todos aplaudieron.

El salón estaba listo. Charlie corrió a tomar las manos de Vaggie, y dieron vueltas en la pista de baile. Lucifer entraba al salón, y miró a las dos chicas. Habían pasado por muchas cosas, era refrescante verlas sonreír a pesar de todo.

Charlie se detuvo de pronto y nuevamente puso cara de preocupación.

- ¡Alastor! No se si ya está preparando la cena. – Se aproximó a la puerta, pero su padre se paró en el camino.

Charlie no lo iba a permitir, no en ese momento. Así que cerró los ojos, en esta ocasión fue más fácil, simplemente se desvaneció en el aire, ante la cara de sorpresa de su padre, y reapareció detrás de él.

Siguió corriendo por el pasillo hasta llegar a la cocina.

El lugar se veía mucho mas grande, y los esbirros de Alastor preparaban todo tipo de platillos. Charlie buscó con la mirada a Alastor, sin encontrarlo. Extrañaba el vínculo. Antes podía llamarlo con solo pensar en él.

Salió nuevamente al pasillo, y caminó por él hasta llegar al lobby. Y fue entonces cuando los vio.

Alastor abrazaba a Rosie en una de las bancas del jardín. Ella estaba de pie entre sus piernas, mientras el la abrazaba de las caderas, Rosie le acariciaba la cabeza. No había manera de saber cual era la situación, pero no lucía muy bien.

- Vaya. Dos de los grandes lores del infierno, se ve que se llevan bien. – Charlie podía reconocer la voz de Harold donde fuera. Lo miró con el ceño fruncido, pero había muchos sentimientos en su cabeza. En seguida las lagrimas aparecieron en sus ojos.

Harold se acercó con cautela, y puso su mano en su hombro. Charlie luchaba por no llorar en frente de él. En el pasado, era casi lo único que hacía cuando estaban juntos. Llorar.

-Charlotte, creo que, la postura de la futura reina, no debería ser la que estás tomando. Debes fortalecerte con estas experiencias, y saber en quien confiar. Después de todo, una acción vale mas que las palabras. – Charlie se detuvo. Las palabras que salían de su boca eran similares a las que Vaggie usaba cuando quería llegar a un punto y hacer que se calmara.

Respiró profundo. Miró a Harold, los años y el dolor, lo habían cambiado para bien. Se veía mas centrado y amable, no como ese chico con el que había salido años atrás.

-Gracias Harold. Llámame Charlie, por favor. -Harold sonrió. Iba a agregar algo cuando Vaggie y Angel los interrumpieron.

- Charlie. ¡No tenemos un vestido para esta noche! – Vaggie miraba a Harold con los ojos entrecerrados.