Hace un tiempo escribí un texto sobre el amor. Pero nunca lo subí. La palabra me daba demasiado respeto teniendo en cuenta lo poco que conozco de ella.
El amor romántico es algo precioso y de verdad, pero a la vez algo que se ha publicitado como dependiente, eterno y tóxico.
En el pasado lo rocé, sentí algo sobrenatural. Pero me asusté. Me asusté y lo dejé tirado porque cuando somos tan jóvenes, como yo era en ese momento, no somos conscientes.
No somos conscientes de la dualidad del amor. La dualidad de que puede llevarte hasta lo más alto y bajarte hasta el subsuelo en muy poco tiempo.
El amor de pareja, como yo lo entiendo, es una responsabilidad, es cuidar a la otra persona, es estar ahí, es escucharla, es compartir tu felicidad, celebrar sus alegrías y estar en las penas.
El amor de pareja es fuego, es pasión, es compromiso y lealtad. Es quererte mucho a ti mismo para poder dar lo más bonito que tienes a otra persona.
El amor de pareja es el enigma más bonito, más deseado y más duro de todos. Es algo a lo que todos aspiramos y que pocos pueden sostener en el tiempo.
Sí.
Esta es la parte 0, mi parte 0.
Por fin, estoy segura de que merezco todo esto tan bonito, estoy dispuesta a darlo y a acogerlo si viene.
Querida mía, todo ese amor que hierve dentro de ti,
alguien se merece un poquito.
Y tú, tú te mereces que te quieran y te deseen.
Pero no olvides nunca, que primero estás tú, y que todo lo bueno que venga,
sera un añadido.
Recuerda, no hay nadie que te complete,
porque tú ya lo estás.
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Mi filosofía básica.
Non-FictionTe presento el fascinante, extraño, divertido y caótico mundo de mi cabeza. Aquí dejo mis experiencias y mis aprendizajes. Son solo mis granitos de arena ante las dificultades y lo bonito que tiene esta vida. Todo son opiniones, no es la verdad, no...
