Siempre me gustó ducharme, darme baños y estar limpia, una de las muchas desventajas de vivir el fin de todo. En cuanto terminé de ducharme encontré ropa de mi talla en la celda que pude elegir, después de eso bajo al comedor, Beth y Rick me reciben con una sonrisa cálida mientras los otros me miran con desconfianza.
-Ella es Maggie.-señala a una castaña de ojos verdes bastante linda. -Glenn.-el chico asiático me saluda con la mano. -Mi padre, Hershel.-el anciano asiente y me tiende una sonrisa, le devuelvo el gesto. -Carl.-el chico tiene tal vez catorce o quince años. Puedo asegurar que es hijo de Rick; tiene sus ojos. -A los Dixon ya los conoces ¿Cierto?-asiento y miro a los hermanos sentados al fondo. -Carol.-una mujer de cabello corto que no me ha dejado de mirar mal. -Michonne.-la chica de la katana. -Axel.-señala a un hombre con un bigote divertido y traje de preso. -A Rick obviamente lo conoces.- Rick me sonríe. -Y finalmente, Judith.-me muestra a una bebé hermosa, jamás pensé ver a una bebé en éste mundo, incluso me da miedo romperle gracias a mi brusquedad.
-¿Es real?-todos ríen ante mi comentario.
-Bastante, Daryl la apodó "Pequeña patea traseros".-me informa Carl provocando una sonrisa en mi rostro. -Papá dice que se parece a mí.-mira a Rick. ¡Lo sabía!
-Es hermosa Rick.-Grimes se acerca y acaricia la cabeza de su bebé con ternura.
-Lo sé.-sonríe y todos vuelven a sus tareas menos Glenn, Daryl, Maggie, Hershel y Rick. Le entrego a su hija ya que sé que sobro en la conversación a tomar por el grupo. -Natalie, ¿Podrías cuidar de Judith?-asiento y salgo de ahí, los murmuros no tardan en llegar a mis oídos.
-Parece que seré tu nueva niñera Judith.-le digo a la pequeña de ojos azules. Sólo juega con mi húmedo cabello. Camino hasta llegar a mi celda, pienso arreglar mis cosas mientras la pequeña patea traseros juega en mi cama con un patito de hule. En realidad no tengo muchas pertenencias, sólo dos mudas de ropa, un cuchillo de caza, un encendedor de gas y un arma cargada, todo lo demás lo dejé para perder peso en mi equipaje. Judith sigue jugando indiferente a mi presencia, estoy mirando sus perfectos rasgos cuando un bastante enojado cazador pasa veloz por el pasillo, tomo a Judith en brazos y me asomo al piso inferior del pabellón, al parecer discutió con Rick y los demás.
-Ni pensarlo Rick, no te haría vivir con Shane después de lo de Lori.-Rick queda petrificado ante la confesión de Glenn. -Merle se larga.-argumenta el asiático y sale del pasillo dejando a Rick a punto de hablar. Decido ir a ver a Daryl, al final es quien me trajo aquí. Judith juega con mi blusa mientras camino hasta la última celda del bloque, la de Daryl.
-¿Puedo?-pregunto en la entrada. Dixon está sentado en la cama haciendo algo con una flecha.
-Ajá.-dice sin voltear.
-¿Estás bien?-me siento a su lado, no muy cerca.
-Da igual.-no me mira.
-"¿Pequeña patea traseros?"-hace eso de nuevo, lo que creo que es una sonrisa.
-Merece el título, es una guerrera.-asiento. -¿Cuándo te vas?-me mira por fin. Levanto los hombros.
-Tres días, tal vez cuatro.-asiente una sola vez.
-¿En verdad te vas a ir?-suspiro para luego susurrar un "No lo sé." -Natalie aquí hay comida, agua, seguridad; no puedes dejar pasar esto.-aunque sea un total idiota todo lo que dice es cierto.
-Mejor cuéntame sobre su amigo de hace unas horas.-bufa, pero no de enojo, incluso parece divertido.
-"El Gobernador" por favor.-ambos sonreímos. -Un cabrón que se cree dueño de todo, tiene un pueblo llamado Woodbury, tienen todo para vivir bien pero quiere ser el único líder. Merle estaba con él hasta hace una semana y tiene a una de las nuestras, era de las nuestras.- Dixon parece triste. -Andrea estuvo con nosotros hasta la granja.-al ver que no entiendo ni un poco bufa. -No te pienso contar todo, tardaría un año... siguiendo con el idiota ese, Michonne también estuvo con él, pero no le tuvo confianza y huyó a la primera oportunidad, justo hace una semana tuvimos un pequeño encuentro en su pueblo luego de que capturó a Glenn y Maggie, casi los mata. En ése encuentro la samurái le quitó un ojo. Mi plan es quitarle el otro.- me ha dejado claro que el Gobernador no le agrada.
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Arrow #PTWD2016
ספרות חובבים-¡Suéltame!-grito furiosa al hombre que casi rompe mi brazo. Baja la ballesta y toma mi otro brazo. -¿Quién eres?-gruñe, bueno, era de esperarse. Tiene cara de pocos amigos. -Tú peor pesadilla.-dicho esto le doy una fuerte patada en la entrepierna...