Alexander POV.
Estamos en la azotea del edificio, fumando un cigarrillo, y con un par de cervezas sobre la barda.
Pasa de media noche, y aunque ambos estamos cansados, necesitábamos salir a tomar aire fresco para despejarnos después del momento tan intenso que habíamos pasado.
Tomamos una ducha juntos, y nos pusimos ropa cómoda.
Estuvimos un rato platicando en mi sala, pero Roman quería fumar.
Una de las desventajas de no tener balcón.
No quería salir a la calle, y la azotea está a menos pisos que la entrada del edificio, así que por eso vinimos hasta acá.
Estamos recargados sobre la barda, que llega a nuestros pechos, mirando hacia la ciudad iluminada.
-¿Qué hiciste todo este tiempo? –le pregunto.
-Te sorprenderías –contesta sonriendo-. Hice muchas cosas.
-¿A si? ¿Cómo cuáles?
-Compré muebles para la casa –contesta, dándole un trago a su cerveza-. Y la pinté.
-¿La pintaste? –inquiero-. Eso quiere decir que...
-Si –sonríe-. La compré.
"Y también estuve dando vueltas por la ciudad, para saber qué tipo de negocios son rentables.
-Puedo ayudarte con eso –le digo-. De todas formas, ya me pagaste.
Me quiña el ojo y sonríe.
-¿Cómo lo compraste? –le pregunto. Porque comprar un apartamento no es solo sacar el dinero. Son trámites legales-. O sabes que, prefiero no saberlo.
Sonríe ampliamente.
-No fue nada malo –me dice-. Hablé con unos contactos que tengo por acá. No exactamente en Washington. Pero me ayudaron a conseguir a una señora que pusiera el apartamento a su nombre.
"Yo lo pagué. Y después hará el cambio de propietario.
"Tengo que vivir aquí por lo menos un mes para poder empezar a tramitar mis papeles.
-Dijiste que eras ciudadano –le digo.
-Así es –concuerda-. Tengo la ciudadanía. Pero aún tengo que tramitar la licencia, identificaciones, constancias... todo eso. Y para eso tengo que hacer un historial de vida aquí. Mínimo de un mes.
"Fui con un abogado. Me está ayudando con los trámites.
-Bueno, parece ser que te favoreció todo este tiempo a solas –sonrío.
-Sí, la verdad sí. Tenía muchas cosas que poner en orden.
Asiento y le doy un toque a mi cigarro antes de beber de la botella de cerveza nuevamente.
-De hecho... quería platicarte sobre algo –me dice. Automáticamente distingo la nota de picardía en sus ojos.
-A ver ¿Qué pasó?
-Bueno pues... conocí a alguien –comienza-. O sea, fue la persona que me vendió el apartamento.
"No sé si trabaje en bienes raíces o algo así. El punto es que lo conocí.
Entrecierro los ojos, sin saber a dónde va exactamente.
-Aja.... –exclamo.
-Tuvimos varias reuniones, y de hecho me cayó muy bien. Y salimos un par de veces al café, porque le dije que era nuevo en la ciudad, y le pregunté sobre los negocios rentables. Es joven. Apuesto. Y tiene muy buena química para tratar con las personas.
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Hunter
Romance"¿Estás dispuesto a morir por alguien?" me preguntó "Yo no moriría" respondí "Viviría en él".