Capítulo 4: Plantón a los cachorros por una buena causa.

405 56 6
                                    

Ten se despertó y lo primero que hizo fue ver el teléfono móvil, tenía algunas notificaciones de Instagram, supuso que serían likes de la última foto que subió, una foto en casa de Haseul de su nuevo peinado.

Había resubido a su historia de Instagram la historia de Haseul en la que salía cómo lo teñía, y al abrir la aplicación, lo primero que le llamó la atención fueron los comentarios de la foto:

@nhs__5: créditos a la peluquera payaso

@nhs__5: tienes un moco

@kun11xd: Ay por dios lo que faltaba xd

@hayoungieee: TEN EL MELENAS EL TERROR DE LAS NENAAAAAS

@xlcyx: ¡omg que cambio! ¡te queda genial!

@na.jaemin0813: por eso chillabas tanto en el cuarto de mi hermana??? Xddd

@i_m_hendery: que guapetón daddy

¡Tenía un comentario de Chaeyong! ¡UN COMENTARIO DE LEE CHAEYONG! Respondió a todos sus amigos con comentarios tan estúpidos como los suyos, pero cuando tuvo que responder a Chaeyong comenzó a ponerse nervioso. ¿Qué le ponía? Un "gracias" quedaría demasiado soso, pero tampoco quería escribir mucho más.

@tenlee_1001: ¡graciaas! T-T <3

¡Un emoticono siempre quedaba bien! Fue a revisar sus mensajes. Viendo la hora, sabía que Haseul aún no estaba despierta por lo que le llamó como acostumbraba a hacer. Ten era como su despertador personal.

Marcó su número que se sabía de memoria y puso el altavoz mientras se desvestía.

—Eres la imagen personificada de un despertador. Como el demonio. —Ten se rio al oír la voz ronca de su amiga por las mañanas, cada día le soltaba una cosa diferente, nunca un "buenos días"

—Sí, sí, buenos días a ti también, vieja gruñona.

—Soy cincuenta...—Ten interrumpió el comentario de Haseul.

—Cincuenta y dos días más vieja que yo, ¡ya lo sé! —Abrió su armario mientras examinaba su ropa. —¿Qué me pongo hoy? ¿Cuál crees que sería un buen outfit para Chaeyong? —Haseul se tomó el tiempo de examinar en su cabeza la ropa de Ten. Conocía cada prenda de su armario, hasta las que nunca se ponía.

—Ponte esa camisa de cuadros, la de manga corta, pero déjate los dos últimos botones abiertos y... cualquier par de pantalones que tengas sin agujeros. Unos oscuros.

—Perfecto. ¿Llevo las pulseras y los anillos de siempre?

—Nada de accesorios, recuerda. "Un chico fino y recatado sin la bisutería barata que llevan los chicos que acaban siempre en el aula de castigo" —Haseul agudizó su voz repitiendo las palabras que Lee Chaeyong había escrito en el manual.

—¡Chaeyong no habla así! —Se quejó Ten.

—Era para que me entendieras payaso. Y si que tiene la voz un poco aguda, ¿no crees? —Haseul aún no había salido de la cama, pero no se preocuparía mucho por elegir un conjunto adecuado. Se pondría el primer par de pantalones y la primera camiseta que pillase de su armario y tras lavarse un poco la cara se pondría base de maquillaje para tapar las marcas de su acné. Haseul podría ser una dejada a la hora de escoger un conjunto de ropa, pero le daba más importancia a que su rostro luciese fresco y brillante.

—Tiene la voz más bonita que he oído en la vida...

—Y tú cada vez tienes menos neuronas, en fin, te dejo payaso. —Se despidió Haseul. —Voy a desayunar y mear.

Manual de Lee Chaeyong |Ten; NCT|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora