¡Hey tú! ¡Chico popular!

Nota 25

¡Hey tú! ¡Chico popular!
Lo cierto es que esta nota es un tanto improvisada, pero es que no he tenido tiempo para seguir escribiéndote... llevo tres horas metida en un autobús de camino a Cracovia, ya que anoche me alojé en Varsovia o, más bien, debería decir que nos alojamos. Este viaje está siendo mágico, muchísimo más de lo que pensaba... Me encanta que me cojas de la mano mientras visitamos juntos la ciudad, que me mires embelesado mientras piensas que no me doy cuenta, que me abraces de forma inesperada por la espalda y que te agarres a mí tan fuerte como si fuera a desaparecer de un momento a otro. Los compañeros de clase nos siguen mirando de una forma bastante extraña, como si no se terminaran de creer que el chico más popular de instituto esté saliendo con una de las chicas más "normalitas" del curso; pero lo cierto es que tanto a ti como a mí, nos da igual, obviamos ese tipo de miradas porque no merecen nuestra atención... Lo cierto es que estás sentado a mi lado, pero te has quedado dormido y no puedo parar de mirarte; debes estar soñando algo precioso porque tienes una hermosa sonrisa alegrándote el rostro, me gustaría que sonrieras así toda la vida a mi lado, Óscar.
Ayer estábamos en un hotel precioso, con una decoración espectacular y unas vistas despampanantes... compartí la habitación con mi mejor amiga y en mitad de la noche alguien llamó a la puerta de nuestra habitación... mi amiga se había ido a la habitación de su novio cuando yo me había quedado traspuesta, por lo que estaba completamente sola; abrí la puerta y me encontré con una imagen tan mona como seductora. Estabas en el pasillo, con un pantalón de pijama y una camiseta de manga corta; me apremiaste para que te abriera la puerta porque no querías que nuestro profesor te pillara entrando en mi habitación. Una vez dentro, me abrazaste, muy fuerte y después me apoyaste suavemente contra la pared y empezaste a besarme de forma brusca, apretándome contra ti, cada vez más deprisa; sentía tu corazón a mil por hora y el mío aún más deprisa si cabe... poco a poco nos fuimos alejando de la pared y nos fuimos acercando a la cama; me empujaste, me tiraste sobre la sábana blanca tan pura y me sonreíste provocativamente, te tumbaste sobre mí y me besaste, comenzaste a acariciarme el abdomen sobre la ropa y entonces, cuando estabas a punto de levantarme la camiseta, te cogí la mano con fuerza y te frené. Lo cierto es que no estaba preparada para quitarme de encima tres toneladas de complejos, lo siento. Tú me sonreíste de nuevo, pero esta vez de forma dócil y amable, sin atisbo de frustración en tu mirada; sencillamente paraste, me diste un beso en la frente y te tumbaste a mi lado.
Sentí que los párpados me pesaban demasiado y, cuando me quise dar cuenta, ya estaba sonando la alarma a las siete y cuarto de la mañana y tú estabas tumbado a mi lado abrazándome por la cintura. Gracias por amarme así, cariño, con mis limitaciones, con mis complejos y con mis frustraciones.
Pd1: Lo siento, pero aún no estoy lista.
Pd2: ¿He dicho que me amas? No sé por qué si tú aún no me lo has dicho a mí.
Pd: Te quiero muchísimo, gracias por nuestra primera noche juntos.
Fdo: Tu Idiota.

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¡Hola a todos! Perdón por no haber actualizado antes, pero es que la realidad de la protagonista es verídica y estoy de viaje de instituto. Actualizaré en cuanto pueda, estad pendientes de la historia. ¿Que os está pareciendo? Espero que la disfrutéis muchísimo.
Un beso:
La Dama Negra.