Capitulo 15

6 0 0
                                    

Esmeralda

¿Por qué?

Estábamos en mi cuarto, los cuatro. Cada uno en sus asuntos pero mi cuerpo simplemente acostado.

-- ¿Por qué llegaron a mi vida? -- pregunté con rabia.

La rubia vestida provocativamente en el último asiento me miró con sorpresa.

-- No lo sé -- me respondió Darien -- yo llegue después de lo que paso con... -- miró hacia la nada -- con ese hombre.

-- Hablas de la violación -- dijo Paul con simpleza.

El recuerdo me golpeó con fuerza, el amigo de papa. Yo en mi cumpleaños de siete años, el tocándome diciendome que era una niña buena.

-- Si -- dijo Darien mirando a la rubia con gafas y un peinado pulcro en forma de cebollita --- de eso hablo.

-- Yo llegue después del bullying -- dijo Paul acomodándose los lentes. -- Todos pensaban que eramos unos tontos, y yo llegue para demostrarles lo contrario.

Sonreí con melancolía, se sintió tan bien actuar inteligente frente a todos ellos.

-- Y yo llegué después de que tu querido Darien matara a tu mejor amiga con la excusa de que la amaba tanto.

Y esa fue Paula, su cabello liso y bien organizado. Ataviada en joyas y ropas caras, su sola presencia destilaba elegancia y no podía más que desear ser como ella.

-- El fruto de su egoísmo sólo logró que Esmeralda terminara peor. -- ella estaba sentada en la mesa del profesor, una pierna sobre la otra y sus tacones de suela roja balanceándose con sutileza -- Paul tan comprometido en hacernos llegar a la universidad, tan escondido de lo que tenía que ver... Y tu Darien tan impulsivo y sociópata, haciendo lo que se te da la gana solo porque puedes.

Ella se levantó de su puesto y empezó a caminar de un lado a otro.

-- Bueno Paula -- comente yo observándola -- en su momento ellos me ayudaron, me dieron soluciones a mis problemas. Darien fue lo suficientemente valiente como para apuñalar el brazo de ese hombre cuando volvió a intentarlo, llamando a papá diciéndole todo. Paul ha ganado muchos exámenes por nosotros y nos va a ayudar a entrar a la universidad pronto ¿Que vas a hacer tu Paula?

-- Encubrir el crimen eso es obvio -- ella me sonrió -- Vamos bien con la idea del suicidio pero ¿Cuánto tiempo pasará hasta que alguien se de cuenta? Pueden ser días, meses, años... Pero es claro que la familia Domínguez no se quedará con el sin sabor de la muerte de su hija.

-- ¿A qué quieres llegar niña bonita? -- pregunto Darien retocando su maquillaje con un espejo de mano.

-- Alguien a quien culpar -- respondió ella con rapidez -- estaba pensando en ese muchacho Bruno, daría la vida por ti.

-- No te atrevas -- empecé a caminar hacia ella apuntándole con un dedo -- a tocar un solo cabello de ese hombre -- Paula hizo un puchero, como si seguir mi orden le costará -- ¿Quedo claro?

-- Como el agua, -- me sonrió -- no obstante tenemos que encontrar una manera de lidiar con todos estos problemas.

Los zapatos de la última voz en mi cabeza resonaban al son de sus pasos, su pantalón ancho color caqui se balanceaba con gracia mientras meditaba un poco.

-- El rebelde del fondo creyó muy divertido asesinar a la niña Dominguez -- miró de reojo a Darien -- el cerebrito no hace más que revolverse en autocompasión y tu no sabes que hacer, para ser una manipuladora de primera te quedas sin opciones.

-- Madre -- dijo de pronto Paul moviendo una pierna con insistencia.

-- ¿Qué? -- exclame -- ¿Te has vuelto loco? Mama nunca permitiría que nosotros hiciéramos algo tan estúpido, ella nos ha protegido y ...

-- Mentira -- susurró Darien -- Madre solo nos ha moldeado a su gusto, a ti te hizo una niña perfecta, linda y vanidosa -- me miró con rencor -- a mi me obligaba a mantener mis "monstruosidades" escondidas en lo más profundo de estas cuatro paredes.

-- No es culpa mía que seas un fenómeno -- grité --tu y tus experimentos matando gatos y perros de la calle.

-- Ugh qué perturbador -- comentó Paula mirando sus uñas.

-- Es cierto, -- ladró Paul -- tú tenías toda la atención, los regalos y las mejores experiencias -- empezó a llorar.

-- Dios no puedes tener una conversación sin ponerte a llorar como un tonto -- volví a gritar con rabia.

-- A mi ni me miraba -- me escupió Paul levantándose por primera vez de su asiento dejándome anonadada -- ni una sola palabras así fuera despectiva, nunca me felicitó por ayudarlos a graduarse cuando solos nunca lo hubieran logrado.

-- Oye dame un poco de crédito -- dijo Darien moviendo su cabello con la mano -- hubiéramos logrado un par de cosas con la copia que yo hacía -- miro al cielo como si recordara un momento preciado -- era muy bueno.

-- ¿Crees que esto es un juego? -- preguntó Paul caminando rápidamente hacia el.

-- ¿Te crees la gran cosa con tus dieces y cabello pulcro? -- dijo Darien irguiéndose frente al último -- Sigues siendo nadie, una herramienta más para mantenerla a ella -- me señaló con el dedo -- feliz y en el buen camino -- acercó su cara tanto que pude sentir la tensión correr por mis músculos -- nunca seras como yo.

Paula aplaudió otra vez sentada en la mesa del profesor, con una sonrisa burlona en el rostro.

-- Y ahí es donde fallaron -- cruzó una pierna sobre la otra -- Se concentraron tanto en seguir su tonta fantasía de que tenían una vida -- los miró a ambos, esta vez sus ojos fríos como el hielo -- que olvidaron que para el mundo real no son más que simples imaginaciones de una niña loca ¿Quieren vivir? Pueden hacerlo en el momento en que se den cuenta que no son nadie, matamos a alguien y solo se preocupan por lo que va a pasar con sus patéticas vidas después de que nuestra madre nos obligue casarnos con ese viejo verde. -- Su expresión me intimidó, si a mi me hacian temblar sus palabras no me imagino como se sentían Darien y Paul.

-- Nosotros merecemos más -- empezó Darien.

-- No me importa si ustedes merecen más tener una vida que ella, -- interrumpió Paula -- todos en este cuarto merecemos vivir más que Esmeralda pero igualmente eso no cambia el hecho de que fueron estúpidos al creer que ustedes se podrían quedar con la vida de este cuerpo.

Nos quedamos en silencio, reflexionando y cayendo en cuenta en que por más que yo por mucho tiempo los vi como hermanos, no eran más que herramientas. Paula estaba en lo correcto, durante años correteamos como perros alrededor de la pantalla en vez de tomar el control para cambiar el canal, para saber cómo lidiar con cada asunto. Odiamos, amamos y vivimos por separado creyendo que cada uno tendría el cuerpo para sí mismo, ahí radica nuestro error y el problema con el que tenemos que resolver lo más pronto posible.

-- Tengo una idea. -- dije.

-- Y así es como funcionaran las cosas -- sonrió Paula -- trabajo de equipo.

Cuestion de perspectivaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora