XIII

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Wendy volvió a mirar a quien un día fue su mejor amiga y cuñada, Sana, quién tomaba del alcohol que minutos antes le habían servido.

—¿Qué quieres ahora?

—Verte. Reclamarte. Incluso quisieras golpearte, pero EunHa me enfrentaría porque no es una conducta apropiada de una princesa.

—No hables de nobleza.

—Es lo que soy Sana, y lo que es EunHa. Y lo que serías si no hubieras traicionado a mi hermana con Momo entre su relación— el vaso de Sana quedó en medio camino—. Eun no sabe de eso, pero yo sí, yo sí sé todo lo que hiciste, incluso en dónde. Porque EunHa era ingenua y entregada a ti, mientras tú, tú solo te cansaste.

—No sabes...

—Claro que sé, y no sé que estás haciendo acá pidiendo su perdón, tienes una hija, una pareja, y si la cagaste una vez, no lo hagas dos veces, y menos teniendo a una cachorra que sigue tus pasos y te admira. Sabía todo esto incluso antes de decirle a EunHa que fuera por ti, creí que dirías la verdad, en cambio hay un escenario diferente.

—Hay un escenario diferente por Lisa. Si esa alfa estúpida no se hubiese metido, EunHa me hubiese perdonado desde hace bastante tiempo.

—A lo mejor, pero, Lisa se metió, y Lisa te ganó el mandado. Te doy un consejo, vete. Deja a mi hermana y vuelve a tu vida feliz con Momo. Y deja que EunHa se construya la suya. No suelo hacer esto pero, si vuelvo a enterarme que te presentaste, enviaste, u obsequiaste algo para EunHa yo misma me encargaré de arruinar lo poco de vida que tienes.

—¿Es una amenaza?— preguntó levantando su ceja.

—Es una amenaza— afirmó.

Salió del lugar soltando suspiros, caminó a un callejón y gritó, gritó y lloró. Se maldijo y golpeó la pared en varias ocasiones, había sido tan estúpida.

La idea era que EunHa regresara con Sana y estuviera feliz, pero el informe llegó tarde, y EunHa ya había partido en busca de su destinada. Ella se había encargado de mandar a su hermana a destruir la poca esperanza de su relación. Se había encargado de mandar a su hermana a reencontrarse con la persona que le fue infiel y jugó con sus sentimientos.

Terminó sentada en el piso sucio y al lado de un contenedor de basura.

Y si su plan con Sana no había funcionado. El de Lisa sí tenía que funcionar. Porque su hermana merecía ser feliz, y si la ex de JungKook la hacía feliz, JungKook se podía meter por el culo la indignación.

Entró al reino de ChanYeol por la puerta trasera, y con el menor ruido posible trató de llegar a su habitación, pero quedó a mitad de las escaleras cuando la voz de su  segundo hermano resonó:— Buenas noches, Wendy.

Un suspiro salió de sus labios, y bajó colocando sus manos dentro de sus bolsillos. En el sillón estaban ChanYeol, su padre, SeungWoo, mientras atrás del sillón seguían SeungCheol, YoonGi, JungKook y SeJun. Los alfas de la casa.

—Buenas noches familia hermosa.

—¿Has mirado la hora?— SeungWoo preguntó con las piernas cruzados, todos mantenían los brazos cruzados y el ceño fruncido. Enfadados. Era más de medianoche.

—Es muy noche...

—¿Solo, "muy noche"?— SeungCheol preguntó.

—Se me pasaron las horas volando.

—¿Y dónde estabas?— preguntó ahora su padre.

—Salí a tomar un café.

—Wendy, es más de medianoche, las cafeterías ya están cerradas— SeJun la había retado.

—Los cafés de la autopista están más buenos— repuso—, me reuní con alguien, una vieja amiga.

—¿Con quién?— JungKook se unió al interrogatorio.

—Sana— susurró tan bajo que apenas pudieron escuchar gracias al silencio del reino.

—¿Qué hacías con ella?— YoonGi que había permanecido callado se unió.

Wendy compadeció de las hermanas del alfa y de los futuros hijos que tendría:— Solo saludarla.

—Yo me encargo desde aquí, pueden ir a dormir, en especial ustedes, JungKook, YoonGi, Jimin y TaeHyung estarán esperándolos.

Recibió los besos de buenas noches de su familia y se sentó en el sillón junto a ChanYeol.

—Chan...

—¿Sabes lo de Lisa? —asintió— ¿Y qué opinas?

—Yo hice que EunHa fuera al viaje, y yo seré su cupido con Lisa, JungKook no es impedimento.

—Ella no lo mira así.

—EunHa necesita a Lisa, y mañana mismo sabré si Lisa también necesita de ella.

—Seré yo quien vaya, tú estarás castigada. Deberás ayudar en el invernadero.

—Pero, ya no soy una niña, puedo llegar cuando quiera y hacer lo que quiera.

—Son reglas de la casa, Wendy. Pequeña o no, estarás castigada— fue la última palabra de ChanYeol y caminó hasta su cuarto dejando a Wendy haciendo un berrinche en silencio.

Al menos ChanYeol se encargaría de ir con Lisa, un paso más cerca de la felicidad de EunHa.





























—Te prometo que no fallaré, antes de que me vaya, los dejaré en las mejores manos, antes de que mi luz se apague, quiero que mi familia brille el doble. ChaEun, pronto estaré contigo. Espérame. Aún quedan varios problemas que resolver y entonces podré ir, guárdame un espacio en el Después.





Feliz navidad bellos 💕

【Mi hermosa princesa.】 「L E」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora