El destino a través de los hilos

Capítulo 53 "Maldad"

Dormimos bastante ya que el día anterior había sido muy ajetreado no queríamos ir a ver cómo había quedado la boutique, pero había que hacerlo yo iba ir sola, pero Piper no quiso que fuera sola así que le pedí a mi madre que me acompañara, pude convencerla de que pasara el día en cama por el sangrando que había tenido acepto pero a cambio me pidió fotos del lugar, llegando fuera del local no pude evitar contener las lágrimas como era posible que por todo lo que hubimos luchado estuviera destrozado.

-Calma Alex lo vamos a reparar.

-Pero eso llevara tiempo madre.

-Solo el necesario hija, además pronto abrirá la otra sucursal.

-Ya lo sé, pero justo ahora necesitamos más ingresos.

-Porque, hay algo que quieras contarme.

-No, solo que ambas teníamos proyectos y la reconstrucción va a salir algo costosa.

-Sé que es tarde para remendar el daño, pero ahora estoy contigo y las voy apoyar en todo.

-Gracias por cierto ¿Cómo vas con mi suegra?

-De lo mejor hija tome la mejor decisión cuando comenzamos desde cero espero que pronto nos visiten en casa.

-Se lo propondré a Pipes sé que eso le ayudara a levantar el ánimo.

- ¿Has hablado con tu padre?

-No solo ahora que estuvimos en la cena ¿Por qué pasa algo?

-Si hija, pero ambos creemos que no es momento de que lo sepas por esta situación.

-Por favor sea lo que sea tienen que decírmelo ¿Anabelle está bien? ¿Él bebe?

-No ella esta perfecta, son otros los motivos.

-Bueno entonces dímelo.

-Prefiero que sea con tu padre presente de acuerdo.

-Esta noche los espero en mi casa.

-No Alex prefiero que sea en casa de la abuela.

-Pero Piper no está en condiciones de viajar de nuevo.

-Platícalo con ella y me avisas no hay prisa.

-Eso hare madre, será mejor volver no quiero dejarla mucho tiempo sola.

-Anda vamos.

Llegamos a casa y me encontré un coche desconocido fuera de la entrada, entre rápido porque temí lo peor estando Piper sola, subí las escalaras muy rápido, lo que mis ojos vieron hicieron que mi corazón estallara en mil pedazos, aunque quise controlarme las lágrimas salían por si solas, como Piper pudo hacerme esto azote la puerta de la habitación para que se percatar de mi presencia y así lo hizo se levantó de la cama intentando correr hacia mí pero tanto era el coraje que preferí dejarla ahí para sin escuchar lo que tenía que decirme, salí de casa y enseguida prendí el auto para salir lo más rápido que pude de ahí, unos kilómetros adelante frene de golpe poniendo a llorar descontroladamente incluso olvide que mi madre seguía en el auto conmigo.

-Alex cálmate ¿Qué paso? (nunca había visto así a mi hija necesitaba saber que había pasado).

-Me engaño (fue lo primero que pude decir) puedes dejarme sola.

-Por supuesto que no dame las llaves del auto, te llevare a mi casa.

-No porque ahí va estar Carol.