A solas

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Las duras palabras del portero titular resonaban con mucha fuerza en la cabeza de Richard. Él pensaba que todo se resolvería con su confesión, pero ahora es un verdadero enredo. ¿No confesarse?, ¿confesarse?, ¿tragarse esos sentimientos por el resto de su vida?, ¿decirle lo que de verdad siente?... nada era lo suficientemente claro. Por supuesto que cada opción tendría sus pros y contras, pero tenía que decidir qué hacer... ¿qué es lo mejor... para los dos?
~Tal vez... Steve no quiera escuchar lo que siento...~ En su mente, solo cabían pensamientos como ese...

El tercer y último entrenamiento comenzó, estaban a solo unos pocos pasos para el torneo de Asia. El entrenamiento de ese día solo se haría en la mañana, pues la tarde estaría destinada a la preparación de sus cosas para el viaje. Todos ya estaban en la cancha y después del calentamiento, el entrenador decidió hacer algunos ejercicios de práctica. Organizò a quienes jugaban la misma posición, naturalmente, Benji y Richard estarían juntos. La actividad a realizar era una práctica de sus movimientos clave, en el caso de Oliver y Ralph, quienes juegan la misma posición como medios, era intentar crear jugadas. Y eso era para todos los demás. Los porteros se acomodaron en una de las porterías para poder empezar el entrenamiento. Uno se colocaría en su posición de portero y el otro tiraría. El primero en posicionarse fue Benji, quien intentaría detener los tiros de Tex Tex. Los tiros eran algo flojos, Richard, al ver a Benji, lo único que podía recordar era aquello que le había dicho.
-¡Vamos, Tex Tex!, ¿qué habilidad desarrollaré de esto si tus tiros son tan mediocres?- Reprochó el portero estrella.
~Maldición...~ El chico de cabellos largos puso sus pies sobre la tierra y tiró con todas sus fuerzas, incluso para el mejor portero de Japón, ese tiro era digno de detener, claro que pudo hacerlo, se estiró hacia el rumbo del balón y detuvo su  trayectoria.
-¡De eso estoy hablando!-
Era turno de Richard. Se dispuso a tapar los tiros de Benji. El chico golpeaba la pelota con mucha intensidad, para Richard era difícil taparlos, la mayoría de ellos entraron en la portería.
-¡Tex Tex, cobarde!, ¡concéntrate en el balón, solo el balón en tu mente!- Puso mucha intensidad en ese tiro y disparó.
~¡Ah!, ¡el balón es lo único que debe estar en mis pensamientos!, ¡como en los viejos tiempos!, ¡la cancha, la pelota y yo!~
Tex Tex logró detener aquel poderoso disparo, y seguido de esto, Benji le aplaudió. Al final del entrenamiento, todos hicieron parejas para terminar con los estiramientos. Benji y Richard permanecieron juntos e hicieron lo que se les pidió. Estaban haciendo las abdominales cuando Benji inició una pequeña e incómoda plática.
-¿Pensaste en lo que te dije?- preguntó seriamente el chico de la gorra.
-¿...Crees que no lo haría?, incluso practiqué mi confesión y luego vienes tú a decirme que me retracte, cambiaste por completo mis planes... por supuesto que pensé en lo que me dijiste.-
-¿Entonces?, ¿cuál es tu conclusión?-
-Vamos, Benji, no podría decidir en tan poco tiempo.-
-Si... quieres un consejo... puedes consultarlo conmigo...- dijo Benji entre titubeos.
-...Sí, gracias... y ya que lo mencionas... ¿qué harías tú?, sé que hablaste sobre no confesarte, pero, siendo ese el caso, ¿qué pasaría después?, no te confiesas, ¿y luego de eso?-
-Pues así de simple, solo... permanecería con él, como su amigo, por siempre a su lado...-
-¿Tragarte lo que sientes... por el resto de tu vida..?-
Benji murmuró: -Eso es lo que he hecho desde hace mucho tiempo... aunque ni siquiera me consideras un amigo...-
-¿Qué has dicho...?- Richard no lo escuchó del todo.
-Tonterías mias...-
-Hm...-
-Richard... considera lo que te he dicho.-
-Lo intentaré.-

Después de una ducha en su habitación, Richard continuaba pensando en aquella situación. La puerta de su complejo sonó e hizo entrar en razón al portero. Se dispuso a atender y quien llamaba era Ralph.
-Richard...-
-Hola...- dijo un tanto decaído.
Ralph se extrañó de la actitud del chico.
-¿Puedo pasar?-
-Adelante.-
Richard parecía estar pasándola mal.
-Vengo a saber sobre "el asunto".-
-¿Qué asunto, Ralph?-
-Pues... ya sabes, hablar con Steve.-
-Oh... ya no estoy muy seguro...-
-¿Qué?-
-Yo... me puse a pensar las cosas... ¿de verdad crees que sería la mejor opción...?-
-¿Eh?, ¿de qué hablas?, es la mejor opción, no hay más.-
-Escucha, Ralph... tal vez parezca sencillo, pero es lo más complicado del mundo. Imagina, si confesarse a una mujer ya es difícil, solo pensar en decirle a un chico, que encima es mi mejor amigo, que me gusta, es imposible...-
-¿Por qué piensas así?, si tu te sinceras las cosas serán más fáciles.-
-No es así... en cualquiera de los casos posibles todo sería un fracaso. Si le digo lo que siento probablemente me rechaza, quedaré devastado, mi carrera como futbolista decaerá y perderé su amistad o cualquier relación que pudieramos tener, incluso como compañeros de equipo... y si llegara a aceptar mis sentimientos, la gente descubrirá lo que tenemos, la prensa nos comerá vivos, lo más posible es que manchemos nuestra imagen... pero lo peor sería que tendríamos que separarnos y eso será más doloroso aún. Es por eso que, siendo solo amigos, me quedaré a su lado por siempre... tan cerca... y tan lejos...-
-Richard... ¿por qué repentinamente cambiaste de opinión?, ayer estabas convencido de que decirle a Steve que lo quieres era la mejor opción.-
-Yo... solo recapacité...-
-...A final de cuentas... es tu decisión... y no me entrometeré más...-
-Sí... y por favor... jamás hables de esto con nadie, prométemelo...-
-Lo prometo...-

¿Qué nos está pasando? 《Captain Tsubasa》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora