3.1 Diferente

464 83 19
                                    

Su vida es muy distinta . Estar dedicado a tener lujos absolutos y gente comiendo de su mano se ha vuelto su estilo de vida. No lo desprecia a pesar de ser, en cierta medida, la antítesis de su temperamento el manipular a diestra y siniestra. Tiene más poder que cualquiera y se aprovecha de eso; una parte profunda de él lo siento así y la otra lo goza.

Ni siquiera debe preocuparse de que lo toquen. Aprendió a hacer ilusiones en sus mentes anhelantes de un mínimo toque. Mientras creen hacer de todo con su cuerpo, él va campante a otra habitación a descansar. Igualmente jamás lo hace solo: Yoongi lo acompaña cada noche que pasaría solitario de no tenerlo. El hombre duerme con velocidad y profundidad, es tierno.

El ciclo de uso suele acabar a los cuatro o cinco años; siete si deja muerto de impresión al monarca de turno que será su atolondrada marioneta. No lo malentiendan, no destruye reinos enteros por puro capricho. Si pasa, pasa; deja a un nuevo encargado o el sitio en plena guerra porque no piensa inmiscuirse. Algunas veces ayudaba porque va a ese sitio a hacerse concubino.

Fuese Rey o reina quien mandara. Las mujeres son más difíciles de manipular, pero al final del día ellas se vuelven cariñosas. Incluso maternales.

Actualmente tiene un problema y es que alguien del harem le compite en belleza. Son casos muy extraños; normalmente interrumpe sus objetivos, pero en esta ocasión no es así. Ese concubino no le interesa serlo e incluso se ve a escondidas con un caballero de alto rango. Posiblemente los maten a ambos si eso queda al descubierto. Podría hacerlo y quitárselo de en medio.

Alguien igual de encantador es una amenaza. Al menos eso es lo que su instinto más competitivo exige, no así su voluntad.

3.1 Diferente

— ¿No consideras que es peligroso lo que haces? —interroga jugando con un pequeño gato que llegó a la habitación que ambos comparten.

—Para nada.

—Engañas a un rey solo por un... Caballero. No te puede dar todo lo que-

—Jimin—Interrumpe. Aun ahora desconoce cómo fue capaz de descubrir su nombre—. Tengo toda mi vida aquí. No me quieren en realidad, solo soy... Un juguete que cuando deje de ser bonito tiraran a la basura. Si alguien me ama aun cuando me ha visto hecho un asco: Vale la pena morir por eso ¿No te parece? —el rubio de larga y sedosa cabellera con ojos azules sonríe enamoradizo, descuidadamente extendido en un diván.

— ¿Como sabes que te ama de verdad? Le pareces bello y quiere usarte igual que todos los demás. —Insinúa Jimin con recelo.

—Son tres años tentando una castración, destitución y posible envío a una arma. Incluso me ha pedido matrimonio—Jimin aprieta al gato—. Aun si no es eterno. Hay que disfrutar cuanto dure. Ni siquiera un amor pasajero debe desperdiciarse.

—Es una forma muy tonta de verlo, Amvlýs.

—Ninguna alegría dura para siempre. Al fin y al cabo, no sabrías distinguirla porque te falta la tristeza—canturrea—. ¿Me dirás que no has amado a alguien y sido correspondido?

—No. Solo me usan y yo a ellos. —Concluye Jimin dejando al animal a un lado.

—Mentir y ocultar es malo ¿Sabes?

— ¿Ah?

—Lo siento—ríe—. El futuro no tan cercano queda fuera de la pregunta que hice. Error de cálculo. —Alzó una ceja. Aquello fue muy... Extraño

Aunque ese hombre siempre ha sido bastante extraño.

Pasan unas cuantas semanas tras esa conversación y todo seguía su rumbo. Alguna que otra vez lo ayudó y defiende con el tema del amante. Prohibido para concubinos. Solo se debe servir al rey. Apenas dos años ocho meses cuando se decide a irse. No fue porque el rey se haya dado cuenta de la adoración enfermiza... Sino porque su compañero fue descubierto de lo más infraganti. No diría que fueron descuidados, fue más una cuestión azarosa; el rey entró por el día a esa habitación aun cuando jamás lo hace por considerar que el sexo durante el día es "pecado" por ende cero visitas al harem. Quien sabe que lo condujo hasta ahí.

Youthful Beauty || KookMinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora