Anillos Del Tonalli: Vida Y Muerte(Finalizado).

29.-Convicción.

-Irina, por favor, no quieres hacer esto-dije al verme rodeado.

Las marionetas comenzaron a moverse hacia mi, pero con movimientos poco ortodoxos, con dificultades, como zombies.

-Esto no está bien, niña.

-¿Y tú qué sabes lo que está bien?-preguntó Irina al acercarse con a toda velocidad para golpearme.

Antes de poder reaccionar, fui golpeado por ella y ambos caímos al suelo, dónde me tomó de los brazos.

-¿De qué sirve el poder si no puedes obtener lo que quieres?, Siempre creí que la pobreza en la que nos dejó mi padre era la raíz de mis problemas, por ello terminé en una escuela donde todos me odiaban, por ello mi madre no podía curarse, por ello mi hermana y yo luciamos terribles sin comida ni ropa. Siempre me odié por no ser capaz de resolver las cosas, por no tener lo que hacía falta pero tú... Tú y mi estúpida hermana siempre aferraron a seguir adelante, incluso con mi vida conseguiste llegar tan lejos. ¡Te odio!.

-No... Siempre te has odiado... A tí misma.

-¡Cállate!. No tenía opción, incluso ahora no tengo opción, te robaste mi vida, ¿Qué se supone que haga ahora?. Irina ahora es dueña de una empresa pero John está muerto, ¿Entiendes eso?.

-Te equivocas, yo recuperé mi vida mientras que tú siempre estuviste muerta, pero siempre puedes cambiar eso.

-Mientes, hay cosas que no puedes cambiar, ¿Crees que tú historia es una gran historia?, ¿Qué debería tomar tu ejemplo?, Naciste con una habilidad que te destinó desde el principio a tomar el mundo por tus propias manos mientras que yo no nunca tuve nada especial.

-Tal vez sea cierto, pero ¿Y qué?, No único que siempre te detuvo fue el odio que te tienes, te hiciste creer que no merecías nada, por eso nunca fuiste por nada, por eso siempre estuviste muerta en vida.

El rostro de Irina cambió radicalmente, sus ojos se llenaron de vida a la par que comenzó a llorar.

-No se que hacer...No quiero ser una marioneta.

-Entonces ayudame.

-¿Yo?, ¿Cómo?.

-Hay alguien que está tras de nuestro poder y algo me dice, que guarda la clave para resolver esto de una vez por todas. Si funciona, tal vez pueda devolverte tu vida de alguna forma.

Una vez que hablamos, Irina y yo nos dirigimos de nuevo a la empresa con el carro de Amanda. Sin embargo, a medio camino en una parte solitaria y boscosa de la carretera, fuimos interceptados por una camioneta blindada del ejército.

-Bajen del auto-dijo un militar apuntandonos con su arma en cuanto detuvimos el auto.

De un momento a otro, nos encontrábamos frente a un grupo de cinco militares quienes nos apuntaban.

-Vaya, vaya, vaya. ¿Creyeron que me tomarían por sorpresa?.

-Esa voz...

Aquella mujer misteriosa volvió a aparecer.

-Se olvidan de que yo conozco mejor sus anillos que ustedes. No importa a dónde vayan, yo siempre lo sabré-añadió dejando ver el brillo en su mano.

-¿Qué es lo que quieres?, ¿Por qué llegar tan lejos por estos anillos?-pregunté.

-¡Porque me pertenecen!. Yo era un caballero español que terminó convertido en su madam por culpa de esos anillos cuando conquistamos las nuevas tierras. Desde entonces dedicamos nuestras vidas a desvelar sus secretos y créanme, ustedes que no saben nada no los merecen.