23. How Do You Do It?

191 17 3
                                    

El tiempo había transcurrido como el agua que bajaba para estrellarse entre las rocas tan estrepitosamente ocurrieron muchas cosas en la vida de todos nuestros personajes.

El 9 de febrero de 1961 The Beatles se habían presentado en el cavern club sadie Madison sandler donde estoy y fueron a verlos sin que ellos supieran que estaban ahí.

Pero eso no pasaría así Paul John y George las vieron asomarse tras bambalinas y en la presentación de mediodía sadie sintió la mirada de John Sabiendo lo mucho que lo había dañado no sabía qué hacer de repente la respiración se le cortó y le pidió a su amiga que se fueran de Aquel lugar John muy decepcionado quería simplemente decirle a su amada cuánto la extraña y cuánto ha estado esperando para volver a ver tu rostro una vez más para poder tocar sus manos sus labios pero no pasó así.

Después de aquella presentación Sadie supo que nunca fue buena idea ir a Aquel lugar pero también tenía que visitar a su tía quería verla platicar con ella porque la extrañaba mucho.

Así que Madison y se y se dirigieron a la casa de su tía Cheryl en donde le recibió con euforia.

-¡mis princesas! Amores míos, ¿Cómo han estado?

- muy bien tía, y usted ¿cómo ha estado? la he extrañado demasiado.

Y se pusieron a charlar un largo rato sin saber que el tiempo seguía pasando sin saber que una pequeña gigante tormenta se avecinaba a su casa.

Un par de horas después, tocaron la puerta y Sadie despreocupadamente, se levantó y se ofreció para abrir la puerta y recibir a la persona que se encontraba del otro lado. Nunca se imaginó que jamás debió de haber abierto aquella puerta.

***

Suspiré con mucha intensidad para que después el aire no pudiera pasar por mis pulmones. Mis sentidos dejaron de responder y comencé a sudar frío, sentí que me desvanecía. No podía creerlo. Lo tenía en frente mío y mi cuerpo simplemente había dejado de responder.

-Sadie... -Me dijo con una sorpresa y una ternura que no podía soportar.- No... puedo creerlo. Estás aquí.

-John... -le respondí casi sin poder respirar. Sentí entonces una fuerte presión en el pecho, como si estuvieran estrujando mis pulmones.

-Sadie, yo... no supe qué ocurrió, yo... intenté buscarte pero no aparecías por ningún lado. Tu tía Cherryl me dijo que te habías ido y ... fui a buscarte pero nunca pude encontrarte.

-Yo... he estado muy concentrada en la escuela. -Intenté comportarme lo más tranquila que pude.

-No sabes lo mucho que te he extrañado.

-...¡¿Quién es, Sadie?! -Gritó mi tía.

-Es John... -Le respondí-

-Hazlo Pasar -Me indicó. Y comencé a sentir que mis piernas comenzaban a fallarme y me sostuve de la puerta.

-¡No se preocupe señora! Sólo vine a saludar. Ya me voy.

Entonces, mi tía corrió a la puerta para ver qué ocurría con John.

-¿Cómo crees, Johnny? Pasa.

-¡Muchas gracias! pero sólo quisiera que me prestara a su hermosa sobrina unos minutos.

-¡Claro! Los dejó solos. Pueden salir si quieren.

-Gracias señora -entonces me rodeó con su brazo y me llevó afuera. No pude reaccionar por el shock en el que me encontraba.

Cuando cerró la puerta, caminó unos metros y se colocó frente a mí.

-Lo siento... -me disculpé con él- No puedo, no puedo seguir aquí. No debí de haberme quedado tanto tiempo, en este segundo me voy lamento la incomodidad que seguro te hice pasar. -al terminar, me di media vuelta para entrar de nuevo a la casa e irme lo más pronto posible de aquel lugar en el que no podía dejar de ser perseguida por los fantasmas de mi aparente pasado que regresaba como presente.

Pero ese desgraciado... me tomó del brazo y me regresó, quedando frente a frente.

-No te vayas, Sadie. Quédate conmigo. Te perdono, perdono lo que me hiciste porque yo siempre te he hecho daño, porque merecía lo que me hiciste... te perdono porque te amo. Sí, te amo.

Hubo un largo silencio mío, pues no sabía qué decir. Me había estado torturando todo el año, sus labios, su sonrisa, Cynthia... No pude soportar ver aquella mirada, aquellos ojos que lo único que me decían era que había destrozado su corazón. Y al verlo, el mío se hacía añicos.

-¿Por qué me haces esto? ¿Por qué no puedes simplemente dejar lo que sucedió en el pasado?

-Porque te amo.

-John... no puedo, no puedo hacerle eso a Cynthia, no puedo. Yo creo que deberías cuidar de ella. Yo no puedo ofrecerte nada de lo que Cynthia está dispuesta a dar, ella te ama demasiado John.

Lo miré, le di un beso en la mejilla y lo dejé en la puerta mientras me alejaba de la casa, para ir a algún lugar a pensar qué era lo que me estaba sucediendo.

-¿A dónde vas? -Me preguntó mientras me alejaba.

-Entra y dile a Maddison que la esperaré en el hotel. Que tengo mucho sueño. -Le dije y me alejé poco a poco.

Lo amaba de verdad pero sentía que si algo salía mal entre los dos, acabaría con nosotros, tanto como amigos como en nuestro interior. 

«The Quarry Girl»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora