Milagro Navideño de 1976

Capitulo 31

Milagro Navideño de 1976
Capitulo 31

HABITACION 206 DEL HOTEL GRAN VIA, POR LA TARDE

MARCELINO: Así no padre! Las está poniendo mal! Es como el dominó. Una ficha tira a la siguiente hasta que caigan todas.
PELAYO: Marcelino hijo quieres volverme loco? Hemos movido las dichosas maletas mil veces ya!
Amelia abrió la puerta de su habitación.
MARCELINO: Aja!!! Lo ve como no están mal padre! Debían haberse caído al abrir la puerta y mírelas?
Amelia entró a la habitación seguida de Luisita y Mateo.
LUISITA: Papa todavía estáis así! Que no nos va a dar tiempo!
MARCELINO: La culpa es de tu abuelo!
MATEO: Bueno haya paz! Luisita ayuda a Amelia con su maleta que nosotros nos encargamos del resto.
Amelia se había sentado en la cama. Luisita se acercó y se agachó frente a ella cogiéndola de la mano.
LUISITA: Amelia? Estas bien?
Amelia negó con la cabeza con los ojos llenos de lágrimas.
AMELIA: No… Tengo miedo Luisita… No puedo quitarme de la cabeza las imágenes de comisaría y del psiquiátrico.
LUISITA: Amelia mírame! Cuando conocí a tu madre le prometí que cuidaría de ti y pienso seguir cumpliendo esa promesa. La familia entera te apoya y no vamos a dejar que te pase nada. Además, debemos hablar de lo que nos ha dicho Sara cuando termine todo esto. (Luisita le suplicó con la mirada).
AMELIA: Pero y Mateo?
LUISITA: Que pasa con él?
MATEO: He oído mi nombre en boca de una bella dama?
Las chicas miraron a Mateo y Marce le dio un manotazo en la nuca.
MARCELINO: Olvídalo romeo que no tienes na que hacer, tu céntrate en colocar las maletas y en tu tarea.
Pelayo miró el reloj y habló para todos.
PELAYO: Repasemos el plan. Marcelino y yo estaremos con el fiscal. Mateo tu te encargaras de llamar a Valverde haciéndote pasar por un flecha para decirle que el plan a salido según lo acordado. Amelia cariño tu esperaras aquí pacientemente y charrita tu te quedaras aquí con Amelia pero escóndete en el baño antes de que entren. Todo claro?
TODOS: Clarísimo.
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CASA DE LA FAMILIA GOMEZ-SANABRIA, 19h30min

COMISARIO PASAMAR: Atención. 5 agentes escondidos en el Asturiano, 2 en el portal de la esquina, 2 agentes infiltrados en el hotel y el resto preparados en el Kings. (miró a Manuela) Señora usted quédese aquí y no salga bajo ningún concepto. (miró a Manolin) Chaval no te hagas el héroe, estamos? Perfecto, todos a sus puestos!
La casa se vació dejando solos a madre e hijo que vieron desaparecer a los agentes desde el balcón.
RING, RING (sonó el teléfono)
Manolita fue a descolgarlo.
MANOLITA (por teléfono): Diga?
GUILLERMO: Manolita soy Guillermo, sólo quería decirte que estoy en casa de Julia por si pasa cualquier cosa, vale?
MANOLITA (por teléfono): Espero que no haga falta pero gracias.
Manolita colgó, se acercó a su hijo y lo agarró por las mejillas.
MANOLITA: Cariño quiero que sepas que estamos muy orgullosos de ti y queremos seguir estándolo, me oyes, haz caso al comisario y todo saldrá bien.
Se abrazaron y Manolin dejó a oscuras a su madre antes de salir por la puerta.
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EXTERIOR DEL HOTEL GRAN VIA, 19h45min

Valverde, 4 policías de uniforme y 4 flechas estaban en la acera de enfrente del hotel esperando recibir las ordenes del primero.
VALVERDE: Vamos a ver Flechas, vosotros subiréis a la habitación 206 con los cocteles molotov y saldréis corriendo por la escalera de servicio y llamadme inmediatamente al numero que os he dado antes. Venga marchaos!
Los chicos se fueron al callejón a esperar que fueran las 20h.
VALVERDE: Agentes ustedes esperaran aquí. Si a las 20h15min ven que no ha pasado nada suban a detener a la invertida.
Los agentes asintieron con la cabeza pegando la palma de su mano con la porra.
VALVERDE: Yo me marcho que tengo un asunto personal que atender.

EN DISTINTOS LUGARES DE MADRID SE PRONUNCIARON A LA VEZ LAS MISMAS PALABRAS A LAS 19h55min “COMISARIO VALVERDE HA LLEGADO TU HORA, NO SE JUEGA CON LA FAMILIA GOMEZ-SANABRIA”
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EXTERIOR DEL HOTEL GRAN VIA, 20h

FLECHA Nº1: Es la hora! VAMOS!
Los cuatro Flechas entraron al hotel yendo directos al ascensor sin darse cuenta de que Marcelino y Pelayo estabas sentados en una mesa vigilando. El ascensor se cerro y Marcelino corrió a recepción cogiendo el teléfono y marcando el numero de la habitación 201.
MARCELINO (por teléfono): Señor fiscal están subiendo.
Los Flechas estaban inquietos dentro del ascensor, salieron corriendo con las botellas en la mano y  gritando “por españa!!!”.
POLICIA: Ibais a algún lado chico? Arrestadlos!!!
Al salir se encontraron con los policías que los arrestaron fácilmente debido a su superioridad numérica. Mateo intentó sacarles el número de teléfono al que debía llamar pero no les saco ni una sola palabra. Se acerco al teléfono pensando
MATEO: Pensemos no puede ser un teléfono privado no? Lo tengo!
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HABITACION 206 DEL HOTEL GRAN VIA, 20h2min

La habitación estaba llena de maletas rojas colocadas estratégicamente por lo que Amelia no tenia más que el espacio al lado de la cama para moverse. Luisita estaba dentro del baño con la oreja pegada a la puerta. Las dos se alarmaron al oír el grito de los Flechas. Inmediatamente después Luisita empezó a oír que Amelia respiraba con dificultad y con un tono de voz lo suficientemente alto para que la oyese le dijo:
LUISITA [Pensamiento Interno]: Maldita sea! Le está dando un ataque de ansiedad!
LUISITA: Amelia, respira! No puedes dejar que el miedo invada tu cuerpo. Escucha mi voz.
Amelia estaba sentada contra la pared de la habitación sin poder controlar la respiración mientras revivía los recuerdos.
AMELIA [Recuerdos]: “Te gusta eh? Tu no eres lesbiana, lo que pasa es que no has tenido el placer de estar con alguien como yo (el policía manoseaba a Amelia mientras restregaba su paquete por su cara)” “Tomas: Doctor fríale el cerebro si es necesario, ninguna hija mía será…” “Suba el voltaje enfermera, la reconoce? (Amelia sonreía al ver la pulsera de Luisita; AAAAhhhhhhhhhh (la electrocutaban)
LUISITA: Amelia escúchame por favor. Piensa en mi y en nuestra vida juntas despues de esto. Amelia? Amor mío?
Luisita recordó todas las veces que la calmo después de salir del psquiátrico, sabía que hacer para ayudarla por lo que abrió la puerta encontrado una traumatizadisima Amelia sentada contra la pared intentando respirar con la mano en el pecho y balanceándose para adelante y atrás. Luisita corrió como pudo esquivando las maletas para llegar a Amelia. La agarró de las manos intentando no llorar.
LUISITA: Amelia! Amor mío mírame! Mírame y concéntrate en mi voz!
Luisita levantó la cabeza de Amelia obligándola a mirarle a los ojos.
LUISITA: Así, así cariño… Concéntrate en mi. Mírame mi amor.
Amelia consiguió enfocar sus ojos en los de Luisita.
LUISITA: Cariño sabes que? Que te amo, me oyes? Sigo enamorada de ti! Estos dos meses han sido un infierno. No he parado de pensar en ti ni un día, ni una hora, ni un segundo. Sabes? Me imaginaba como sería nuestra vida en unos años. Yo era una escritora de éxito mientras que tu triunfabas dirigiendo tu propio espectáculo porque tu hermosa barriga de embarazada no te permitía ser la protagonista.
Amelia poco a poco empezaba a respirar mejor escuchando a Luisita.
LUISITA: Amelia? Estas mejor?
Amelia asintió como pudo y Luisita la beso en la mano.
AMELIA: Estoy bien. Estoy bien Luisita.
LUISITA: Seguro?
AMELIA: Si cariño, si. Anda ayúdame a ponerme de pie.
Luisita ayudo a Amelia a ponerse de pie. La tenia agarrada de una mano y de la cintura guiándola a la cama cuando alguien abrió la puerta de una patada.

Fin del Capítulo 31