Aparto la mirada de la pantalla de mi ordenador un momento y dejo escapar un pequeño suspiro. Tengo alrededor de dos horas tratando de escribir un artículo para mi sección de cultura en la revista y por más que intento e intento mi cerebro parece estar muerto el día de hoy.
O sólo tal vez no puede dejar de pensar en Howard Vincent.
Pero no. No de la manera romántica ni nada que se le parezca. Es más bien en sus palabras y en su comportamiento. Dejo escapar un pequeño suspiro diciéndome a mí misma que estoy siendo muy paranoica y vuelvo a mirar la hoja digital en blanco al tiempo que el sonido de mi celular llena el aire.
Lo tomo lentamente y mi entrecejo se frunce encontrando un número desconocido en la pantalla. ¡No seas paranoica, Leire! Me digo mentalmente antes de aceptar la llamada.
-¿Diga?-cuestiono.
-¿Leire?
-¿Si?-niego un poco dándome cuenta que esto está siendo demasiado patético.-¿Quién llama?-pregunto aferrando más el celular en mi oído.
-Soy yo, Vincent.-anuncia.
-¿Qué? ¿Cómo conseguiste mi número telefónico?-replico de inmediato.
Lo escucho soltar una pequeña risita y mi paciencia comienza a agotarse.-Te dije que mi hermana era muy fan de Zabdiel, ella me dijo que trabajabas para la revista Miami Sees-me explica.-Fue demasiado fácil conseguir el número de la revista y después el tuyo...-niego de nueva cuenta haciendo un recordatorio mental para Felipe. El editor de la revista, mi asistente y la persona encargada de acosar a mi novio mientras narra los partidos de americano.
-De acuerdo, eso son bastante psicópata.-le digo y él se vuelve a reír.
-El otro día cuando nos encontramos en el centro comercial fui demasiado idiota y no te lo pedí, así que tuve que recurrir a otras medidas.-expone como si su excusa fuese lo suficientemente valida.-En todo caso, llamaba para recordarte que tenemos una cena pendiente...-agrega.
-Howard...sobre eso, no creo que sea posible...
-Sí, ya sé que dijiste que no querías que las cosas se malinterpretaran de ningún modo pero recuerda que te dije que podías traer a Zabdiel...-me recuerda.
-No lo sé, yo no puedo controlar los tiempos de Zabdiel ¿lo sabes, verdad? No sé si él tiene planes ya o algo que se le parezca...-explico tratando de que mi excusa para nada convincente lo convenza.
-La cena podría ser pasado mañana. Háblalo con él y después me llamas a mi número telefónico para confirmar y ya. Es todo lo que tienes que hacer, Leire. No pierdes nada pero en cambio vas a obtener una velada maravillosa y seguramente te divertirás mucho...-cierro mis ojos un momento y niego lentamente.
-De acuerdo, lo hablaré con él y después te confirmo.-anuncio finalmente y lo escucho reír en voz baja del otro lado de la línea telefónica.-Y si no te molesta...tengo que dejarte porque en serio tengo muchas cosas que hacer...
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DIEZ RAZONES PARA ESTAR A TU LADO(DRPNA #2)|Zabdiel De Jesús (COMPLETA).
FanfictionLIBRO UNO; DIEZ RAZONES PARA NO AMARTE. LIBRO DOS; DIEZ RAZONES PARA ESTAR A TU LADO.