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Daniel.

Habían pasado dos días desde que Valentin se me había confesado, dos días en los que lo pase acostado en mi cama, pensando demasiado y también, llorando.

Lloraba por todo lo que me estaba pasando, estaba solo en mi casa, mi mamá en el hospital, desde hace un tiempo me habían dicho que eran pocos los meses que le quedaban. Tenía cáncer de pulmón, todo estaba yendo como el culo y ya nada le podían hacer, no había forma de curarla.

Lloraba por que mi familia era una mierda, al pelotudo de mi hermano no lo podía ver ni en figurita, y ni hablar de mi "papá" que si a ese lo llegaba a cruzar, lo mataba.

Lloraba por Valen, por no sentir lo mismo, por hacerlo sufrir y por ser un amigo de mierda.

¿No sentia lo mismo? En estos dos días me di cuenta que esa frase, no era tan real. Obviamente algo por él sentía, si no, nunca hubieran existido todos esos besos.
Sentía algo, si. Pero era un sentimiento que aún no podía nombrar, ni aceptar.

Mi celular sonaba, alguien me estaba llamando, no quería hablar con nadie, pero el ruidito seguía y cuando salí de debajo de las sábanas observe el nombre del contacto, era mi hermano.

-¿Qué paso? -

-Vení al hospital -

Y sin más, cortó la llamada.

Sentí el corazón detenerse por un momento y volver a palpitar muy fuerte. Aunque no quisiera, algo se venía a mi mente y ya se había formado un nudo en mi garganta.

Salí de mi casa muy rápido, dirigiéndome al hospital, la lluvia me había mojado por completo, pero no me importó.

Entré corriendo y subí las escaleras porque el ascensor estaba tardando demasiado. Al llegar a la habitación de mi mamá, sentí agua en mis mejillas y no era producto de la lluvia, eran mis lágrimas. Nadie me había dicho nada, pero yo lo sabía, yo lo sentía.

Me quedé mirando el piso blanco del lugar, en shock, las lágrimas caían cada vez más fuerte y solo escuchaba mis sollozos. Alguien salió del cuarto, solo lo miré y me hice para atrás, chocando con la pared y bajando lentamente hasta sentarme, suspiré negando, no podía ser verdad.

-Ya está, Daniel. Se fue. -pronunció y me dieron ganas de cagarlo a piñas, lo odiaba tanto.

Me abracé a mi mismo, ahora a parte de llorar, gritaba. Me habia quedado solo, no tenia a nadie, solo a él.
El doctor que no sé de donde había salido me trataba de calmar, nadie iba a poder. Nadie iba a poder sacarme esta tristeza, nadie más que Valentin.

Me levante rápido, alejándome de los dos hombres y salí del hospital, corriendo hacía el único lugar donde sabía que podía ir, donde estaba la única persona en el mundo que me daría ganas de vivir.

Valentin.

Sentí un golpe leve en la puerta y mire a Julieta, para ver si había escuchando lo mismo.

-¿Esperabas a alguien? -me preguntó, negué con la cabeza y puse pausa a la película.

Ahora si, se escuchó un golpe más fuerte y abrí un poquito la puerta viendo al enano de espaldas, todo empapado.

-Dani -lo llamé haciendo que me mire, y sus ojos conectaron con los mios, podía notar su carita triste y sus ojitos rojos, que suponía era porque había estado llorando.

-P-perdón -susurró cuando miró hacia atrás, donde estaba Juli. Se dio vuelta como queriendo irse.

Tomé su muñeca y lo hice pasar, su pelo estaba todo mojado, al igual que su ropa y su mano estaba fría.

-¿Qué paso? -pregunté y Daniel agachó la cabeza.

-Perdón, no tendría que haber venido -negó varias veces y yo no sabía si lo decía por que Julieta estaba acá o por otra razón.

-¿Por qué? No interrumpiste nada Dani -le aclaré y el miró a Cazzu que estaba re en otra, mirando su celular. -Vamos arriba, te presto ropa -dije y el asintió.

Julieta era amiga mía de hace muchos años, era como mi hermana y era la primera persona a la que le había contado lo que me pasaba con Daniel, justamente para eso la había invitado hoy a casa y tambien me dio unos consejos, para afrontar todo esto que me pasaba.

-Cazzu voy arriba con Daniel, si queres seguí mirando la peli -hablé llamando su atención, aunque solo era para que sepa que se trataba de él.

-De una -me dijo mirándome pícara, menos disimulada era la pendeja. -Hola Dani, el wos me habló un poquito sobre vos -

Que hija de puta, sabía que algo le iba a decir. Él la saludo con un beso, parecía que querían seguir hablando así que antes de pasar más vergüenza me lo lleve al cuarto.

-Es mi mejor amiga -comenté mientras buscaba una remera roja que siempre le prestaba, pero no estaba, así que le di una negra.

Se sacó la ropa en silencio, sin hacer contacto visual conmigo, parecía triste. Me acerqué a él cuando se sacó la remera que tenia puesta, era la mía.

-Me olvide de sacarmela el día que me fui, te la iba a devolver -

-No importa Dani -le dije y cuando se puso la remera negra, lo abracé, parecía necesitarlo.

Al instante, quebró en llanto, no sabía que le pasaba. Lo apreté fuerte contra mi y le susurré que todo estaba bien.

-No... Nada está bien -murmuró separándose de mi para mirarme a los ojos, pude ver que sus ojitos estaban rojos y me partía el corazón verlo tan mal. Tomé su cara con ambas manos y besé su frente.

-Yo estoy para lo que necesites, Daniel. ¿Lo sabes, no? -

-Sos lo único que me queda, Valen... -dijo apoyando su cabeza en mi pecho. -Mi mamá ya no está, se murió y yo... yo te tengo solo a vos-

Sentí una punzada en mi pecho, no podía ser posible. Mis ojos se aguaron y un par de lágrimas cayeron, lo abracé y deje un beso en su mejilla, yo podría ayudarlo a que sea feliz otra vez, lo iba a cuidar y proteger de todo.










acá ta el capitulo DOU no pueden estar separados estos niños

gracias posta x sus comentarios, m la sube bandaa💓 lskieromuchoo

Feelings - wosani.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora