You're My World [YoonMin]

You're My World 🏥

Narra YoonGi.

Ocho meses de gestación.
Pancita; rellenita y en perfectas condiciones.
Bebé; en excelentes condiciones, más inquieto y dulce que nunca.
JiMinnie; más dulce y precioso que ayer.

Cada vez se acercaba el momento.
Recién hace dos días ingresamos al octavo mes de gestación, la doctora nos dijo que nuestro bebé estaba en excelentes condiciones.

La fecha de "parto" iba a ser para principios de febrero o eso se estimaba.

— descansa mi amor. — susurré cuando ya ví a mi pequeño angel dormido.

Lo arropé con una cobija, luego de dejarle un beso en su mejilla, apagué las luces.
Me acomodé con cuidado de no despertarlo. Una vez dentro de la cama, solo me cubrí con la cobija y me dormí.
Cada vez estamos más cerca de ver a nuestro bebé nuestro hijo...

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Narrador Omnisciente.

El rubio se movió ligeramente sobre la cama descubriendo su abdome de las cobijas. Gruñó y volvió a moverse, de a poco abrió sus ojitos asustado. Gimió del dolor que sentía en su espalda baja y abdomen.

— ah~ Yoon...Gi...— su amado solo dormía a su lado sin darse cuenta de que JiMin estaba con mucho dolor. — a-ah~ a-ayuda...— rogó sintiendo sus mejillas humedas por las lágrimas, sollozó y volvió a moverse, como pudo, suavemente golpeó a YoonGi con su pié.

El pelinegro despertó muy lentamente.
JiMin chilló irritado ya que el otro era demasiado lento.

— ¡ya despierta a-ah!~ — dijo casi gritando JiMin mientras nuevamente se retorcia del dolor.

— amor, ¿qué pasa, tienes antojitos?— murmuró mientras tallaba sus ojos, JiMin gimió adolorido nuevamente.— A-Amor, llamaré... Llamaré a la ambulancia.

YoonGi inmediatamente se puso de pié y a buscar corriendo su teléfono en la sala.

— a-ah~ cielos, b-bebé me h-haces doler. — habló JiMin como si su pequeño lo escuchara.

Eran contracciones, bastante leves, JiMin a penas si podía manejarlo.

— ya vienen aquí, a-alistaré... Déjame ver... — dijo YoonGi cuando volvió a la habitación, se acercó al menor para mirar a JiMin, aún no había rompido la fuente, la cama estaba seca aún. — amor, resiste. — se inclinó y dejó tiernos besos en el rostro sudado del menor el cual lloraba aún por el dolor. — prepararé el bo-bolso. — corrió para sacar del clóset un bolso para las cosas de bebés.

Rápidamente tomó unas prendas para JiMin, unos zapatos y los metió dentro, buscó un cajón del mismo closet la ropa para bebé que habían comprado y guardado, solo agarró un pequeño enterito, los típicos que usaban los bebés, metió la ropita y unas cobijas especiales para cubrir al bebé.

— ¡YoonGi... A-Ah, me hi-hiciste ésto a mí ya llévame al hospital! — habló le menor bajo los efectos leves de las contracciones.

— vamos amor, ya van a llegar los paramédicos. — se colgó el bolso en un hombro, fue hacia el menor.

Primero, ayudó a que el rubio pudiera sentarse en la cama, el verdadero reto sería ir a la entrada de casa.

— apoyate en mí Minnie, estarás bien.

— ¡a-ah!~~ M-Min, d-duele...

— ya ca-... ¡A-... MINNIE! — se quejó cuando menor apretó su brazo. — eso dolió. — volvió a quejarse, cuando vio el rostro del menor, sus ojitos rojizos por el llanto ignoró que JiMin le haga sentir dolor, sabía que su precioso amado la estaba pasando peor.

Con lentitud, caminaron a la entrada de la casa, salieron, la ambulancia no llegaba más. Pasaron varios minutos y nunca aparecía.

JiMin estaba quejándose mucho.
En un momen momento escuchó algo cayendo al suelo, miró a su pequeño novio viendo como sus pantalones de dormir comenzaban a mojarse.

YoonGi no supo que hacer, en un acto de desesperación, decidió llevar al menor en la bicicleta.
Con dificultad, JiMin subió en la bicicleta, YoonGi lo agarraba y lo iba llevando sin pedalear. El iba caminando con cuidado mientras JiMin iba montado en la bicicleta chillando del dolor.

— ¿qué son esos gritos? — una mujer salió con todo y pijama preocupada siendo seguida por su marido, vieron como pasaban el par de jóvenes.

— resiste JiMin, lo lograremos.

— a-ah~ por favor ya no m-más.

— santos cielos, cariño, mira. — habló la mujer sorprendida, inmediatamente el marido de la mujer reaccionó, fue hacia el par de jóvenes seguía de la mujer. — oh, pobre pequeño...

— los llevaremos al hospital, esperen aquí con mi esposa, traeré el auto.

El hombre se fue corriendo.
En cuestión de minutos, el auto de aquél hombre se estacionó frente a los tres, la mujer ayudó a que JiMin bajara de la bicicleta y luego a entrar en el auto.
YoonGi no le importó nada en absoluto dejar la bicicleta ahí, la salud de su pequeño era más importante en éstos momentos.

— muchas gracias.

Sin más que decir, emprendieron marcha rumbo al hospital.