°•007•°

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Y me iré.
Me iré esta noche...

—¡Cierra!— Scott estaba desesperado.

—¿Te parece que tengo una llave?

—No. Sí.— Hablamos Scott y yo a la vez.

—Sacaste una de la parte trasera del Jeep, pero se te cayó al correr.— Señalé fuera del edificio y la boca de Stiles formó una "O". Los empujé para poder ir por la llave.

—¡Megan, no!

El lugar parecía despejado, fui lo más  rápido que pude hasta la llave mientras escuchaba a los chicos gritar que volviera. El Alfa salió de detrás del Jeep, sí, no había duda de que esos ojos rojos eran los que había visto con Lydia. Corrí de nuevo dentro justo cuando él comenzaba a correr hacia mí. Coloqué la llave en la puerta lo más rápido que pude.

—¿En qué estabas pensando? Eso fue lo más estúpido que has hecho.— Me reprochó Stiles.

—Es lo que nos dio más minutos de vida.

—Eso no quita que fue estúpido.

Dejé el tema ahí y al no escuchar nada nos asomamos, todo parecía haber vuelto a la tranquilidad.

—¿Dónde está? ¿A dónde fue?— Preguntaba Scott mientras Stiles alumbraba.

Nos alejamos de la puerta en busca de otro escondite.

—No resistirá.

—Probablemente no.

—Es tu jefe, ¿no hay algo que puedas hacer?

—No es Deaton.

—Ay, por favor. Desaparece y diez segundos después aparece eso y arroja a Derek. ¿No es suficiente?

—No es él.

—Mató a Derek.

—Derek no murió, no puede estar muerto.

—Salió sangre de su boca. Está muerto y seguimos nosotros.

—No. Cálmense y dejen de pelear o sino seguirán ustedes, pero no en las garras de esa bestia, sino en las mías.— Me acerqué a la ventana del aula.

—Nos vamos en el Jeep.

—Sí, sería genial, pero esta roto.—Señalé el auto preparándome para el grito de Stiles

—¡¿Qué?!— Stiles se acercó a la ventana para ver a su amado Jeep con el capó destruido.

—¿Qué diablos?— una ventana al lado de nosotros se rompió haciendo que nos agacháramos— Es mi batería.— Stiles se acercó al objeto que entró por la ventana.

Nos dirigimos a los vestidores para planear que hacer ya que era el lugar con menos ventanas. Primero tuvimos la idea de llamar al papá de Stiles, pero esta fue descartada cuando nos negamos a ponerlo en peligro, por lo que tomamos la última opción. Tomar el auto de Derek y su cadáver, esto último a petición de Scott.

—Espera.— Scott detuvo mi mano antes de que pudiera tomar el picaporte de la puerta.

—¿Qué?

—Creo que escuché algo.

—¿Cómo que "algo"?

Nos escondimos en los casilleros preparados para morir. El picaporte se bajó y alguien entró al lugar, los segundos pasaban lentos y pesados hasta que la puerta del casillero de Scott se abrió.

—¡Ay, malditos hijos de...!

Le tapamos la boca al conserje para que no siguiera insultándonos por el susto que le habíamos dado.

REMEMBER | Teen Wolf ① [EN EDICIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora