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"Nota de un pensante llamado Izuku.
Última.

No sabía si realmente colocar o no el "última" pues aunque la libreta se ha quedado sin hojas no es la única que ahora tengo, pero pienso sólo dibujar en la nueva, deseo practicar suficiente para poder detallar la belleza de este mundo. No todo está muerto.

Hay tantas cosas que me han pasado desde que la humanidad cambió y lo extraño se volvió normal. Es probable que ahora el 80% de la nueva probación tenga poderes, el resto estaría entre otros dos porcentajes distintos en los que algunos son humanos normales y otros tengan apariencia de sombra.

La esperanza de que se encuentre una cura pasó a ser una utopía en la que podamos convivir entre todos nosotros siendo lo que ahora somos. Tal vez en algún futuro cercano aquellos que pensamos eliminaremos a los que no y se crearán nuevas leyes tratando de buscar alguna seguridad, no dudo que pase o no eso.

Pero para ayudar en la convivencia quisiera poder decir lo siguiente y es que sin importar el cómo se ve el otro no puedes saber si es bueno o no, en el tiempo que pasé buscando la forma de sobrellevar la realidad y no morir en manos de personas que creían que era malo me encontré con quienes encontré el hogar que creí perdido.

Formé una familia, conseguí amigos que me apoyan y que tuvieron historias distintas que me hicieron comprender cosas que desconocía sobre lo que en un principio todos creímos que era nuestra salvación y se convirtió en la perdición para algunos.

Experimentar por el bien de los demás es algo que jamás cuestioné ni critiqué a mal, pero hacerlo por gustos propios y jugar a ser dios es algo que simplemente no tendrá perdón para muchos a quienes les hayan hecho daño para conseguirlo.

Espero que quienes encuentren mi libreta y puedan leer las cosas que con el tiempo fui anotando comprendan lo que trato de decir para crear la sociedad del futuro que tanto quisiera poder ver, pero sé que para eso faltan muchas generaciones y posiblemente avances que hemos perdido por está absurda evolución forzada.

Quisiera poder ver lo que será de mis pequeños cuando crezcan, lo que vendrá en veinte años más o en las nuevas generaciones. Poder ver todo lo que viene después es algo que deseo más que la reconstrucción de las almas que se perdieron, pero al igual que eso sé que ambas son cosas que no se pueden cumplir.

Aún así, tengo esperanzas. Jamás las perdí, y ahora que soy feliz es probable que muera pensando en que el mundo utópico se realizará con el tiempo. Quién sabe si estar infectado reduce o no mi tiempo de vida o si es que estoy vivo aún, la putrefacción aún no ha tocado mi cuerpo, pero es sólo cuestión de tiempo para que tenga que despedirme de todo esto.

A quien lo lea, gracias."

Una firma con un nombre debajo se encuentra al final de la hoja junto a un pequeño dibujo hecho con crayola azul de una pequeña sonriendo junto a dos adultos, uno de ellos lleva un bebé en brazos.

(...)

Un año, el primero que Eri cumplía junto al grupo de amigos de sus padres. Cantidad que con el paso del tiempo iba en aumento pues se habían unido tres chicas más al mes de haberse cambiado de casa.

Una de ellas había llegado sola, una humana que creyendo en que todos ahí eran como ella se acercó pidiendo alimento o agua. Una joven de corazón amable de nombre Yaoyorozu Momo quien no tardó en hacer amistad con la mayoría.

En los tiempos en que Izuku parecía sentirse extraño y comenzó a tener algunos problemas con recientes cambios en su don, llegó una chica quien fue guiada por Eri ya que le había caído bien a la menor.

Lovelipsis 【KatsuDeku】Donde viven las historias. Descúbrelo ahora