El señor Park se levantó del sofá de la sala y corrió directo hacia donde estaban los jóvenes para verificar si no se escaparon, pero estaban sentados en la cama, se despreocupó y cerró la puerta.
Felix y Minho se miraron, el mayor no pudo evitar sonreír y depositarle un suave beso en los labios, pero no duró demasiado porque escucharon algo en la ventana.
El pelinegro se acercó para ver quién era y no podía creer la escena enfrente de sus ojos.
– ¿Chan?– Vio al líder trepándose de una escalera improvisada, la cual era un tubo que no sabían de qué era– ¿Qué haces aquí?
– Primero, me alegra que estén bien– Se agarró más fuerte del borde de la ventana para no caer– Y segundo, sería bueno que digan "¡Oh, hyung, vino a salvarnos!
Recordó el plan que tenían, no lo estaban siguiendo a la perfección ya que Jeongin y Changbin no estaban abajo y Minho tampoco estaba para rescatar al australiano menor, sino que también debían salvarlo a él
– Váyanse, el señor Park los matará.
– ¿Irnos? ¿Es un chiste?– El ceño fruncido del mayor les dio un poco de risa, además de que hablaran como si estuviesen en una fiesta donde nadie iba a molestarlos, pero no, estaban todos a punto de morir.
El coreano le explicó su propio plan, el cual deberían seguir al pie de la letra. Iba a "seducir" a Felix y salir con él a una fiesta en donde estarían sus amigos y escaparían. Sonaba simple, pero no tenían mucha fe.
– Bien, cuídense mucho– Chan le explicaría eso a los demás chicos, por ahora, debían conseguir un lugar donde quedarse hasta que puedan trabajar y alquilar un departamento para los nueve.
Bajó de la escalera improvisada y se echaron a correr, ignorando los gritos del señor Park.
En poco tiempo iban a ser libres, sin monjas, sin castigos, sin secuestros, sin familias cínicas y asesinas.
Felix tomó la mano de su novio, inseguro de lo que podría pasar.
– ¿No es arriesgado?– Asintió– ¿Entonces...?
– Haré todo lo que pueda para que estés a salvo, mi bonito Lix– Le acarició una mejilla y lo besó tiernamente, era uno de esos besos que casi nunca recibía por parte de Minho ya que era muy bruto.
Se derretía de amor por aquel chico, no sabría qué haría sin él. Le hubiese gustado tener una familia de verdad para presentarles al amor de su vida, pero tenía a sus amigos y era más que suficiente.
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orphanage of the stray kids
FanfictionUn grupo de nueve chicos viven en un orfanato, donde las monjas son demasiado estrictas y no hay una pizca de diversión en ese lugar, está prohibido. Un día, llegan dos personas al lugar y deciden adoptar a Felix, quien es parte del grupo. Los demás...