Capítulo 8

2.3K 309 9
                                    

Holaaa, vengo regresando con dos capítulos de esta historia. Estoy feliz, porque algunas de mis historias llegaron al 1k de lecturas, así que pues he actualizado casi todas esta semana, y aquí vengo con ésta. Disfruten la lectura 😊😊😊😊

1/2




— ¿Qué pasa, chicos? — Namjoon abrió la puerta de golpe, y se adentró en el recibidor, con su típica sonrisa despreocupada. Detrás suyo, Jackson hizo aparición, cargando consigo otras tantas bolsas llenas de comestibles.

Jungkook, alejó su mano de las cercanías de Jimin y retrocedió casi de un salto, avergonzado.

Diablos, esperaba que los recién llegados no hubiesen advertido su atrevido acercamiento o notasen el rubor culpable que coloreó sus mejillas.

— ¡Oh, Jungkook está aquí también! — saludó Wang, ondeando una mano amistosamente.

— Hola — replicó tímido, sin mirarle a los ojos.

— Viene casi todos los días. ¿No tienes clases o algo así? — bromeó Kim, aunque Jeon podía hacerle la misma pregunta: Nam era una presencia constante en el lugar. ¿Cómo se las habría apañado para llegar a último año, con tan poca disposición de asistir a la Universidad?

— Supongo que está en plena etapa rebelde, o… buscando algo más. — agregó Jimin, todavía dándole la espalda.

— ¿Eh? ¿Busca… - ¿Qué significaría aquello? Jungkook no comprendió la referencia de su hyung. — ¿Huh?

— Olvídalo, no es nada. — puntualizó Park, antes de alejarse, uniéndose a la plática que sostenían los otros jóvenes, mientras Jungkook todavía nadaba en aguas confusas.

No conseguía entenderlo. Observó detenidamente, cada uno de sus gestos: Jimin se sentó junto al dúo, conversando acerca de cosas ligeras, pero... algo no estaba bien.

Esa desolación taciturna no le abandonó, a pesar de ver asomar a veces, en sus labios, un atisbo de sonrisa. Era como si cargase algún peso que parecía comprimirlo, robándole el aire aun cuando se esforzase en aparentar normalidad.

Igual que una pared a la que le sustraen uno a uno los ladrillos, y comienza a desmoronarse de a poco, aunque aun conserve cierta estabilidad.

Pero cada pérdida, dolía desgarradoramente.

Y nadie más daba señales de percibirlo.

«A pesar de su belleza, de su innegable atractivo, lo único que puedo reconocer al mirar sus ojos, es soledad» Jeon continuó escrutándolo a la distancia, por lo que duró aquella reunión. Solo aportaba algún que otro comentario, y sonreía incómodamente cuando era interpelado. No obstante, sus orbes, se mantuvieron fijos en el dueño del lugar. Reacios a perderse siquiera un segundo de tan la dolorosa visión.

No sintió el paso del tiempo, ni ese lapso en que la lluvia acompañó el atardecer.

Solo recaló en ello, cuando el destinatario de su atención, mencionó la hora, en clara indicación que era tiempo de abandonar su domicilio.

— Se está haciendo tarde ya. Jungkook, creo de deberías regresar a casa. — le aconsejó, y se puso de pie, señalando la entrada.

— Ah… si. No me había dado cuenta de lo tarde que es. — el chico comprobó su móvil. Las 9:00 pm, aparecieron en el lado inferior derecho de la pantalla.

Por suerte para él, su madre aún trabajaba, y no se expondría a otra regañina a causa de su descuido, pero, no quería tentar a la suerte.

Era momento justo para retirarse.

Under The Umbrella [PJM & JJK] ° 2019Donde viven las historias. Descúbrelo ahora