Amelia.
Vi que los chicos estaban preparando algún tipo de carne, ya que estaban cocinando algo, debieron de haber cazado algo, fui y todos estaban comiendo una especie de brochetas con hojas que ni sabía que existía
¿Qué es esto?.- Preguntó con cierto desagrado Nyke mientras parecía inspeccionar lo que estaba a punto de comerse.
-Es carne con una planta que encontré el día de ayer y descubrí que era comestible.- dijo Osmanthus tranquilo mientras le daba un mordisco a la carne con un pedazo de hoja.- No se preocupen, yo la probé ayer y se las di a varios de ustedes en forma de ensalada y no tuvieron ninguna reacción.
Me cuestionaba acerca de la comida con la que llevábamos alimentándonos por varios días, habíamos pasado desde comer pescado, a solo comer fruta y después comer carne y fruta otra vez, realmente quería que alguien vendiera comida deliciosa, quitando un lada la habilidad primaria de Osmanthus que era el crecimientos de plantas, prácticamente dependíamos de nuestra habilidades como cazadores, que casi siempre eran buenas, por lo que podíamos llenarnos el estómago por días, hasta volver a sentir la necesidad de comer.
Veía como platican todos entre ellos, estaban platicando Osmanthus con Ares y Nyke, por otro lado estaba platicando Hestia con Hawks mientras Sejmet se reía de algo que estaban diciendo, me sorprendía tener un grupo de siete personas contándome, pero sentía como alguien me observaba, desde días de haber salido de nuestra base costera, había tenido esa sensacion de que alguien me observase continuamente, pero no sabía quién.
-Iré por agua.- Le dije a los chicos mientras llevaba una gran jarra para poderle llevar a gua a los demás y dejarlo en el bote de reserva que había creado Ares con su habilidad.
Bajé por la colina de donde se encontraba la base, prácticamente estábamos en una meseta, ya que parecía ser que había erosión en el lugar y había dejado ese espacio prácticamente para dejar una base allí, había un manantial abajo de la colina, a donde me dirigí con la jarra.
Al llegar al manantial, llené la jarra y la dejé en el suelo, el manantial estaba como dividido, y decidí quitarme la ropa , tenía que darme un baño, lo necesitaba, había pasado al menos tres días sin ducharme, lo necesitaba, podía parecer que la mayoría se acostumbrara a oler mal, pero por higiene tenía que bañarme, y el problema que ya no podíamos hacerlo tan frecuente como cuando estábamos en la costa.
Me aseguré de apurarme, no quería que nadie me sorprendiera estando desnuda e indefensa dándome un baño por higiene, rápido salí del lugar e hice que el calor secara más rápido mis piel pera poderme poner la ropa con mayor rapidez, me sequé y comencé a ponerme la ropa que me cambiaría llegando a la base, ya después la lavaría, tomé la jarra y con la intención de ir cuesta arriba, volvía sentir esa sensación de que alguien me miraba
-Amelia.- Dijo una voz haciéndome voltear -. Era el hombre con el nombre de Vida.- Déjame ayudarte con eso.
Otra vez, ¿Qué hacía él aquí?, pero otra cosa más importante, era que yo no le había dicho mi nombre, ¿Cómo él sabía mi nombre?, él simplemente tomó la jarra y comenzó a llevarla cuesta arriba, pero me detuve, ¿cómo sería capaz de llegar así de la nada con otro sujeto, que parecía ser que al momento desaparecería sin dejar algún rastro atrás.
-Espera.- Le dije mientras lo agarraba del brazo antes de que siguiera subiendo y lo regresé al manantial.- No puedes ir allá arriba.
-¿Por qué no?.- preguntó inocentemente Vida mientras miraba el agarre, pero lo dejé rápidamente provocando que Vida se pusiese triste.
-Te irás.- Le dije mientras él miraba hacia el suelo.- Te irás sin decir una palabra y ellos se preguntaran quien eres y me expondrás a problemas que sencillamente puedo evitarme.
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Discípulos de la muerte
RandomUna joven, quien vivía en uno de los miles de universos que la tierra posee, es mandada a una Arena, en donde deberá luchar por su vida acompañada de sus habilidades que la salvarán de muchos obstáculos que enfrentará, una competencia reñida, cread...