Forzada a Comprar un Esclavo Vampiro

Capítulo 35

Corey y yo salimos de la habitación al pasillo, Jake estaba de pie, apoyado contra el barandal. Inmediatamente levantó la vista cuando salimos y luego miró nuestras manos entrelazadas, sus ojos se abrieron un poco, parpadeó y volvió a mirar a Corey. Jake se aclaró la garganta.

— Eh, hola — dijo y Corey puso los ojos en blanco.

— ¿Eso es lo mejor que puedes decir?

— No sabía qué decir — respondió Jake a la defensiva.

— No es la primera vez ¿Por qué estás aquí? No esperaba... quiero decir, pensé que, si alguien iba a venir a buscarme, sería Mikey — declaró y Jake sonrió levemente.

— Sí, él también quería venir... pero yo... pensé que sería mejor si viniera yo primero.

— Está bien, ¿por qué estás aquí? — cuestionó Corey.

— Bueno, primero pensé que estabas muerto y luego descubrir que te vas a... casar, quiero decir, es un poco impactante, estaba algo confundido — mencionó y Corey suspiró.

— Sí, supongo que tengo que dar algunas explicaciones — dijo Corey y Jake asintió con la cabeza.

— Bueno, primero voy a tomar café.

Corey, Jake y yo bajamos las escaleras hasta la cocina. Empecé a hacer el café, era como una rutina ahora, he tomado mucho café últimamente, antes estaba acostumbrada a beber bebidas energéticas, pero ahora bebo café.

Corey se sentó frente al mostrador y Jake se sentó enfrente de él, yo apoyé contra el mismo, mientras esperaba que se hiciera el café. Corey me miró y yo le sonreí, él sonrió y miró hacia abajo tímidamente.

— ¿Entonces te importaría decirme cómo es que te vas a casar? — habló Jake y Corey lo miró, todavía sonriendo levemente.

— Ella es el amor de mi vida — declaró y se encogió de hombros.

— ¿En serio? Nunca pensé que te oiría decir eso — dijo Jake sorprendido.

— ¿Qué se supone que quieres decir con eso?

— Oh vamos, ¿estás enamorado? — inquirió Jake y luego sacudió la cabeza — Nunca consideré que eso pudiera pasar, es difícil asimilarlo.

— Te entiendo — respondió y Jake comenzó a morderse las uñas.

— Entonces ... — Corey comenzó — todavía están todos...

— ¿Vivos? — preguntó Jake y él asintió — Sí.

— ¿Siguen estando en el mismo lugar? — preguntó Corey, Jake sacudió la cabeza y se mordió el labio inferior.

— Sí, habría parecido sospechoso si nos moviéramos después de que tu... — dijo y Corey asintió con la cabeza — Estoy seguro de que al resto de la familia realmente le gustaría que fueras a verlos.

— Eh, no sé ... — dijo Corey.

— ¿En serio no quieres ver a tu familia? — cuestionó y él se encogió de hombros — Bueno, yo creo que deberías ir, al menos necesitan conocer a tu futura esposa.

— Creo que es una buena idea — dije y Jake me sonrió.

— Cariño, realmente no creo que quieras conocerlos — declaró Corey y Jake soltó una carcajada.

— ¿Cariño? ¿Tienen apodos? — preguntó Jake con tono burlón y Corey le dirigió una mirada despreocupada.

Jake quitó su expresión y miró hacia otro lado. Corey me miró e hizo un gesto para que fuera, me dirigí hacia él, él me sentó sobre su regazo, envolviendo sus brazos alrededor de mí y yo recargué mi brazo sobre su hombro. Jake se movió torpemente.

— Sabes, creo que ya debería irme, podemos hablar en otro momento.

Escuché un sonido bastante vibrante y Jake sacó un delgado teléfono celular negro del bolsillo de su chaqueta.

— ¿Hola? — respondió en voz baja y hubo una pausa — No, no, no, puedes venir en otro momento.

Escuché la puerta de entrada y un momento después un chico entró a la cocina con un teléfono en la oreja. Él sonrió.

— Demasiado tarde — dijo, Jake suspiró y volvió a guardar el teléfono en el bolsillo.

— Mikey, te dije que esperaras hasta otro momento.

— Bueno, solo pensé que era justo si yo también lo veía — respondió.

— Mikey, guarda el teléfono — pidió Jake y luego suspiro.

— Oh, claro.

Lo guardó en el bolsillo de sus jeans. Mikey, supongo que ese era su nombre, nos miró a Corey y a mí y sonrió.

— ¿Qué pasa, Corey? No te he visto en mucho tiempo.

— Sí — dijo Corey con indiferencia.

— Y esta debe ser Arabelle — declaró Mikey, sonriéndome.

Corey envolvió sus brazos con mayor fuerza a mi alrededor.

— Soy Mikey, el hermano de Corey — se presentó a sí mismo y sonreí.

Mikey se acercó y se apoyó contra el mostrador junto a Corey.

— Entonces, ¿qué has estado haciendo además de pasar tiempo con tu hermosa novia? — le preguntó a Corey y él lo miró.

— Oh, no sé, ser un esclavo — replicó, sonrió alevosamente y Jake se aclaró la garganta.

— Um, Mikey, creo que deberíamos irnos — mencionó y él lo miró.

— ¿Ya?, no me iré hasta que Corey acepte venir con nosotros — aclaró, le sonrió a Corey y Jake lo miró fijamente.

— Mikey, no puedes hacer que venga con nosotros y obviamente él no quiere venir.

—Bueno, al menos nos debe eso.

— No te debo ni una mierda — dijo Corey, Mikey siguió sonriendo, Jake lo miró y luego volteó hacia otro lado.

— Dame una buena razón por la que no quieres venir a visitar a tu familia — exigió Mikey.

— Solo ... no quiero — declaró Corey y luego miró hacia abajo.

— Oh, ¿el gran Corey tiene miedo de enfrentar sus problemas?

Corey apretó la mandíbula y miró a Mikey con una mirada de muerte, Jake se puso de pie.

— Mikey, vamos, vámonos — exclamó, pero Mikey no se movió, solo siguió mirando a Corey.

— Vamos Corey, solo ven por un día o dos, eso es todo, entonces podrás irte y nunca tendrás que volver a vernos — dijo Mikey.

— ¿Pueden darnos un minuto? — preguntó Corey.

— Claro.

Mikey y Jake salieron de la habitación, podía escuchar a Jake decirle algo, pero no pude entender qué era. Corey suspiró y me miró.

— No voy a ir sin ti, así que depende de ti.

— Como si fuera a decir que no — respondí.

— Sí... pero quiero decir que no puedes simplemente irte, ¿verdad? — inquirió y me encogí de hombros.

— Creo que si puedo — declaré y él suspiró.

— ¿Eso significa que iremos?

— Solo si tú también quieres ir.

— No quiero, pero me temo que no se irán hasta que yo lo haga.

Se bajó del taburete y me dejó en el suelo junto a él, me agarró la mano y salimos a la sala donde Jake y Mikey estaban esperando. Mikey nos miró.

— Entonces, ¿vendrás? — cuestionó y Corey respiró hondo.

— Si — respondió.

Jake parecía sorprendido y Mikey sonrió.