Capítulo 36

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Drake era extremadamente bueno para mejorar cualquier situación, por eso le hacía decirles a mamá y papá que iba a visitar a la familia de Corey, no es que Drake tuviera ningún problema con eso, en realidad parecía emocionado.

— No estaremos allí por mucho tiempo — agregó Corey — Un día como máximo... menos que eso en realidad.

Drake asintió con la cabeza.

— Está todo bien, quédate todo el tiempo que quieras. Bueno, solo no te aconsejaría quedarte más de una semana, porque te perderías la boda, tu boda — declaró Drake.

Una vez que terminamos de hablar con Drake fui a ir a vestirme, me puse unos jeans negros, una camiseta blanca sin mangas y una chaqueta color gris con capucha, me calcé mis botas de combate y luego volví a mi habitación. Corey ya estaba vestido con sus habituales jeans negros, una chaqueta de cuero, debajo de la cual probablemente tenía una camiseta negra y sus zapatos negros que le gustaban mucho, creo que el nombre de estos era "Creepers", sonaba como una película de terror, pero eran lindos.

— ¿Alguna vez usas algún color? — inquirí.

— ¿Tu si? — respondió.

— El blanco cuenta como color — dije, señalando mi camiseta.

— No, el blanco es neutral, no tiene ningún color.

— Bueno, aún así, ha habido ocasiones en las que he usado color.

— También yo — declaró y se encogió de hombros.

— Pues yo no te he visto.

Miré a mi alrededor y hubo un silencio por unos momentos.

— Bien, creo que necesito aclarar algunas cosas — mencionó y lo miré.

— Adelante — dije, me recosté contra la pared junto al armario y él se revolvió su desordenado cabello.

— Um, bueno, como habrás notado, mentí sobre que mi familia estaba muerta — declaró y asentí.

— Si, lo noté solo un poco.

— Bueno, la razón por la que hice eso fue porque no te conocía tan bien en el momento en que lo preguntaste y no confiaba tanto en ti... y nunca volvió a salir el tema, así que no tuve la oportunidad  para decirte la verdad — dijo y asentí de nuevo — Y, um ... también mentí sobre mi edad, creo que dije que tenía como cien años o algo así, no lo recuerdo, pero el punto es que en realidad tengo como... treinta y ocho años o algo así.

— ¿Por qué dijiste que eras mayor? — pregunté, un poco confundida y él se encogió de hombros.

— Mi lógica está muy mal — respondió y solté una carcajada — Entonces ... ¿estás enojada?

— No.

— ¿En serio?, pero mentí. Dos veces.

— Y obviamente tienes un problema con las mentiras. Pero eso fue hace mucho tiempo, lo entiendo — le dije.

— Oh, genial.

Hubo un golpe en la puerta.

— ¿Cuánto tiempo se tardarán ustedes dos? — escuché a Mikey decir.

— Ya vamos, por Dios — respondió Corey con un tono de molestia.

Aparentemente no vivían tan lejos de aquí, como una hora más o menos. Corey y yo estábamos en el asiento trasero, Mikey estaba en el asiento delantero al lado de Jake, quien conducía. Corey jugaba con mi mano y tenía su cabeza baja, me di cuenta de que algo andaba mal y estaba bastante segura de que era porque íbamos a ver a su familia, no sabía por qué le temía tanto. Me incliné y besé la mejilla de Corey, vi las comisuras de sus labios levantarse en una sonrisa.

— ¿Estás bien? — le pregunté.

Él asintió y me rodeó con el brazo. Poco tiempo después, nos acercarnos a la puerta principal de una bonita casa de 3 pisos que estaba rodeada por kilómetros de bosques. Entramos en la casa y Jake miró a Corey.

— Dejamos tu habitación tal cual como estaba, mamá realmente no quería meterse con ella — habló Jake.

— Como si hubiera muerto — murmuró Corey.

Seguimos caminando, entramos en una habitación de color marfil con muebles negros y un televisor de pantalla plana sobre una mesa pequeña y negra. Había una niña sentada en el brazo del sofá con las piernas cruzadas, leyendo un libro, levantó la vista cuando entramos y abrió mucho los ojos.

— ¡Estamos de vuelta! — anunció Mikey — ¿Dónde están mamá y papá?

— Arriba — respondió ella, dejando su libro.

Corey estaba mirando alrededor de la habitación, evitando mirar a todos. La niña saltó del brazo del sofá, no estaba segura de si era solo yo, pero parecía que el ambiente estaba denso con un silencio incómodo. Jake se aclaró la garganta. 

— Um, Prin... — se detuvo y luego continuó — Arabelle, esta es Ivy, nuestra hermana.

Ivy me sonrió con timidez y yo le sonreí de vuelta.

— Hola — saludé.

— Hola — respondió ella.

Parecía ser como Jake, algo tímida y reservada.

— Bueno, voy a buscar a mamá y papá — dijo Mikey — Ojalá Corey realmente hable, o al menos mire a alguien — me miró y sonrió.

— Creo que realmente les vas a agradar — agregó Mikey y le sonreí en respuesta.

— Gracias.

Salió corriendo hacia el pasillo. Ivy miró a Corey.

— Es bueno verte de nuevo, Corey — dijo y él la miró.

— Eh... sí.

— Te ves diferente — declaró Ivy y él se pasó la mano por el pelo.

— Sí ... — replicó Corey y Jake lo miró.

— Sí, aunque todavía tienes el piercing en la nariz — mencionó, Corey asintió con la cabeza y luego Jake nos miró a los dos.

— Acabo de notar que ambos tienen piercing en la nariz, ¿eh, hicieron eso a propósito?

— Ella me copió — respondió Corey con una leve sonrisa y yo puse los ojos en blanco.

— Sí, porque quería ser tan genial como tú — dije con sarcasmo.

— Así es, estás tratando de ser tan mala como yo — declaró y lo miré.

— ¿Qué?, es verdad — agregó con una leve risa.

Ivy y Jake estaban sonriendo, mirándonos. Corey me sonrió tímidamente y agarró mi mano, uniendo nuestros dedos.

Mikey llegó corriendo de nuevo a la habitación, pero disminuyo la velocidad cuando entró. Dos personas entraron detrás de él, quienes supongo que eran sus padres. Me pregunté cuántos años tenían, porque, por supuesto, parecían bastante jóvenes, alrededor de los 25 años más o menos. Ambos nos evaluaron a Corey y a mí con expresiones de sorpresa. Mikey habló.

— Mamá, papá, esta es Arabelle, la princesa — sonrió — Y bueno, ya saben quién es Corey.

La mujer me sonrió cariñosamente.

— Soy Julia, es un placer conocerte — dijo y asentí.

No podía negar que estaba un poco nerviosa. Ella me ofreció su mano, la estreché y le sonreí. Ella era muy linda, tenía ojos oscuros, casi negros diría yo; cabello castaño oscuro muy rizado que caía sobre sus hombros y, por supuesto, piel clara.
Su padre se presentó con una leve sonrisa.

— Soy John, pero tu puedes simplemente llamarme papá — declaró y solté una carcajada.

— Lo haré.

Tenía el pelo corto y negro peinado rigurosamente hacia atrás y prominentes ojos color avellana. Él me sonrió y luego miró a Corey que estaba mirando hacia otro lado, mientras jugaba con su cabello, no podía decir si estaba nervioso o simplemente se sentía realmente incómodo, tal vez ambos. John puso una mano sobre el hombro de Corey y Corey lo miró.

— Es bueno verte — dijo John sinceramente y Corey simplemente continuó mirándolo fijamente sin decir una palabra.

Me preguntaba cuánto tiempo había pasado desde la última vez que se habían visto, John le sonrió esperanzado antes de pararse junto a Julia. Estaba empezando a preguntarme si Corey iba a hablar o no, espero que lo haga, porque no estoy segura de qué decir.

Forzada a Comprar un Esclavo Vampiro Donde viven las historias. Descúbrelo ahora