-Listo para nuestra primera cita hermoso.-dijo YoonGi con una hermosa sonrisa cuando vio a JiMin detrás de Taehyung.
JiMin trago pesado, se dio cuenta de la desilusión en los ojos de su amigo cuando este le volvio a mirar, tenía que explicarle, no quería quedar como un mal amigo, no cuando Taehyung lo ayudo tanto.
Porque si, Taehyung paso de ser solo su amigo para convertirse en su hermano mayor, lo cuidaba de todo, procuraba por él; Y una vez más JiMin confirmó que mentir nunca era bueno, si él le hubiera dicho desde un principio que YoonGi era aquel amor "imaginario" que Tae tanto se burlaba cuando lo veía fantaciar y apreciar aquella sortija.
No debió permitir eso, pero él que iba a saber era tan inocente que pensó que el ya no tenia lugar en el corazón de YoonGi, sin ser conciente de que el siempre fue dueño de este.-Tae puedo...-y su voz quedó en él aire, cuando aquel chico de dientes grandes también apareció justo detras de la espalda de YoonGi con una enorme sonrisa.
-Cariño.-dijo haciendo aún lado a YoonGi, para ocupar el ancho de la puerta.-has dejado la rosa que te regale en el auto.
Extendió esta hasta él pelirrojo quien la tomó con delicadeza y fingiendo una sonrisa, Tae sintió sus ojos picar, ¿iba a llorar?, sentía que no podía odiar a JiMin por enamorarse de YoonGi, solo que.. Se sentia totalmente engañado.
Él silencio se hizo por unos segundo, el típico que se presenta cuando una situación es demasiado incomoda o tensa, YoonGi lo noto, solo garraspeo su garganta y miro a su primo.-¿Cariño?.-le sonrió levantando ambas cejas.-No tenia idea de que estubieran saliendo, ¿por que no me dijiste nada?
Jungkook sonrió más que contento, se le notaba su enorme felicidad, Taehyung le había gustado desde la primera vez que lo vio e insulto, recordando no haber podido dormir esa noche debido a que él rostro de él pelirrojo no abandonaba su mente y era muy obvio que esa noche con esa pequeña cita que tuvo con él lo estaba matando de felicidad, quiso responderle a YoonGi, pues Taehyung le habia dicho que no era una mala idea conocerse de el todo y demonios no iba a olvidar nunca el beso en la mejilla que este le dio.-P-pues verás...
-No YoonGi, No estamos saliendo.-dijo Taehyung con una voz tan seria que hizo que la felicidad abandonará el cuerpo de Jungkook causándole ahora una pesadez muy extraña en su pecho.
JiMin quien observo como el labio inferior de Jungkook comenzó a temblar y comenzó a soltar risitas fingidas, confirmandole a YoonGi lo que Tae habia dicho, el pequeño pelirosa formo un leve puchero sabia que Jungkook se sentia muy triste.
-Bueno, nos gustaría seguir platicando, pero se nos hara tarde.-sonrio YoonGi.-nos vamos bebé.
Él pelirosa miro a su mejor amigo con ojos tristes.-Anda JiMin, no hagas esperar a tu novio, disfruta tu cita, amigo.- dijo esto ultimo con más fuerza y JiMin bajo su mirada caminando hacia YoonGi, para tomar su mano y marcharse con él.
No tardo en darse cuenta de que Jungkook venia atras ellos, cabizbajo y pudo jurar que venia limpiando su rostro, de algunas lagrimas traicioneras. Taehyung le había roto él corazón.
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Mágica, así describía YoonGi su primera cita con el pequeño JiMin, aún que no pudo negar ver una que otra vez un poco distraido al pelirosa y un poco triste, algo para nada común en el menor, pero quizo pensar que solo eran nervios.
Él azabache había reservado en un restaurante familiar llamado "la granja" sabía que era lo mejor que se le pudo haber ocurrido para la primera cita, pues el restaurante era con temática de granja como su nombre lo decia e incluso sonaría tonto pero estos tenian pequeñas vaquitas en un corral justo en medio de el restaurante y podias alimentarlas, junto a ellas habian borreguitos y pollitos.
Y YoonGi supo que había sido la mejor decisión cuando vio el semblante de felicidad de el menor, tanto así que tuvo que ir varías veces a buscarlo porque JiMin ya se había metido al corral de las vaquitas a abrazarlas.
Terminaron de comer y JiMin moría de ternura al ver a los niños correr por ahí, he incluso hizo que YoonGi por poco y se asfixiara con su comida al decirle que el quería 4 hijos.
Pero YoonGi asintió después de que JiMin le confesará que su motivo para tener tantos hijos era para que no crecieran solos como su madre y él, pues cuando su padre fallecio a causa de una enfermedad terminal, él no pudo tener más hermanitos y eso lo obligó a crecer desprotegido.
Después de esa charla tan amena, donde ambos se conocieron más afondo, descubrieron que sus gustos aun eran iguales; YoonGi casi arrastro a JiMin a un centro comercial donde estaba muy insistente en ir, este tenia zonas al aire libre, donde habian eventos de cualquier tipo.
Había mucha gente, JiMin pensó que talvez había un show de payasos y se asusto abrazándose muy fuerte de él brazo de YoonGi, quien lo miraba con una sonrisa.
Pero era solo una pasarela, unos niños salían y entraban vestidos de flores, JiMin sonrió tanto que sintió que sus mejillas dolian, se solto de el brazo de YoonGi y corrió para tomar asiento, pensó que era muy suertudo porque justo habian solo dos lugares vacíos enfrente, pero cuando llego a este encontro una cartulina de decia su nombre y se sorprendió de sobremanera, levanto su vista y busco a YoonGi pero este no estaba por ningun lado.
-¡Oh, tu debes de ser JiMin!.-una chica de cabello rojo le hablo.
-N-no puedo decirte mi nombre, eres una extraña.-junto su entre cejo y arrugo su rostro, causando que la chica tuviera un ataqué de ternura.
-Lo se, pero YoonGi quiere que te sientes aqui y lo esperes.
-¿T-tu conoces a mi Nov.. YoonGi?-se corrigió.
-Asi es, soy su prima, así que solo sientate aqui y entenderás.
JiMin asintió obedeciendo a la chica, dirigió su vista hacia la linda pasarela y aplaudía con una enorme sonrisa cuando los niños salían con sus lindos disfraces, pero su boca se abrio formando una enorme o cuando vio a YoonGi salir en una linda botarga de vaca, en una de sus manos sostenía un ramo de rosas y en la otra un micrófono.
Bajo de la tarima y se coloco frente a JiMin quien ya estaba muy confundido y feliz, no.. Eso era poco JiMin esta más que feliz de él gesto tan hermoso que YoonGi tuvo con el.
-Mi pequeño niño vaca, se que quizás es muy pronto para hacer esto, que quizas deberiamos tener más que una cita y que esto no es una pelicula de princesas donde conocen a su principe y al día siguiente se casan.-la gente comenzó a reir y JiMin sorbió su nariz y limpio las lágrimas que ya salían de sus ojos.-pero ahora entiendo, los príncipes le piden matrimonio porque tienen miedo de perder su amor, yo.. Este día no te pedire que te cases conmigo, pero si quiero pedirte.. Que.-YoonGi suspiro y se inclino dandole el arreglo de flores a JiMin.-¿Quieres ser mi novio?
JiMin solto un gritito de felicidad, era como las peliculas de amor que veia junto a su madre y él sentimiento se lo estaba comiendo vivo, eran un monton, le dolia su estomago y le palpitaba su corazón. Iba a contestar cuando entre la gente se escuchó un grito.
Esa voz JiMin la conocía perfectamente.
-¡Ay por un demonio ya di que si, este lugar cobra por hora y voy a quedar pobre!.-el menor rio al ver a su angel de la guarda parado en el escenario con un micrófono en la mano.-¡Namjoon porque no apagaste él micrófono animal, ya todos me escucharon!
Ambos rieron de ver a su amigo en común ir hacia su novio para pegarle con el aparato en la cabeza, YoonGi suspiro y miro al pequeño.-¿Y entonces?
-Si YoonGi, si quiero ser tu novio.
Y mando él arreglo de flores al pisó, para pasar ambos brazos alrededor se él cuello de él mayor y juntar sus labios en un suave beso.
JiMin estaba tan feliz, que por un momento olvido que en casa estaba su mejor amigo, sintiéndose el hombre más traicionado de el mundo.
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*Rosehopely*