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▪︎Chloe James ▪︎

Paso una mano por mi rostro y suspiro. Desde que salí de la casa de Liam no he hablado, Eros se limita a conducir pero sé que una pregunta o comentario esta picando la punta de su lengua. En el momento que dije esa simple palabra "¿qué? ", Liam asintió y sin decir nada más me dediqué a irme, porque no tenía palabras, porque no sabía qué decir o como reaccionar. Solo me zafé de su agarre y me fui al auto. ¿Qué se supone que debía decirle? Si está más claro que el agua, él estuvo con Reachell mientras estaba con Atenea y nunca me dijo nada por miedo a perderla, ahora le pidió un tiempo quizás para esperar el resultado de las pruebas.

— ¿Me dirás lo que sucedió? — Eros preguntó y yo seguí con mi vista fija en la carretera al igual que él.

— Solo discutimos por una estupidez. Nada importante.

— Ni tan estupidez — Dijo desconfiado —, sabes que puedes decirme lo que sea amor — Me incitó.

— Solo promete que no armarás un escándalo, que harás como si no supieras — Esta vez si me voltee teniendo la vista de su perfil, él solo asintió con el ceño fruncido — Liam y Atenea pelearon, él le dijo que no era por Reachell pero en realidad si.

Eros frenó en un semáforo en rojo y me miró — Si el bastardo se atrevió a engañar a mi hermana, te juro que...

— No — Interrumpí su discurso — no fue eso — Miento — Reachell antes de irse le dijo a Atenea que esperaba un hijo de Liam, él no lo creyó ya que Mark sacó la conclusión de que ese hijo era suyo.

— Osea que Liam se acostó con ella y jamás dijo nada — Concluyó y yo afirmé, no creo que él se pusiera hacer cuentas tampoco.

— Si, así fue. Lo supe después de que Mark sacó esa conclusión fue una vez que peleó con Atenea, así que no, nunca la engañó — Lo tranquilice, pero en realidad si cuenta como engaño. Estaban peleados, no separados — Ellos lo hablaron y decidieron olvidarlo ya que no pasó durante su noviazgo. Fue una única vez, según él fue el peor error que cometió y después ocurrió lo de Reachell, que ella se fue embarazada y sin decir nada.

Las palabras salen de mi boca y cuando las proceso, no las puedo creer. Reachell embarazada, Liam con ella, Mark siendo engañado y Atenea siendo arrollada por todo. Todo esto se basa en mentiras y engaños.

— Es una perra — Mascullo con rabia — y el imbecil de tu mejor amigo tiene que hablar, no puede quedarse así. Chloe si lastima a mi hermana voy a olvidarme de que es tu mejor amigo — Antes de arrancar de nuevo el auto me mira con seriedad.

— Si se lo dije, pero no podemos hacer nada, que ellos arreglen todo este lío. Liam antes de salir de su casa me dijo que habían hecho la prueba de ADN, así que en unos días se sabrá la verdad.

Eros no dice nada por un tiempo, pareciera estar tratando de digerir todo con lentitud queriendo comprender todo con calma. A los segundos todo su cuerpo se relaja y vuelve a la normalidad, igualmente tengo terror a lo que pudiera hacer cuando tenga a mi mejor amigo de frente.

— Tienes razón, que todo este lío lo arreglen ellos, nosotros no nos metemos — Dijo con seriedad — Y ya son adultos. Bueno solo Liam, Reachell y Mark. Que resuelvan todo y dejen a Atenea fuera de todo esto.

— Es lo mismo que pienso — Concuerdo.

La velocidad del auto fue disminuyendo y me di cuenta de que ya habíamos llegado a su casa. Este fin de semana me quedaba con él, mamá lo entendió aunque en el momento que Eros salió de alta, la vi y prometí que el próximo fin de semana si me quedaría con ella. Bajamos del auto y Eros rodea su brazo por encima de mis hombros yo paso el mío por su cintura y dejo un casto beso en sus labios provocando una sonrisa por su parte.

— Te ves tierno — Mencioné mientras él abría la puerta — cuando te sonrojas — Proseguí.

— No me sonrojé — Rió.

— Claro que sí.

Entramos a la casa y me tiré en el sofá mientras que él dejaba las cosas en su lugar. Antes de llegar hasta mi comenzó a reír, yo solo lo mire confundida, ¿qué mosca le había picado?

— ¿Ahora que sucede contigo? — Sonreí.

Negó con la cabeza lentamente mientras se acercaba a mi tuve que levantar un poco la cabeza para poder verlo a los ojos, él la agachó para quedar a mi altura cerca de mi nariz.

— Soy tan feliz en este momento — Murmuro, su olor a menta y cigarro se coló por mi nariz. Una mezcla extraña y nada desagradable — Te amo, Chloe.

— Yo también te amo — Acuno su rostro entre manos y rozo nuestras narices.

Él apoya sus manos en los reposabrazos y cierra los ojos disfrutando la caricia. Lo beso disfrutando el tacto y toda reacción de mi, desde los elefantes en mi estómago, hasta el calor en mis mejillas. Así pasamos la tarde entre besos, caricias, series, películas románticas que estuvo obligado a ver y yo de terror por venganza ya que él decía que lo había torturado. El drama nunca nos puede faltar.

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Mamá solía decirme de pequeña que "no todo es como quieres, aveces las cosas son como deben ser" y tenía razón, mucha razón.

En este momento deseo no irme, no estar subiendo la pesada maleta al auto de Liam pero desgraciadamente tengo que hacerlo. Hoy tengo que regresar, me estoy despidiendo de Eros. Atenea ni siquiera salió, solo me saludó en cuanto me vio en la cocina y ahora saluda desde lejos, desde su ventana.

— Te amo — Digo en cuanto nuestro beso se rompe —, no queiro irme — Me quejo.

— Yo tampoco quiero que te vayas — Aprieta más mi cintura — pero ten presente que el viernes ya tendremos nuestra primera cita — Susurra.

— Cursi — Respondo con el mismo tono de voz.

— Tú me vuelves cursi — Gruñe y yo río mientras él me da un pequeño beso en los labios — ahora ve o se hará tarde.

He aquí lo más dificil: volverlo a soltar. Estuve todo el fin de semana con él abrazando su cuerpo, sintiendo su calor y disfrutando de sus besos. Ahora estaba de vuelta a la Universidad a mi realidad con los nervios a flor de piel. No quería dejarlo solo.

— Cuidate mucho, por favor.

— Si, mamá — Bromea —, te llamaré cada noche.

— Lo tendré en cuenta — Me guiña un ojo y me voy al auto de Liam, subo en la parte trasera ya que dormiré en el camino y me despido con la mano. Eros me lanza un beso y yo finjo atraparlo mientras llevo la mano a mi corazón y el auto comienza a moverse.

— Son tan cursis — Liam se burla y empieza a reír.

— Ohhh cállate — Golpeo su hombro y hace una falsa mueca de dolor.

— ¡Eso dolió! — Chilla.

— Mentiroso — Ruedo los ojos y sonrío.

Era increíble como mi vida había cambiado otra vez. Pero me mantenía feliz saber que para bien porque a pesar de todo el lío entre mis amigos yo era feliz, feliz junto a la persona que escogí y que quiero, que por sobre todas las cosas o lo tóxicos que pudimos llegar a ser alguna vez, seguimos juntos, maduramos y nos queremos más que nunca. Porque de eso se trata; de apoyarse, de salir adelante y quererse cada día más. Que la confianza se haga fuerte y las mentiras sobren entre los dos.

Que todo sea mutuo, sano y que nos hagamos bien.

AmaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora