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"Es todo por hoy jóvenes, ¡tengan un buen fin de semana!" fue lo que dijo la maestra de educación física luego de haber hecho sonar su silbato. Y Hoseok estuvo a punto de hacer un baile de la victoria, si no fuera por el malestar en sus músculos, sentía que un movimiento más podría llevarlo a convertirse una pila de huesos y carne.

"Tae me dijo que planeas participar en el concurso de talentos" murmuró Jin logrando que Hoseok soltará un leve grito y saltara en su lugar.

"Oh, por dios, Jin, recuerdame comprarte un cascabel, un día me mataras" le dijo mientras jadeaba y mantenía una mano sobre su pecho. Reacción que fue correspondida con una carcajada.

"Vaya, que dramático te has puesto, Hoba-ah" seguía sonando burlón mientras despeinaba los cabellos castaños de su amigo. "Pero no me has dado respuesta aún"

"Sí, lo haré. Aunque dile a Tae que por bocón no le daré ningún chocolate hoy" habló seguro, aunque en el fondo sabía que terminaría haciendo lo que fuese con una mirada de cachorro que este le diera.

"Ya veremos eso. Pero bueno, es un alivio porque ya te había inscrito de todos modos" se encogió de hombros, sencillo.

"Que lindo es saber que mis amigos nunca, pero nunca harían algo sin mi consentimiento" bufó el menor mientras pateaba una piedrita.

"Que bueno que no tienes amigos así y en cambio, tienes a unos muy comprensivos, guapos y adorables" Jin se río contagiando inmediatamente al menor, que negaba con su cabeza ante las ocurrencias de su Hyung.

"Ya, ya. Está bien, no puedo negarlo" sintió la mano de su Hyung revolviendo sus cabellos y su sonrisa incremento.

Seokjin es cómo un hermano para él, siempre cuidandolo y velando por sus sueños. Es un gran amigo. Sus actos son nobles, nunca espera nada a cambio, es comprensivo y siempre hará lo posible para levantarle el ánimo.

"Ya quiero ver lo que harás, Seokie, sé que te irá de maravilla. Además, me tienes aquí, tú fan número uno, y prometo alentarte con todas mis fuerzas" extendió su dedo meñique siendo imitado por Hoseok entrelanzando ambos poco tiempo después.

"Muchas gracias, Jin Hyung, no sé que haría sin ti" le sonrió con sinceridad siendo respondido por un apretón en su mejilla del susodicho.

"Eres el bebé de está manada, es mi deber cuidarte" habló orgullosamente, inflando su pecho y levantando su frente.

"¿Manada?, has vuelto a ver Teen wolf, ¿verdad?" preguntó al chico que casi de inmediato comenzó a sonrojarse.

"Sabes que adoro esa serie, déjame en paz" y allí estaba ese puchero, el mismo con el que conseguía cualquier cosa porque ante los ojos de cualquiera se trataba de la cosita más adorable.

"¿Adoras más esa serie que a Tae?, según recuerdo le construiste un alt-" su boca fue tapada por la mano del pelinegro mientras murmuraba un bajo "shh"

"Creo que no te escucharon en Polonia, Hoseok, ¿podrías decirlo más fuerte?" gruñó cuando finalmente retiró su mano, por otro lado el aludido sólo se encogió de hombros llenando sus pulmones de aire a punto de gritar.

"Y no te atrevas o le diré a Nam que fuiste tú quién rompió su figurita del capitán américa y no mickey" Hoseok tragó fuertemente y fingió coser su boca, asegurando que nada saldría de sus labios.

Continuaron hablando de cosas triviales, cómo las clases de cocina en la que se las pasaba Jin o las suyas de baile, también que ambos consideraban empezar un curso de inglés fuera de la escuela por sus bajas notas en la materia. Aunque ambos había mejorado demasiado, aún se les complicaban varias cosas.

𝘤𝘢𝘭𝘭𝘢𝘥𝘰 𖥻𝗸𝗼𝗼𝗯𝗶Donde viven las historias. Descúbrelo ahora