𝘤𝘢𝘭𝘭𝘢𝘥𝘰 𖥻𝗸𝗼𝗼𝗯𝗶

19

Tomó una inspiración profunda y dejó salir todo el aire por su boca, era el día y estaba temblando como gelatina. Levantó su mano hasta el timbre y se quedó a unos centímetros de presionarlo, ¡vamos!, sólo debía acercarse un poco más, ¿que podría pasar?

Bueno, el sonido de la puerta y luego un alto muchacho parado en el marco de esta. Lo vió hacer una "O" perfecta con sus labios y luego se convirtió en una mueca maliciosa, ¿qué debería pensar al respecto?

Sacó su teléfono y revisó la dirección que Hoseok le adjuntó por mensaje, bien, estaba en el mismo lugar.

"¡Hoseok, tú chico está aquí!" tú chico, inevitablemente, una sensación de bienestar lo invadió.

"¡No lo asuste, hyung!" gruñó el muchacho, empujando al otro con sus manos hacía un lado, dejandole libre el paso.

"¡Jungkook!, lamento eso, es un tonto a veces o todo el tiempo"susurró lo último, pero lastimosamente el muchacho lo escuchó y golpeó la parte posterior de su cabeza con la palma de su mano, ganandose otro gruñido y luego un puchero en forma de triángulo.

¡Es hermoso!

"Sólo ignoralo, pasa, bienvenido a mi humilde morada" tomó su mano y lo arrastró al interior de la casa. Jungkook quitó sus zapatos y los dejó en el mueble en dónde los guardaban, luego Hoseok le tendió unas pantuflas de osos.

"No te rías, son muy cómodas" bufó el castaño con diversión, notando que de todo el conjunto, eran lo único que desentonaban.

Jungkook mordió su labio inferior y le tendió a Hoseok la caja que había mantenido en sus manos. El muchacho le dió una mirada curiosa, pero finalmente la tomó.

"E-es un pastel de media luna" sonrió y rasco su nuca, nervioso.

"¡Es mi favorito!" celebró trayendo de inmediato todas las miradas de los presentes en la sala. "¡Atrás bestias!" les dijo el chico cuando se giró hacía ellos y echó a correr a lo que parecía la cocina.

oh, no, se había quedado solo y lo estaban observando. ¿Qué debería hacer?, quizás saludar, acercarse, preguntar que hacían. Su garganta se había cerrado y sentía como su corazón comenzaba a latir con fuerza contra su pecho. Lamió sus labios y levantó su mano suavemente sacudiendola de un lado a otro, recibió el mismo gesto acompañado de una sonrisa.

"Si este chico no es tú novio Hoseok, eres un completo tonto" le dijo la chica sentada en el sillón individual logrando hacer enrojecer al susodicho.

"¡Somos amigos, Jiwoo!, ¿por qué ves todo con esos ojos?" le sacó la lengua y volvió junto a él.

"Sexto sentido, tal vez" la muchacha se encogió de hombros.

"Se cree vidente a veces, debiste verla cuando quería mover la cuchara para comer cereal con su mente" se burló dandole una rápida mirada.

"Lo bueno de todo esto es que al menos no fuí yo quién se lanzó de su cama porque creía tener una capa con poderes para volar" Hoseok jadeó ofendido.

"¡Como te atreves, dijiste que guardarías el secreto!"

"¡Tú empezaste!"

"Ya, niños, comportense, hay visitas. ¿Cómo estás querido?" interrumpió la mujer mayor poniendo toda su atención en él, que se había matenido entretenido y divertido con la disputa de ambos hermanos.

"Oh, e-estoy muy bien señora..." se sintió un poco avergonzado en ese momento, hasta que la escucho reír haciendo del ambiente más cómodo.

"Vamos, no luzco tan vieja, solo dime Hyejin, es un gusto..." la vió dudar, así que esbozando una sonrisa respondió:

"Jungkook"

"Es un gusto, Jungkook" le entregó una sonrisa en dónde notó la similitud de está con la del castaño, pero en cambio, poseía un toque más maternal.

"Ya que nadie piensa presentarme" habló el chico quién ateriormente le había abierto la puerta. "Soy Namjoon, hermano mayor y el más hermoso por cierto, un gusto"

"Presumido" rodó sus ojos la pelinegra antes de fijarse en él de nuevo. "Yo soy Jiwoo, la más cuerda en esta casa"

"El más cuerdo aquí es Mickey, ¿qué dices?" le contradijo el hombre mayor que venía bajando las escaleras con el mencionado tras suyo, quién al ver el intruso se acercó para olfatearlo, Hoseok le hizo un gesto para que se mantuviese en calma. Luego de la inspección, Mickey comenzó a dar saltos a su alrededor, ladrando y moviendo su colita.

"Oh, mira, le agradas" le dijo el hombre admirando la escena también. "Y a mí también, mi nombre es Hyunwoo" le dijo amablemente palmeando su hombro y luego pasando hacía la sala con el resto de la familia, asumió que se trataba del padre del Hoseok.

"Estabamos a punto de jugar bingo, ¿te unes?"

☁️

"B-12" dijo Hoseok quién se hayaba en el suelo y era el encargado de dar las coordenadas.

"Bingo" saltó Jiwoo en su sitio.

"¡Mientes con todos los dientes, ahí te falta un espacio, sientese señora!" bramó Namjoon apuntando hacía ella, acusandola.

"Ah, rayos, sí es cierto" dijo desanimada la pelinegra causando risas en todos en dicha habitación.

"I-7" comenzó de nuevo Hoseok, fue el designado porque no quedaban más tablas para él, pero se divertía con las ocurrencias de su familia y al parecer, Jungkook también.

"¡Bingo!"

"¡Bingo!"

Gritaron los dos mayores al mismo tiempo y de inmediato se fulminaron.

"Yo lo dije primero, tú qué" gruñó la mujer a su esposo mirandole con recelo.

"De que hablas, fueron 0.5 segundos diferencia" contra atacó el mayor.

"Tsk, ¿cómo podrías saberlo?" alegó la mayor, no estaba dispuesta a ceder.

"Oh, ¿eso es humo que sale de la cocina?" apuntó el hombre a la entrada provocando que todos se alarmaran y mirasen allí. Cuando un sonido sordo inundó la sala y de repente la tabla y fichas estaban en el suelo.

Un sonido de "Uh" por parte de Namjoon y las carcajada de Hoseok y Jungkook irrumpieron el sepulcral silencio que se había instalado entre los presentes.

"Jung Hyunwoo, ¡eres un traidor!" se levantó exaltada de su lugar con el rubor cubriendo sus mejillas, oh no, estaba enojada.

"¡Fue el viento!" se levantó el mayor también tratando de contener sus risas. En tanto a Jungkook y Hoseok ya le dolían sus barriguitas por ellas.

"Y encima me mientes, no sé sí ofenderme o... espera, ¡ofenderme por supuesto!" gruñó la mayor, parecía a punto de lanzarse sobre su esposo, entonces allí fue cuando Hoseok intervino.