𝘤𝘢𝘭𝘭𝘢𝘥𝘰 𖥻𝗸𝗼𝗼𝗯𝗶

14

Por un buen rato lo único que lleno el espacio fue el bullicio del resto de los estudiantes y constante chocar de los cubiertos con los platos, pero se sentía familiar y demasiado cómodo, últimamente, con Jungkook así se sentían las cosas. Era demasiado genuino y tranquilo, pese a la energética personalidad de Hoseok, siente que, a lo mejor la presencia de Jungkook sea necesaria en su vida.
Y suena descabellado, lo conoce de hace unas semanas, pero ahora siente que nada sería igual sin verlo al menos en los pasillos o sin sus ojos sobre el mirando con interes aunque a veces solo diga cosas torpes. Hoseok descubrió que le gusta hacerlo reír y que le gusta hablarle aunque a veces no reciba una respuesta, se conforma con saber que le está prestando atención, aunque no niega que cuando escucha su voz siente algo removerse en su interior. Hoseok quiere conocer mucho más sobre él.

"¿Te molestaría si hago algunas preguntas?" sonó mucho más compremetedor de lo que deseaba y lo supo cuando se ganó una mirada curiosa del muchacho al otro lado de la mesa.

"Es sólo por curiosidad" sonaba nervioso y ni siquiera él sabía por qué exactamente, pese a eso, Jungkook presionó sus labios en una sonrisa y asintió.

"¿Cuál es tú materia favorita?" algo muy trivial en realidad, pues no tenía intención de incomodarlo.

Lo vió fruncir el ceño por unos minutos mirando hacía su plato con la mitad de la tarta, al parecer, pensaba al respecto.

"Matemáticas, química y psicología. Sé que preguntaste sólo por una, pero la realidad es que, no puedo decidirme" murmuró al final con un tono apenado, mientras Hoseok se encontraba sorprendido en su lugar. Es decir, son las materias más complicadas en realidad y nunca creyó escuchar a alguien que las mencionara como sus favoritas, pero, tampoco descartaba la idea de que alguien las eligiera.

"Ciertamente son muy interesantes, aunque su nivel de dificultad las haga un poco tediosas" no eran las favoritas de Hoseok, por supuesto, pero no quiere decir que por eso no se esfuerce en ellas.

"Solo requieren un poco más de atención y cuando no entiendas algo, es mejor consultarlo y dominarlo antes de pasar al tema siguiente para que no se te dificulte aún más después" eso sonaba como una buena técnica, debería implementarla más seguido. Lo vió titubear por un momento antes de escucharlo de nuevo. "Si necesitas ayuda puedes hablarme, quizás pueda ayudar" esas mejillas rojas, la mirada hacía abajo. Hoseok pudo haberse derretido allí mismo.

"¡Por supuesto!, lo tomo, espera" dijo en su lugar y pronto comenzó a buscar un lápiz y un cuaderno en su mochila. Al tenerlos a ambos en sus manos, comenzó a escribir una serie de números en la parte inferior de una hoja, luego lo arrancó y se lo pasó a Jungkook. "Es mi número, puedes escribirme o llamarme más tarde y así también podría contactarte mucho más fácil."

El muchacho lo tomó en sus manos y luego le dió la mirada más brillante que había visto nunca... hasta ese momento.

"Lo haré" le dijo, mientras comenzaba a doblar el papel para ponerlo después en su bolsillo.

"¿Tienes mascotas?" hizo una nueva pregunta mientras llevaba otra cucharada de su tarta hacía su boca.

"No, quizás en un futuro. Me gustaría tener un gato" el castaño asintió ante la información.

"Cuando planees tener uno avísame, iré contigo y te ayudaré a buscar un gran nombre" sugirió el castaño, ganandose una sonrisa divertida por parte de Jungkook

Hoseok continuó por minutos con diferentes preguntas, siendo todas respondidas amablemente por Jungkook. También fueron muchas las preguntas dirigidas para Hoseok y el no se negó en ningún momento.

Entonces, llegó otra incognita.

"Hoseok, ¿qué piensas sobre el amor?" lo tomó por sorpresa y definitivamente, no sabía cuál era la respuesta correcta está vez.

"Ahora me dirás que es para una tarea" se rió nervioso evitando la mirada del muchacho, que era algo más intensa que las anteriores.

"No, sólo quiero saberlo" no había una piza de burla en su voz, nada más que honestidad pura, la misma con la que suele hablar aquel azabache.

Hoseok soltó un suspiro y calló por unos minutos, divagando en su mente.

"Existen diferentes tipos de amor: el amor que le tienes a tú familia, a tú mascosta, a tú vocación, a tus amigos y a tú pareja. Creo que, el amor es unidad y es complemento. Te hace sentir que todo es correcto y que mientras exista, el mundo no será del todo malo" le dijo, pero, realmente no sonaba seguro del todo y aquello desconcertó un poco a Jungkook, pero no hizo más preguntas al respecto. Luego Hoseok le devolvió la mirada. "¿Qué piensas tú, Jungkook?" posicionó ambos codos sobre la mesa y dejó descansar su barbilla sobre las palmas de sus manos.

"El amor es compartir, llorar, reír y disfrutar junto a las personas que amamos y sentirnos llenos por eso. Cuando no estás esperando nada a cambio porque verlos siendo felices, solo existiendo ya es suficiente para ti" sus ojos se mantenían sobre los de Hoseok y una sonrisa se ensanchó en sus labios "el amor es como un abrazo, cálido, amplio y fuerte, te sostiene y sana. Entonces, te hace sentir bien contigo mismo, te ayuda a crecer y te transforma de una manera tan profunda que te hace sentir nuevo, como si fueses un niño otra vez y todas las cosas lucen maravillosas. El amor es humanidad, cuando miras hacía sus ojos y encuentras en ellos la sinceridad, el reflejo de su alma y te hace sentir en casa" el timbre fue el que le dió final a todas las palabrad del pelinegro, las misma que continuaron burbujeando en su pecho, que pedían salir, pero Jungkook sabía que aquel no era el momento.

Soltó una suave risa y se levantó de su lugar, los ojos de Hoseok lo siguieron, sin una palabra de por medio, pues se sentía incapaz de hablar.

"Vas a llegar tarde, Hobi, de hecho, vamos a llegar tarde, arriba" le tendió su mano con gentiliza cuando Hoseok por fin despertó de su ensoñación y la tomó.

"Hace mucho tiempo no almorzaba con nadie, gracias por invitarme" fue lo último que dijo antes de marcharse hacía su aula cuando estuvieron en frente de la puerta correspondiente al castaño y el lo observó hasta desaparecer.

Algo en esas palabras lo dejaron inquieto, como si... ¡No!, quizás... Estaba alucinando, no podría ser. Negó con su cabeza ante todos esos pensamientos y finalmente entro a su clase queriendo callar todas las ideas que florecian en su cabeza.