Creo que mi cena viene de regreso por mi garganta, le velocidad a la que vamos es indescriptible, hecho un vistazo al tacómetro, no veo los números solo puedo ver que la brillante aguja esta hasta el límite, desciende algunos céntimetros pero vuelve a subir.
Veo a mi subconsciente vomitando en una bolsa de papel.
Vamos tan deprisa que no alcanzo a ver en donde estamos solo veo lineas que pasan rápidamente.
-¿Quieren algo de comer? Muero de hambre- Baltazar se queja- ¿tu no quieres nada preciosa?- aparta la vista del camino y se dirige a Kira con ese mismo tono coqueto.
-No Baltazar, ni se te ocurra parar, puede que nos esten siguiendo.-Lo reprende Kira mientras jugetea con una aparato parecido a una tablet sin levantar la mirada.
-Un no, era suficiente- responde Baltazar burlandose- ¿y tu Guillermo? Seguro que no quieres nada.- Baltazar pregunta observandome por el retrovisor con esos intimidantes ojos negros.
Lo unico que puedo hacer es negar con un gesto, voy a vomitar y no creo que determe para comer ayude.
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Entramos a un especie de bosque, a lo lejos veo luces, luces que brillan con mas intensidad conforme nos acercamos, Baltazar reduce un poco la velocidad y estamos frente a una puerta doble gigante de metal con una "C" grabada en el centro y dos columnas de piedra blanca a los lados, por los cuales se extiende una alta pared del mismo material con pequeños faros en la parte de arriba.
Baltazar se acerca a lo que parece un parlante.
-Alex, soy yo, Baltazar.
-Buenas noches Señor.- del parlante puedo escuchar una voz masculina.
Kira aparta la vista de esa "tablet" y pasa por encima de Baltazar llegando hasta el parlante.
-¡Hola Alex!- Saluda Kira como una niña de 5 años es un cambio de personalidad muy radical, mientras tanto Baltazar esta inmóvil con una cara de sorpresa
-Hola señorita Stone.- mientras esas palabras se escuchan del parlante, la gigante puerta se abre por la mitad, dejando la elegante "C" dividida en dos.
-Gracias Alex.
-Estoy a sus ordenes señor.
Pasamos por la elegante puerta y siento esa misma sensación que experimente cuando llegue al edificio de la empresa de Baltazar, aunque no deberia sorprenderme ya que la empresa es suya.
Pasamos por un pequeño camino bordeado con cesped de un verde majestuoso e iluminado con aquellos pequeños faroles muy elegantes a cada metro de distancia, luego llegamos a un pequeño retorno, en el centro una esfera de cesped con arbustos recortados perfectamente para formar otra "C". ¡Es impresionante!
Frente al retorno se encuentran enormes escalones, que disminuyen de tamaño al acercarse a una enorme puerta de madera y a los lados paredes acristaladas con algunas vigas de madera gigantescas creo que la casa tiene mas cristal que otro material.
De la nada aparece un hombre de no tan baja estatura, rubio y de ojos azules.
-¿Señor?- pregunta con la mano extendida.
-Gracias Henry- Baltazar le responde con el rostro serio mientras apaga el auto y salimos todos de el, estando fuera Baltazar le entrega las llaves a Henry el cual enciende el auto de nuevo y se dirige por otro camino un poco mas oscuro asi que solo se pueden observar las luces rojas traseras del auto.
-Por aqui- manifiesta Baltazar con esa misma seriedad que poseia en la entrevista, no entiendo porque Kira y Baltazar cambiaron de actitud tan repentinamente.
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Diario de un Cazador
Science FictionNo todo es lo que parece, pensó que tendría una vida normal, pero todo cambió, lo que tendrá que hacer desde ahora será seguir una sola regla.... Cazar o ser Cazado. Una historia original, de romance, suspenso y acción vistas de una forma diferente...