Capitulo quince

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Rubius estaba asombrado con cada palabra que decían sus amigos. Cuando acabo se quedó con una cara de confusión. Parecía como si tuviera 2IQ pero no era así, el es un chico brillante, y esa situación es muy difícil asimilarla. Conocía a Frank de algún lugar, era muy famoso. Pero igualmente, le llegó a los oídos la pelea que tuvo con Willy. Los chismes corrían muy rápido.

-A ver, a ver.- trató de analizar todo.- Frank está bien, creen que es de la Hermandad Oscura ¿Eso fue lo que escuche?

-Algo así, chiqui-dijo Vegetta.-El es un viejo y muy buen amigo, necesitamos ayudarle.

-Claro que si, Señor De Luque- se acercó y le abrazo.+

-Gracias, próximo Rubén De Luque.- le dio un pequeño beso en los labios.

-¡Chicos! ¡Tenemos que ayudar a Frank!- dijo Luzu, riéndose.

-¡Cerdos!- grito Auron.

-Bueno, cada quien necesita leer por lo menos un libro- ordenó Alex.

-¡No quiero leer!- dijo Rubius, haciéndose el de rogar.

-¡Si lees uno, te doy un besito!~- dijo Vege, canturreando.

-¡De inmediato!

Se pusieron a leer diferentes libros, venía de todo para despertar a una persona. Desde exorcismos, pócimas, remedios u hechizos. Venía el famos Beso de amor verdadero. Al leerlo, Vegetta soltó una carcajada. Creía en el amor verdadero ¿pero como iban a saber quien era el amor de una persona dormida? Eso era imposible, en primer lugar, nadie debía saber que Frank estaba ahí, el segundo punto ¿es que como iban a encontrarlo?
Todos miraron a Alex, el fue algo así como su amor durante un tiempo, hasta su destierro. Pero ambos fueron separados por esa razón. Los gustos cambiaron y eso provocó dolor en el corazón del chico. Pero lo logro superar.

-No puedo...- susurró Alex.

- ¡Tienes que intentarlo!- chilló Auron- Si no lo intentas, podrías arrepentirte. Lo hemos hablado en sesión, Alex.

-Tienes razón... solo lo pensare...-dijo.- mientras intentemos con un hechizo ¿No?

Malas noticias, ni uno solo que venía el libro función. Era una lastima. Luzu dio lo mejor de sí, tanto como los otros chicos. Luzu se deprimió rápido, por lo que Auron le abrazó, rodeándole el pecho con sus brazos.

- Todo estará bien, Luzu...

- No... bueno, contigo a mi lado, todo es perfecto.

-Que cursi, Luzu- le dio un beso en la mejilla.-¿Te sientes bien?

-No... necesito ayudarles, pero primero necesito ayudarme.

-¿Y que puedo hacer para que te tranquilices?

-Podemos irnos a casa- esta última palabra la alargo.

-¿La tuya o la mía?

-La nuestra.

-Pues andando.

Se despidieron. Pusieron la excusa de ir a buscar más libros en casa de Luzu. Ellos fueron caminando a la casa, que quedaba cerca de la casa de AlexBy, iban caminando abrazados, observando el paisaje. Vieron el pueblo con cierta tranquilidad. El juicio, Frank, la pelea, y otros casos estaban volviendo loco a todo el mundo. Algo ocultaba Merlon, eso era evidente. Parecía tener miedo contra los 9 chicos y la Hermandad Original. Llegaron a casa de Luzu se acostaron en el sofá besándose. De repente, Auron se subió arriba de Luzu, observándole de manera coqueta.

-¿Por donde empezar?- preguntó a si mismo. Sus dedos se dirigieron a su camisa, aún colocada.-¿Por aquí o...- bajo a su pantalón.- por aquí?

-Mejor por un besito.- se apresuró Luzu, estirándose un poco para darle un ligero beso. Pacífico, pero la intensidad aumentaba por momentos. Pronto, ambos estarían deseándolo.

Nada será igualDonde viven las historias. Descúbrelo ahora